La marinada con Pedro Ximénez realza el sabor de la carne y le da jugosidad, la frescura láctea del queso de cabra se mezcla con el jugo agridulce del tomate para formar un aderezo exquisito y las patatas cocidas y los champiñones salteados conforman la base perfecta para este original timbal. Nada falla en esta receta. La diversidad de texturas y sabores encajan a la perfección. Su elaboración tampoco es especialmente difícil ni requiere mucho tiempo. Tampoco se necesita tener un molde timbal para montar el plato porque todos los ingredientes se cortan en rodajas. Además, es una receta económica ya que el solomillo de cerdo es mucho más asequible que el de ternera. Las tartaletas de hojaldre con y solomillo de cerdo , el solomillo de cerdo asado y laqueado con puré de manzana y el rollo de solomillo con paté y jamón son otras buenas opciones para impresionar a los comensales en comidas señaladas. Variantes de los timbales de solomillo de cerdo: En caso de no tener Pedro Ximénez, sustitúyelo por otro vino tinto dulce tipo Málaga. Si no quieres usar alcohol, haz una reducción de zumo de uva tinta con un poco de azúcar moreno y una pizca de canela molida. El queso de cabra es sustituible por rodajas de queso mozzarella. Como toque final, puedes esparcir un poco de perejil, romero, salvia o tomillo picado.