Muy fáciles de realizar y sabrosas, las anillas de calamar en tempura quedan tiernas y con un rebozado crujiente y esponjoso. Perfectas para tomar a la hora del aperitivo, en plan tapita, o como primer plato, están tan ricas que gustarán a todo el mundo. No habrá nadie que se resista a comerlas. Y para que el plato esté todavía más apetitoso lo acompañamos con mojo picón . El puntito picante de esta salsa canaria combina a la perfección con la tempura. ¡Pruébalo! Uno de los trucos para que la masa de la tempura quede perfecta es utilizar agua helada . Cuanto más fría esté (con hielos o casi congelada), mejor. Bate una yema de huevo con el agua, añade la harina de golpe y remueve hasta que tengas una textura grumosa y semilíquida. Respecto a la fritura, es importante que el aceite esté bien caliente, pero sin que llegue a humear. Puedes saber si está a la temperatura adecuada, echándole unas gotitas de tempura. Si estas suben rápidamente hacia la superficie, el aceite está a punto. Luego, fríe las anillas por tandas para que no baje la temperatura y sírvelas enseguida. Así el rebozado te quedará crujiente y nada aceitoso. Si quieres conocer más recetas con tempura, echa un vistazo a la de verduras y gambas , a la de huevos de codorniz o a las alcachofas con salsa . Consejos para la tempura de calamares con mojo quede exquisita Es muy importante que la masa de la tempura esté muy fría. Si tienes que rebozar muchas anillas de calamar u otros alimentos, coloca la masa en un baño María de agua con cubitos de hielo para que se mantenga fría todo el tiempo. Si quieres que la tempura te quede todavía más esponjosa, usa agua con gas o cerveza . Si te sobra masa, corta algunas verduras que tengas en casa (zanahoria, calabacín, pimiento…) en bastoncitos y rebózalas con la tempura. En el momento de elegir el aceite de oliva para realizar la fritura, escoge uno que sea suave. Si es muy intenso, le aportará demasiado sabor. Al retirar las anillas del aceite, déjalas escurrir sobre papel absorbente de cocina. Procura no ponerlas unas encima de las otras porque las que queden debajo perderán su punto crujiente.