La pularda rellena es un plato que suele prepararse en las fiestas navideñas o para cualquier evento gastronómico festivo. Este tipo de ave es una gallina que no ha puesto huevos y que en su proceso de cría se separa de los machos para conseguir alargar el comienzo de la puesta. Este proceso lento es de unos 5-6 meses y se obtiene con ello una carne tierna con un sabor más fino . Su peso puede llegar a los 3 kg. Para este plato utilizamos la pularda ya deshuesada para introducir el relleno de higos (hervidos con ron), manzana, nueces picadas, cebolla, especias y trufa. Y queda tan sabroso al final porque lo dejamos reposar con el relleno 24 horas en la nevera, atado ya, antes de cocinar. Además, tiene un original acompañamiento de boniato y cebollitas. También puedes rellenar la pularda entera con dátiles y almendras o con patatas y setas de temporada . Consejos para una pularda rellena de manzana, higos y nueces perfecta La pularda. No siempre la encontrarás en el mercado, si la encargas para esta receta pídela ya deshuesada porque no es fácil hacerlo en casa. También podrías prepararla entera, introduciendo el relleno, si lo prefieres. Higos secos. Los higos no los introducimos directamente, los hervimos solo durante un minuto con un vaso de agua y una copita de ron, añejo, si puede ser. Luego ese caldo servirá para ir rociando el horneado. Mantequilla. Déjala a temperatura ambiente para que puedas extenderla bien por toda la carne de la pularda antes de pasar a la bandeja de horno. Boniato. Si no encuentras o no te gusta demasiado el boniato, también puedes utilizar para el acompañamiento zanahorias baby o patatitas pequeñas, además de las cebolletas.