¿A quién no le gusta un plato de pasta con queso ? Pocas personas son capaces de resistirse a este manjar que con unos pocos ingredientes resulta completamente irresistible. Nuestra propuesta pasa por una forma de servir estas cintas de lo más especial y es que cumplimos el sueño de todo amante del queso que se precie: hacemos "platos" de parmesano. No es nada complicado pero hay que fundir primero el queso en una sartén antiadherente y mientras está todavía caliente dejarlo enfriar sobre la base de un cuenco para que coja la forma. La receta de pasta se prepara de manera muy muy sencilla. Solo hay que saltear unas setas con cebolla y añadir nata. Dejar que reduzca un poco y aromatizar con trufa y pimienta blanca. Después, solo hay que poner las cintas sobre nuestros cuenquitos de queso , añadir la yema de huevo y las escamas de sal y disfrutar de esta maravilla. Pero calma porque la mejor parte es el final, piensa en cuando por fin puedas comerte el plato de queso que ya va a estar empapado de la salsita de nata y el sabor de las setas... Pura fantasía para incondicionales de la comida italiana. Consejos: Esta receta está ideada para servirla en un día especial pero se puede adaptar fácilmente para el día a día convirtiéndola en una auténtica carbonara de setas . Prescinde de la nata y de los cuencos de parmesano. Agrega la yema de huevo cuando tengas la pasta y las setas en la olla y luego pon el parmesano rallado. Remueve bien y se formará una salsita deliciosa, una carbonara de verdad , que se hace en un periquete. Si quieres añadir proteína a este plato te recomendamos que optes por unas tiras de panceta hechas a la plancha en otra sartén para poder retirar la mayor parte de la grasita que suelten.