3 menús de Cuaresma con recetas de la abuela y postres típicos de Semana Santa

Comienza la época de penitencia y con ello la abstinencia de determinados alimentos como la carne, pero eso no significa que no podamos disfrutar igualmente y comer de manera equilibrada.

Por eso, tanto si te vas de vacaciones como si te quedas en casa, hemos preparado 3 menús sin carne con recetas sencillas y con ingredientes como el bacalao (pescado por excelencia para esta época del año), platos con elementos de la huerta, y varios dulces típicos de Semana Santa.

Son 9 platos en total, que puedes combinar como te apetezca, eligiendo uno de los primeros, uno de los principales y uno de los postres. Porque todos combinan muy bien entre sí y están superbuenos.

Menú de Cuaresma nº1

• Entrante: Huevos rellenos de atún y salmón
• Principal: Arroz caldoso de pescado
• Postre: Pestiños

Huevos rellenos

Los huevos rellenos son un entrante perfecto para esta época del año, así como para un picoteo informal. Una receta muy sencilla y simple, pero a la vez riquísima.

Esta es la receta más clásica, se rellenan los huevos con una mezcla de yema cocida, atún en aceite de oliva y mayonesa. Si la haces casera el sabor será inmejorable. Se rellenan con una manga pastelera para que queden más bonitos, y se sirven con una lonchita de salmón ahumado y una ramita de perejil fresco.

Arroz caldoso de pescado

Este arroz caldoso es ideal para un almuerzo en familia. Sigue las indicaciones de la receta para que el arroz quede sabroso y en su punto.

Se prepara con arroz bomba, que se sofríe un poco con aceite de oliva antes de añadir el caldo de pescado. Lleva rape, langostinos y almejas, además de un sabroso sofrito de ajo, pimiento y tomate sazonado con pimentón dulce.

El secreto para que el pescado y el marisco esté perfectamente cocido y sin pasarse, es añadirlo cuando falten 3 minutos para finalizar la cocción del arroz. Cuando lo tengas listo, sírvelo recién hecho espolvoreado con perejil picado.

Pestiños

Nada hay más tradicional que los pestiños en Semana Santa, una receta que va pasando de generación en generación y que siempre encanta a todos. Parece mentira que un dulce tan rico y apetecible como unos pestiños bañados en miel se preparen en solo 25 minutos.

Prepáralos con las cantidades exactas de cada uno de los ingredientes necesarios: harina, aceite de oliva, vino blanco, semillas de anís, miel, cáscara de limón y una pizca de sal. Únicamente tendrás que hacer la masa, darle la forma tradicional y freírlos en abundante aceite caliente. Después báñalos con una mezcla de miel y agua y déjalos enfriar antes de servir.

Menú de Cuaresma nº2

• Entrante: Buñuelos de bacalao
• Principal: Potaje de garbanzos con chipirones y langostinos
• Postre: Torrijas

Buñuelos de bacalao

Otro clásico que no podría faltar en nuestro menú de Cuaresma son los buñuelos de bacalao. La clave para que queden suaves por dentro y doraditos por fuera está en la fritura.

Prepara la masa mezclando cebolleta bien picadita, bacalao desmigado, perejil, huevo, harina y levadura, hasta que consigas una pasta homogénea y sin grumos. Calienta aceite en una sartén y vierte la masa en forma de bolitas para que se frían durante 3 minutos. Asegúrate de ir controlando la temperatura del aceite para evitar que se queme.

Potaje de garbanzos con chipirones y langostinos

No podíamos elaborar un menú de Cuaresma sin un buen guiso, y mucho menos si está tan rico como este potaje de garbanzos con chipirones y langostinos.

Prepararlo es mucho más rápido de lo que parece, pon los garbanzos en remojo la noche anterior y tendrás los garbanzos cocidos en sólo 40 minutos. El guiso queda enriquecido por el sofrito a base de cebolla, ajo, tomate, azafrán y vino blanco. Además se le añade caldo de pescado para potenciar los sabores y se sirve con cebollino fresco espolvoreado.

Torrijas

¿Quién puede resistirse a unas torrijas caseras de las de toda la vida? Si te preocupan las calorías, seguro que puedes hacer una excepción esos días y disfrutar de uno de los dulces favoritos de Cuaresma.

Para prepararlas necesitarás una barra de pan del día anterior, leche, huevo, azúcar, canela y miel. Empieza bañando el pan en leche tibia infusionada con canela y déjalas reposar unos minutos para que absorban bien la leche pero sin que se reblandezcan demasiado. Escurre las torrijas, pásalas por huevo batido y fríelas en aceite caliente 3 minutos por cada lado. Escúrrelas sobre un papel de cocina y sírvelas con un poco de miel por encima, o bien espolvoreadas con azúcar y canela.

Menú de Cuaresma nº3

• Entrante: Espinacas a la cordobesa con picatostes
• Principal: Cazuelitas de bacalao con pimiento y patatas
• Postre: Hojuelas

Espinacas a la cordobesa con picatostes

Esta receta de espinacas es ideal como entrante ligero para un menú de Cuaresma. Una receta rápida, rica y muy saludable a base de espinacas, con unos ajos laminados y sazonadas con pimentón y un chorrito de vinagre.

Sírvelas recién hechas con unos picatostes fritos caseros. Utiliza espinacas frescas en lugar de congeladas, saltéalas unos minutos para que queden tiernas, y báñalas con el refrito de ajo y pimentón. Sírvelas en cazuelitas individuales con los dados de pan crujientes.

Cazuelitas de bacalao con pimiento y patatas

Un delicioso guisoque te encantará y que tendrás listo en 40 minutos. Se prepara con bacalao, patata y pimientos, y se adereza con pimentón dulce.

Cuece las patatas cortadas en dados y prepara un sofrito con la cebolla y el pimiento. Añade el tomate, sazona al gusto y agrega un poco de pimentón. Añade las patatas y el bacalao al sofrito y cocina a fuego medio 15 minutos.

Quedará más sabroso si lo dejas reposar unos minutos antes de servirlo. Si quieres hacerlo con más salsa y que además quede espesita, incorpora un poco de caldo de pescado y una pizca de maicena diluida en medio vasito de caldo.

Hojuelas

Aunque sean laboriosas de preparar, el resultado final de estas hojuelas valdrá la pena. Se hace con harina de trigo, una pizca de levadura, aceite, agua de azahar, huevo, limón y azúcar.

Tendrás que dividir la masa y freírla en aceite bien caliente dándoles la forma de la hojuela. Por último, prepara un almíbar con miel, agua y azúcar para bañar las hojuelas.