Las costillas al horno son una elección perfecta para presentar en la mesa un plato realmente apetecible, muy fácil de elaborar y con la seguridad de que siempre te va a salir bien. Además, como en esta ocasión hemos utilizado costillas de cerdo, el precio final del menú te resultará económico y el resultado, de auténtico lujo para el paladar. Así que nuestro costillar de cerdo adobado se erige en una receta ideal tanto para el día a día como para esas ocasiones en las que no apetece mucho hacer una preparación costosa y rebuscada, pero tienes invitados con los que quieres quedar bien. Un costillar de cordero asado también es una delicia, pero el precio de la carne de cordero es bastante superior a la de cerdo. Y ya ni hablar del precio del costillar de lechal , sobre todo, cuando se acerca la Navidad. En Cocina Fácil hemos elegido un adobo de sabor intenso para que la carne macere con él, pero tras ese tiempo de reposo, en una horita de horno tienes listo este manjar. Esos son los dos secretos, bueno, claro, y el otro es que la carne de cerdo sea de calidad, igual que el vino blanco que utilizas o del resto de ingredientes de la receta. Preparar el adobo es tan sencillo como picar bien los ajos y mezclarlos con pimentón, comino, orégano, tomillo, vinagre, vino blanco, aceite de oliva y sal. Y es que no hay más truco que cubrir bien las costillas por todos lados con esta mezcla y dejar macerar en el frigorífico de un día para otro. Así conviertes este plato en un bocado exquisito . Para acompañar las costillas preparamos cebolla caramelizada con miel que previamente se cuecen en agua con sal. Otro acompañamiento clásico es con una base de patatas o, si quieres que sea aún más vistoso, elige un acabado en acordeón como en las patatas hasselback . Productos que te ayudarán a elaborar esta receta: 39% de descuento Moulinex QuickChef DD655D Batidora de Mano de 1000 W Comprar por 39,80€ * Algún precio puede haber cambiado desde la última revisión Ideas para enriquecer las costillas de cerdo adobadas al horno Si dispones de tiempo, prueba a hornear las costillas a una temperatura más baja que la que hemos utilizado en nuestra receta, pero durante más tiempo. De ese modo, a más baja temperatura queda una carne que se deshace en la boca. Para ello, precalienta y el horno a 140° C y deja la carne asándose durante 2 horas. En nuestra receta hemos utilizado un buen pimentón de la Vera, con Denominación de Origen, dulce. Pero si te gusta el toque picantito puedes poner mitad y mitad o utilizar solo el picante, según vuestras preferencias. Para evitar que pueda resecarse la carne, una opción es hornearla envuelta en papel de aluminio. Puedes sustituir el adobo casero, si no tienes mucho tiempo por salsa barbacoa y tendrás unas costillas al más puro estilo americano. Y si la quieres hacer casera, mira en nuestro artículo cómo hacer la salsa barbacoa fácilmente. Si quieres preparar otras recetas con esta económica pieza de carne, aquí tienes unas excelentes opciones: prueba estas costillas asadas con patatas a la importancia , un arroz con costillas y alcachofas o estas patatas guisadas con costilla .