Tarta erizo, la más dulce y "peligrosa" para Halloween

Prepara la masa del bizcocho

Mezcla 125 gramos de mantequilla con 200 gramos de azúcar y 2 huevos, batiendo con varillas eléctricas. Cuando estén integrados, agrega 10 cucharadas de leche entera, 200 gramos de harina tamizada con la levadura y las 2 cucharaditas de cacao en polvo. Bate hasta lograr una masa homogénea y sin grumos. Precalienta el horno a 180º.

Hornea el bizcocho

Engrasa un molde circular con un poco de mantequilla, vierte la masa del bizcocho dentro y hornéalo durante 1 hora aproximadamente. Comprueba la cocción pinchando el bizcocho con un palillo o una brocheta. Si sale limpio, el bizcocho está listo. Si sale sucio de masa, sigue horneando unos minutos más.

Deja enfriar el bizcocho

Retira el bizcocho del horno y espera a que se atempere. Luego, desmóldalo y déjalo enfriar por completo sobre una rejilla.

Haz el hocico

Calienta 90 mililitros de nata para montar y viértela sobre el chocolate troceado. Remueve hasta obtener una crema homogénea y déjala enfriar en la nevera hasta que tenga textura pero todavía se pueda remover. Introdúcela en un cucurucho de papel de horno hasta que se endurezca del todo.

Prepara el relleno

Bate 125 gramos de mantequilla, previamente reblandecida, con 225 gramos de azúcar glas, 1 cucharada de cacao y 2 de leche hasta obtener una crema de chocolate homogénea.

Dale forma al erizo

Corta la parte superior del bizcocho en forma de semicírculo. Córtalo por la mitad en horizontal y unta el disco inferior con la crema de chocolate preparada. Retira el papel del hocico y sujétalo al cuerpo del erizo con un poco de crema de chocolate. Cubre el cuerpo del erizo con la crema de chocolate sobrante.

Decora la tarta

Cubre el cuerpo del erizo con los palitos de galleta bañados en chocolate, a modo de púas. Coloca unas grageas de chocolate blanco en el lugar de los ojos y el hocico del erizo.