Que a la mayoría de españoles nos gustan las croquetas es una evidencia. Que somos capaces de las mil y una variaciones para adaptarlas a nuestros gustos en cocina, es un hecho. Como muestra de ello: las croquetas de pollo asado de Dani García, las croquetas de paella, las croquetas con carne de puchero, las croquetas de salmón, las croquetas de pechuga rellena, las croquetas de boletus i foie... La lista es interminable.
Bajo el lema "no puedes gustarle a todos, no eres una croqueta", la Vecina Rubia, una de las influencers anónimas más destacadas en nuestro país (nunca hemos visto su cara), nos ilustra su gran pasión por las croquetas.
En su cuenta de Instagram, que reúne a una comunidad de más de 3 millones de seguidores, alimenta este entusiasmo con divertidas frases como "cuando tu opinión sea mejor que una croqueta, me la das" o "si el plan contiene la palabra croquetas, la respuesta es sí".
Su legión de fans adoran su humor inteligente, su ironía y su facilidad para llegar a conectar con el universo íntimo de las personas. Su empatía la hace especial y ha cosechado un gran éxito literario con sus primeros libros ("La cuenta atrás para el verano", "Contando atardeceres" y "La chica del verano"). Su primera novela, "Mi querida Lucía" ha consolidado su trayectoria como autora.
Hoy os traemos su receta de las croquetas Popeye, una elaboración súper cremosa y exquisita que combina la suavidad de la crema con el sabor de las espinacas y el contrapunto crujiente de los piñones. Son súper sencillas de hacer y aptas para personas intolerantes al gluten y la lactosa. Además, las puedes tener listas rápidamente en tu freidora de aire.
Y, teniendo en cuenta que hoy es el Día Internacional de la Croqueta, puedes hacer felices a todos los miembros de tu familia con una receta original, sana y nutritiva que les va a sorprender.
Croquetas Popeye
Para 4 personas
Ingredientes
- 100 g de espinacas baby
- 1 cucharada de piñones
- 1 diente de ajo
- 1 cucharada de levadura nutricional
- 2 cucharadas de harina de maíz
- 240 ml de leche de soja
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimienta
- Nuez moscada
- 1 cucharada de lino molido
- 3 cucharadas de agua
- Pan rallado sin gluten
Paso a paso
Pela y pica los ingredientes del relleno
Pela y pica el ajo bien fino. Pica también las espinacas.
Sofríe el ajo
Pon una cucharada de aceite de oliva en una sartén y sofríe unos segundos el ajo picado hasta que quede ligeramente dorado.
Incorpora los ingredientes
Añade las espinacas y sazona con la nuez moscada, la sal y la pimienta al gusto. Cocínalas hasta que estén bien tiernas. Añade los piñones ligeramente picados.
Incorpora el resto de ingredientes
Añade la harina de maíz, la levadura nutricional y la leche de soja.
Cocina la bechamel
Remueve bien para que no se formen grumos y cocina hasta que la bechamel esté bien espesa.
Deja enfriar
Reserva la bechamel en un plato y tapa con papel film transparente, tocando la superficie para evitar que te haga costra. Deja enfriar unos minutos a temperatura ambiente y luego lleva a la nevera para acabar de enfriar.
Prepara el rebozado
Mezcla el lino molido con el agua y deja reposar unos minutos para que se forme la textura de huevo.
Reboza las croquetas
Forma las croquetas, pasa por el pan rallado, el huevo de lino y de nuevo por el pan rallado. Deja reposar unos minutos en la nevera.
Cuece las croquetas
Pon las croquetas en la freidora de aire durante 10-11 minutos a 180 grados (pulveriza levemente con un spray de aceite de oliva).
Sugerencias adicionales:
- Si mezclas el pan rallado con almendras o avellanas picadas obtendrás un rebozado más aromático y crujiente.
- Acompaña esta receta con una crema para darle un toque de sabor al plato. Puedes optar por una simple mayonesa, una salsa de curry (para un aroma más oriental), o una salsa de tomate casera.
Si quieres mejorar tu técnica a la hora de hacer croquetas de todos los gustos y sabores posibles, te dejamos algunos artículos de referencia: