Ser la pequeña de 5 hermanos te hace ser, por lo menos, despierta y espabilada. Y así es Katie Holmes. Una actriz que en su primer casting ya salió con un papel bajo el brazo y que llegaría a casarse con el hombre con el que soñaba de pequeña: Tom Cruise.
Katherine Noelle Holmes nació el 18 de diciembre de 1978 en Toledo, Ohio (EEUU). Su padre, Martin Holmes, es un conocido abogado matrimonialista, y su madre, Kathleen, ama de casa. De todos sus hermanos –tres chicas y un chico–, Katie fue la única que no se interesó por los deportes, sino por actuar. Ya en la escuela, la Notre Dame Academy de Toledo, intervino en el grupo de teatro, sin embargo, pensar en dedicarse a ello le quedaba muy lejos. Como la propia Katie dijo en alguna ocasión: “Hollywood y sus innumerables historias de éxito me parecía muy lejano y definitivamente, un mundo con el que nunca entraría en contacto”.
Talento para cantar, bailar y recitar
Pero como se dice, la vida tiene sorpresas, y para Katie, también. Con 16 años, se matriculó en una escuela de modelos y aquello marcaría su futuro. Tenía que cantar, bailar y recitar, y demostró que tenía talento, tanto, que una profesora la animó para asistir a una convención muy importante de modelos en Nueva York. En el escenario, representó un fragmento de un texto impactante, 'Matar a un ruiseñor', y triunfó. Pero su suerte no se quedó allí. Entre el público, se encontraba Al Onorato, un cazatalentos que rápidamente vio el potencial de Katie y la animó a viajar hasta Los Ángeles y presentarse a castings.
Allí empezó su carrera profesional y lo hizo a una velocidad de vértigo, y es que Katie solo necesitó un casting para ganar su primer papel en un largometraje. Fue para la película de Ang Lee ‘La tormenta de hielo’. Su ojos y su inocente apariencia calaron en el director, que le ofreció el papel de Libbets Casey.
Joshua Jackson, su primer amor
Un año más tarde, sería Joey Potter en la famosa serie de televisión ‘Dawson Crece’ y en el rodaje conocería a Joshua Jackson, quien se convirtió en su primer amor y del que hoy dice que “es uno de mis mejores amigos”. Pero en esta serie no solo encontró el amor sino también el éxito. Trabajó en ella hasta el 2003, cuando finalizó, y su nombre pasó a ser el de una verdadera estrella de la televisión.
Durante la grabación de la serie participó en diversos largometrajes como ‘Jóvenes prodigiosos’ o ‘Premonición’, pero su gran éxito le llegó en 2005 con ‘Batman Begins’. Por aquel entonces, Tom Cruise había roto con Penélope Cruz y se rumoreaba que había organizado un casting para conocer a Katie, buscando algo más que una actriz.
Su historia con Tom Cruise
Para Katie, que Tom se fijara en ella era una quimera. 16 años más joven que él, la actriz había llegado a soñar que se casaba con el actor, pero nunca hubiera imaginado que aquel sueño se haría realidad.
Katie empezó a salir con Cruise un mes después de haber roto con el que fuera su prometido, Chris Klein, y con quien estuvo unida sentimentalmente durante cinco años, tras un breve idilio con el también actor Josh Hartnett. Los rumores de montaje saltaron al momento. Los dos se encontraban en Roma promocionando sus películas ‘La guerra de los mundos’ y ‘Batman Begins’, y la prensa estadounidense no acababa de creerse el idilio e insinuaba que podía ser una maniobra más de promoción. Sin embargo, dos meses después, Tom acalló los rumores pidiendo a Katie que se casara con él durante un viaje a París.
Polémica boda con Tom
Todo fue muy rápido entre ellos. En junio, aparecían como novios formales y en octubre, se conocía el embarazo de Katie y empezaban a hacer planes de boda para el 2006.
Suri Cruise, la hija de Tom y Katie, nació el 18 de abril del 2006 y la actriz sufriría una depresión posparto presionada, además, por adelgazar para su boda. Una boda que acabó celebrándose el 18 de noviembre por el rito de la Cienciología en el Castillo de Odescalchi, en Roma, aunque antes ya se habían casado por lo civil en Los Ángeles.
Desde que conoció a Tom, Katie se involucró poco a poco en la Iglesia de la Cienciología, hasta que se convirtió en una seguidora más. Sus padres, cristianos devotos, no lo asumían y acabaron distanciados de su hija. No obstante, fue la misma Cienciología la que, según parece, acabaría con el matrimonio de la actriz.
Llegó el divorcio
Muchas eran las condiciones que Katie vio impuestas a su vida. Antes de contraer matrimonio, ya tuvo que firmar un documento que estipulaba que si ella o alguno de sus hijos futuros sufrían una enfermedad mental o terminal, solo se someterían a los tratamientos de la Cienciología, según cuenta la biografía no autorizada sobre Tom Cruise que publicó Andrew Morton en 2008.
Durante los años que vivió junto a Tom, fue Jackie Kennedy en la miniserie ‘Los Kennedy’ y rodó ‘No tengas miedo a la oscuridad’, ‘Policías de Queens’ y ‘Tres mujeres y un plan’, entre otros títulos, pero poco a poco fue reduciendo su presencia en los platós. Se comentaba que Tom controlaba todos sus pasos y aquellos rumores se dejaron oír hasta que llegó la noticia de su separación. Mientras el actor se encontraba en Islandia, rodando la película ‘Oblivion’, Katie decidió poner fin a la relación. Le pidió el divorcio por “diferencias irreconciliables” y dejó la casa que compartían con Tom en Los Ángeles para mudarse con su hija a un apartamento en Nueva York.
Entre las diferencias que argumentaba Katie en su demanda de divorcio, parece ser que se encontraba su oposición a que Suri fuera adepta a la Cienciología, algo que no conseguiría. La pareja llegó a un acuerdo inusualmente rápido. Katie renunciaba a una gran suma de dinero por quedarse con la custodia exclusiva de Suri a cambio de que Tom tuviera un régimen de visitas muy flexible y su hija continuara estudiando en la escuela de la Cienciología que él quería.
Diseñadora y volcada en Suri
Tras su divorcio, Katie se volcó en la pequeña Suri, que se había convertido en una ‘gurú’ de la moda infantil, y lanzó su propia marca de moda, Holmes & Yang, presentándola en la Semana de la Moda de Nueva York en septiembre del 2012. Por otro lado, reanudó su vida profesional estrenando una dura obra de teatro, ‘Dead Accounts’, que mucho tenía que ver con su vida, pues hablaba de relaciones rotas, dinero y religión.
Hoy Katie sigue soltera y sin compromiso, a pesar de que algunas voces la han relacionado con los también actores Jake Gyllenhaall y Jamie Foxx. Este último ha negado en varias ocasiones que entre Katie y él haya algo más que una buena amistad. Profesionalmente, interviene en la serie de televisión de acción 'Ray Donovan', de la que se graba su tercera temporada.