Desde el pasado mes de enero, la familia real británica se encuentra en un punto de inflexión. La misteriosa operación abdominal de Kate Middleton (42 años) y el diagnóstico de cáncer del rey Carlos III (75 años) han puesto en jaque a la Corona de Reino Unido, forzando el paso al frente de dos Windsor: el príncipe Guillermo y la reina Camilla. El heredero al trono y la consorte han sido los encargados de sostener el peso de la monarquía durante estos tiempos de incertidumbre.
Una presión que la reina nunca fue preparada para sostener y que le ha pasado factura, llevándola a cogerse unos días libres de sus compromisos institucionales. No obstante, apenas unos días después de estas pequeñas vacaciones, Camilla daba la cara de nuevo en el Día de la Commonwealth.
Desde entonces, su agenda ha vuelto a ser imparable, acudiendo a varios actos y eventos. No obstante, ha sido su última aparición la que ha acaparado más atención. ¿El motivo? Ha dado la última hora sobre la salud de su marido, Carlos III. La reina consorte ha viajado hasta Belfast (Irlanda del Norte) como parte de un viaje de dos días. Durante su visita, luciendo un abrigo de color verde, tonalidad característica del país, ha entrado en varias tiendas típicas de la zona y ha charlado con algunos de sus vecinos.
La reina Camilla da la última hora sobre el estado de salud de Carlos III
Ha sido precisamente mientras hablaba con Brenda Robb, dependienta de Arcadia Delicatessen, una tienda especializada en comida gourmet, cuando ha hablado de cómo se encuentra Carlos. La trabajadora le ha entregado una tarjeta de ánimo para el monarca, deseándole una pronta recuperación. "Le está yendo muy bien", ha indicado observando el obsequio, antes de añadir, "está decepcionado por no poder venir", ha recogido '¡Hello!'.
Y no solo eso. Camilla decidía mostrarse cercana y natural al oír una broma sobre que los hombres no son los mejores pacientes, informa el citado medio. "Intento mantenerlo en orden", ha dicho la reina con una sonrisa. Un rato más tarde, al visitar Coffey's Butcher, otro negocio abierto desde 1929, la consorte volvía a mencionar a su marido. De nuevo, recibió un paquete con especialidades de la tienda, como verduras, salchichas o pepinillos. "Se lo llevaré a mi marido. Él lo disfrutará al máximo", ha apuntado.
Tras esta visita, Camilla ha vuelto al Castillo de Hillsborough, la vivienda donde se aloja la familia real británica cuando visitan Irlanda del Norte. Un refugio donde la reina puede descansar tras todo un día en el ojo público. Sus palabras sobre Carlos III han mantenido presente al rey, a la vez que le han permitido sincerarse sobre su evolución. Unos avances muy positivos en su diagnóstico, pero que aún no le permitirían realizar viajes tan extensos.
Los 3 retos de la reina Camilla tras sus días de descanso
Las vacaciones de la reina Camilla llegaron de forma totalmente inesperada. La experta en Casa Real británica, Ingrid Seward, aseguraba que la esposa de Carlos III habría tomado esta decisión porque “ha estado muy preocupada por la salud de su marido y además, ha tenido que adaptarse a la apretada agenda de compromisos”. Y no solo eso. El propio monarca le habría animado a tomarse estos días de descanso para recuperar fuerzas.
Pero, claro, todo período vacacional tiene su fin y, al volver, Camilla tuvo que hacer frente a 3 retos. El primero fue mostrar su unión con el príncipe Guillermo durante el Día de la Commonwealth. Un día clave parala monarquía británica en el que ambos querían mostrar una sensación de estabilidad y calma.
El segundo reto fue tener que demostrar que sus vacaciones la habían ayudado a encarar su funciones y debía mostrar su mejor versión. Y, el último, es no complicar la situación de su marido. Durante su descanso, fue Carlos quien tuvo que asumir algunos asuntos de estado. Por ello, la reina consorte debe tener la entereza que se exige a un puesto como el suyo.
La prensa británica revela el motivo real de la tristeza del príncipe Guillermo
Mientras la reina Camilla ha seguido adelante con su agenda, la polémica ha rodeado a Kate Middleton. Sus constantes (y extrañas) apariciones han provocado todo tipo de especulaciones y rumores. La más reciente fue la que pudimos ver a partir del vídeo que publicó en exclusiva 'TMZ' y 'The Sun'. Una situación nada fácil que no solo ha afectado a la princesa de Gales, sino también al príncipe.
Ver todo lo que se dice de su mujer y, al mismo tiempo, dar la cara en cada acto ha afectado anímicamente al hijo de Carlos III. Una profunda tristeza habría arraigado en su interior. Así lo confirmó Rebecca English, experta en casa real y periodista de 'The Sun'. La reportera pudo hablar con el príncipe en una de sus últimas apariciones, que le confirmó estar muy perturbado por toda la situación. "Está enfadado, frustrado y profundamente decepcionado por lo que ha ocurrido en las últimas semanas", desvelaba. De hecho, lanzaba al aire una desesperada pregunta: "¿Cuándo terminará todo?".
Y es que el heredero al trono es totalmente consciente de lo que la presión mediática puede provocar en una persona. English ha querido recordar en el mencionado medio que uno de los principales objetivos del príncipe es "proteger a su familia del tipo de intrusión que sufrió su madre". Por eso, aunque no ha llegado a los mismos niveles, siente que ha fracasado en su propósito.