La estupefacción de Gorka Ibarguren al comprobar su cambio físico tras su expulsión de ‘Supervivientes 2024’

Gorka Ibarguren ha podido verse ante el espejo tras convertirse en el último expulsado de ‘Supervivientes 2024’ y quedarse a las puertas de la final

Sergio Rapado
Sergio Rapado

Periodista especializado en corazón y televisión

Gorka Ibarguren
Telecinco

Eran muchos los que consideraban a Gorka Ibarguren (30 años) como un claro ganador de ‘Supervivientes 2024’. Desde luego méritos para ello ha hecho, aunque finalmente no ha podido ser y ha tenido que quedarse a las puertas de la final. Tras su expulsión el pasado domingo, hemos podido ver su reacción al verse delante del espejo y comprobar así la transformación física que ha sufrido su cuerpo en estos más de tres meses de reality.

El pasado domingo se vivió uno de esos momentos que pasarán a la historia del programa de supervivencia. Prácticamente se trataba de un empate técnico entre el vasco y Rubén Torres, dos de los grandes supervivientes que optaban a proclamarse ganadores absolutos. Por la mínima diferencia de 13 votos, finalmente la balanza se decantaba hacia el lado del bombero, obligando a Gorka a disfrutar de la experiencia al completo pero quedándose apeado de la ansiada final.

La reacción de Gorka Ibarguren al verse en el espejo

Cada concursante expulsado puede disfrutar de este momento tan especial para ellos que ya es todo un ritual. Los supervivientes llevan más de tres meses sin poder ver su cuerpo delante de un espejo, más allá de las artimañas que emplean con un machete o a través del agua cristalina de las playas hondureñas. Por ello, sus reacciones suelen ser de lo más sorprendentes al poder ver lo mucho que ha cambiado su cuerpo en este tiempo.

El que fuera participante de ‘El Conquistador’ llegaba con mucho entusiasmo para poder ver su nueva imagen. La tela que recubría el espejo se iba levantado desde abajo hacia arriba. Por ello, primero ha podido ver las picaduras de insectos que tenía en sus piernas, además de comprobar que se seguían viendo los tatuajes que tenía en sus miembros inferiores, a pesar del moreno que tenía.

Qué locura, estoy super rubio. Parece que me lo he teñido y lo tengo demasiado rubio. Ni largo ni corto”, comenzaba diciendo sobre su pelo que no terminaba de convencerle. “Brazo me lo veo bien. Esto está de lujo, no sé cómo pierdo las pruebas”, desvelaba entre risas. “Creo que habré perdido como 11, 12 kilos. Seguro que mi abuela me dice que soy el niño más guapo del planeta”, añadía. “Ya ni me acuerdo de cómo entré aquí pero me veo bastante bien”, confesaba sobre su transformación física.

Gorka Ibarguren
Telecinco

La ducha de Gorka Ibarguren tras ‘Supervivientes 2024’

El segundo gran momento del que ha podido disfrutar el vasco es de la ducha, aquella en la que por fin puede enjabonarse y eliminar todos los restos de sal de su cuerpo. Hay que recordar que en la isla cuentan con determinados elementos de higiene pero siempre acaban aclarándose con agua del mar, por lo que todos coinciden en lo mismo y es el hecho de no terminar de sentirse limpios del todo.

“Duchita porque lo que hice con Torres más que una ducha fue una escena porno”, decía antes de meterse debajo del grifo, ya que hace unas semanas ganó una recompensa en la que se duchó junto a su compañero pero no terminó de lavarse del todo bien. “No me puedo creer que vaya a salir de aquí y no voy a pisar la arena”, expresaba mientras aprovechaba para oler el gel.

“Qué buena, qué aventurón. Orgulloso de haber llegado hasta el último día y aquí estoy”, exclamaba sobre su andadura en el concurso. En ese momento ha querido acordarse de su pareja. “Andrea, ponte guapa que vuelvo”, exponía. “Los pequeños detalles que el ser humano no los valoramos. Cuando os duchéis todos los días, pensad que esto no lo valoramos”, reflexionaba fuertemente sobre lo mucho que cambia la mentalidad al estar en aquellas condiciones extremas.

Gorka Ibarguren disfruta de una comida tras ‘Supervivientes 2024’

El tercer y último momento placentero es el del banquete. Todos los concursantes expulsados pueden disfrutar de gran cantidad de comida de todos los tipos. Lo más importante para ellos es que no disponen de ningún tiempo limitado para poder comer, algo que en las pruebas de recompensa es bastante habitual. De hecho, al destaparse los ojos y poder ver todo cuanto había encima de la mesa, no sabía por dónde empezar.

“Madre mía. Qué rico. No sé ni por dónde empezar. Lo que más me apetecía es pizza”, decía antes de coger un trozo. “No sé si voy a acabar con todo esto pero yo creo que sí. Me da como apuro que todo esto sea para mí”, revelaba el vasco. “Esta comida me hubiera gustado compartirla con Torres y con Arkano la verdad y ver las caras de felicidad. Fuera de aquí con mi chica, con mi amigo David y con mi padre que llevo 3 meses sin saber nada de él, con mi madre, con mis abuelas y con mis amigos”, añadía sobre las personas con las que comería.

Tras ello, Gorka ha querido hacer una profunda reflexión sobre lo que ha significado el reality para él. “Creo que me he convertido en una mejor persona. Le quiero dar las gracias a esta aventura legendaria que me ha hecho reír, aprender a ser mejor persona, dispuesto a ayudar a todas las personas que se crucen en mi camino”, concluía antes de poner rumbo a España y retomar su nueva vida.