La salsa velouté es, sin duda, una de las elaboraciones básicas francesas que todo amante de la cocina debe conocer. Muy parecida a la bechamel , pero con un caldo o fondo claro , que puede ser de verduras, ave, ternera o pescado, en lugar de leche, y con un roux de harina y mantequilla, esta salsa tiene con una textura tan fina y sedosa que a la que la pruebes te conquistará. Dependiendo del caldo que utilices en su preparación, puedes usarla para enriquecer guisos con moluscos o mariscos , gratinados de verduras, pollo y pescados… Incluso, puede ser una acompañante perfecta para la pasta. Aunque la salsa velouté es muy fácil de realizar, tiene su secreto. Y este es la manera de cocinar el roux. Una vez tengas la mantequilla derretida y sin dorar, agrega la harina , removiéndola bien para que se integre y con el fuego al mínimo para que esta no se tueste demasiado. Pasados unos minutos y tenga un tono ligeramente tostado, ya estará a punto. Luego, ve incorporando el caldo hasta que la salsa tome cuerpo. ¿Para qué se usa la salsa velouté? La velouté se usa como base para crear otras salsas deliciosas, como estas: Salsa alemana : se hace añadiendo yemas de huevo y un poco de crema de leche, además de un poco de zumo de limón. Salsa de champiñones : se le agregan champiñones salteados a la velouté, una vez elaborada, para darle un sabor más profundo. Salsa al vino blanco : perfecta para pescados y mariscos, se trata de añadir vino blanco a la salsa velouté, queda suave y deliciosa. Salsa verde : añade perejil picado a la salsa, una vez hecha, y remueve para que se integre bien en la salsa. Otras salsas que deben formar parte de su recetario particular son la salsa holandesa , la salsa barbacoa o la salsa pesto . Aunque lo más habitual es utilizar la velouté para acompañar pescados y mariscos , lo cierto es que esta salsa tiene un sabor suave que también queda muy bien con aves, carnes blancas, verduras, pasta ... a los que añade una textura sedosa y aterciopelada sin influir en exceso en el sabor final de la receta. A continuación, te sugerimos cómo emplear la velouté para acompañar estos ingredientes: Aves : la salsa velouté es un perfecto acompañamiento para carnes blancas como pollo, pavo, codorniz... Se suele emplear para napar pechugas de pollo o aves asadas, especialmente cuando se quiere añadir un toque cremoso sin alterar el sabor de la propia receta. Carnes blancas : la salsa velouté también puede servirse con carne de cerdo o cortes de ternera de sabor suave, como la blanqueta, un plato francés donde la carne se cocina a fuego lento en una salsa velouté suave y cremosa. Verduras y pasta : puedes mezclar la velouté con hierbas secas o frescas, como albahaca, romero, orégano... y así convertirla en una salsa ideal para una pasta simplemente cocida, un arroz o recetas vegetales de verduras, espárragos, brócoli o coliflor... Huevos y gratinados : utiliza la velouté (prepárala un poco más densa si la vas a utilizar con este fin) para cubrir elaboraciones que quieras gratinar. Al tener mantequilla entre sus ingredientes, la velouté se gratina bien en el horno. Variantes para la salsa velouté Puedes sustituir parte del caldo por un poco de vino blanco o algo de leche. Si ves que queda muy espesa, añade un poco más de caldo . En cambio, si está demasiado líquida, prolonga la cocción 5 minutos más. La salsa velouté puede ser la base de otras elaboraciones más complicadas. Por ejemplo, puedes cocinar una velouté de guisantes .