La trama de las monjas de Belorado se ha convertido en todo un culebrón que no parece tener fin. Las religiosas fueron excomulgadas por el Arzobispado de Burgos y todavía continúan en el foco mediático. Su último movimiento ha sido su desvinculación y separación del ‘falso obispo’ Pablo de Rojas, quien ejercía de cabecilla en el convento junto a las clarisas. La Iglesia Católica asegura que la congregación 'Pía Unión de San Pablo Apóstol' liderada por Rojas es una secta a la que se habrían unido las religiosas de forma voluntaria en su momento, aunque según algunos expertos estas monjas habrían sido “manipuladas”.
Análisis psiquiátrico de las monjas de Belorado
Ante la oleada de comentarios sobre la actitud de las monjas de Belorado, el psiquiatra José Carlos Fuertes ha analizado desde el punto de vista psiquiátrico y bajo su valoración personal la situación. Tal y como señala en su canal de YouTube, las circunstancias que han derivado en su desvinculación con la Iglesia Católica son fruto de un “delirio contagiado”. “Yo creo que estamos ante una enfermedad mental colectiva”, señala el psiquiatra. Según explica el veterano en su canal, más allá del trasfondo económico o los problemas que existan entre conventos, la situación se ha visto condicionada por la aparición del ‘falso obispo’ Pablo de Rojas. Este hombre que se autodenomina como ‘Duque Imperial’ y ‘Príncipe Elector’ del Sacro Imperio Romano fue excomulgado en 2019 y, desde entonces, niega al Vaticano y al papa. Además, solo reconoce como último pontífice a Pío XII y asegura que el resto son usurpadores del cargo.
“Para mí, el llamado señor obispo, tiene indicios más que racionales para padecer lo que llamamos un trastorno delirante”, señala José Carlos. Es decir, “una enfermedad que afecta al contenido del pensamiento”. Como bien señala el psiquiatra, Pablo de Rojas está firmemente convencido de las facultades que posee y son irrebatibles a cualquier razonamiento lógico. “Es lo que ocurre con los trastornos delirantes y con lo que antes se llamaba paranoias”, señala Fuertes. “Parece que hay una idea delirante de superioridad o de pertenencia a la auténtica iglesia. Desprecia a la iglesia actual y, en concreto, ha proferido una serie de descalificaciones muy intensas a todos los miembros de la Iglesia católica”, defiende el veterano. Aunque el psiquiatra no haya realizado un diagnóstico clínico, asegura que las personas con ideas delirantes “tan contundentes, fuertes y que no son absurdas”, es decir que tienen un cierto razonamiento y coherencia interna, son capaces de ser contagiadas. Este sería el corazón de la rebeldía de las monjas de Belorado quienes Fuertes asegura que son muy vulnerables. “Son unas hermanas religiosas, clarisas, contemplativas que viven aisladas del mundo y que se han dedicado durante muchos años a realizar unas labores dentro de su comunidad.
Su contacto con la sociedad es relativamente pequeño y, por tanto, serían personas fácilmente influenciables y manipulables”, defiende el psiquiatra. En definitiva, asegura que “estamos ante unas personas desequilibradas, alteradas con un trastorno de personalidad importante”. Este sería el motivo que las lleva a actuar de tal forma, es decir, a ser rebeldes. Durante su análisis de las clarisas, Fuertes ha dirigido al arzobispo de Burgos, Mario Iceta, una sugerencia sobre la forma de ver la actitud de estas monjas. “Yo creo que haría muy bien el señor obispo de Burgos no como un acto de rebeldía ante su jerarquía, sino como un trastorno psicopatológico, una alteración psíquica”, explica. Además, ha señalado que está convencido de que las hermanas son buenas personas, nobles y que tienen una creencia religiosa muy intensa. “Quizás, verlo de esta manera permita entender a muchas personas que no estamos ante unas rebeldes ni plantando cara de una forma racional a la jerarquía eclesial, sino que estamos ante un grupo de personas manipuladoras, influidas, seducidas, persuadidas por un individuo que se cree firmemente que está llamado a una renovación de la iglesia”, concluye Fuertes.
La expulsión de Pablo de Rojas y el 'cura coctelero'
Tal y como dieron a conocer hace pocos días, las clarisas de Belorado se han desvinculado de la ‘Pía Unión’ de Pablo de Rojas. Tras su decisión, el ‘falso obispo’ se pronunció alegando que había asumido la situación con “total normalidad”. Además, señaló que se trata de una “ruptura irreversible”, por lo que se espera que las monjas de Belorado sigan ahora su propio camino sin la influencia de terceros. Lo mismo le ha ocurrido al ‘cura coctelero’ desvinculado también de las monjas de Belorado por decisión de las propias clarisas. Mientras tanto, las monjas continúan luchando por seguir en el monasterio y aseguran que es “una cuestión puramente jurídica”. Es decir, que no se encuentra bajo la autoridad eclesiástica y, por ello, “deberá ser dirimida por los Juzgados y Tribulares correspondientes”. "Protestamos ante las amenazas al recurso a la fuerza pública para nuestro desahucio, que solo cabría si se acompaña de una resolución judicial contra nosotras que, además, en tal caso, habría de ser por nosotras incumplida en periodo de ejecución voluntaria", señalan las monjas.