Está a un paso de abandonar la soltería, y eso se merece una celebración por todo lo alto. Si hay alguien que a lo largo de sus más de tres décadas de vida se ha labrado una importante reputación de ‘fiestero’ ese es, sin duda, el príncipe Harry. Pero eso, se acabó. El hijo de Carlos de Inglaterra dejará de ser el soltero más codiciado de la realeza europea el próximo 19 de mayo y, aunque lleva ya algunos años mostrando una imagen de ‘chico formal’, ahora ya no podrá salirse ni un milímetro del guión.
Según aseguran los tabloides británicos, una 'avanzadilla' de Harry ya está preparando todo para la que será su última gran juerga. El lugar escogido ha sido la exclusiva estación de esquí de Verbier (Suiza), donde su tío Andrés le ha ofrecido su casa de estilo alpino con vistas a las pistas. Un refugio ideal valorado en más de 10 millones de euros. Varios miembros de su equipo de seguridad han sido vistos en los últimos días en el restaurante La Vache regentado, entre otros por su amigo Rob Sawyer y el cantante James Blunt.
Como suele procederse en este tipo de asuntos, será un amigo del Príncipe el encargado de prepararlo todo. En este caso, la responsabilidad ha recaído sobre Guy Pelly, que ha escogido el Coco Club, lugar de reunión de jóvenes, ricos y famosos que pasan sus vacaciones invernales en la estación alpina.
Y mientras Harry se pega su última fiesta, Meghan no va a ser menos. Según parece, la actriz volverá a Estados Unidos para su propio ‘desmadre a la americana’. Eso sí, como marca la tradición, luego ambos tendrán una celebración conjunta en el polo, al más puro estilo 'british'. Un colofón formal previo a pronunciar los votos que les unirán para siempre.