Hace unas horas, Luis Rubiales nos sorprendía a todos al negarse a dimitir tras la polémica generada por el beso a Jenni Hermoso durante la final del Mundial de fútbol. Hasta cinco veces ha repetido que no iba a dejar el puesto de presidente de Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Sin embargo, sus pretensiones podrían no tener recorrido. Víctor Francos, presidente del Consejo General de Deportes, ha realizado una rueda de prensa en la que se ha referido al discurso de Rubiales y ha anunciado que lo suspenderán de sus funciones.
"Comparezco ante ustedes con la voluntad de hablar de lo que ya conocemos". Así comenzaba Víctor una rueda de prensa cargada de expectación, en la que ha querido dejar claro que el CSD (Consejo Superior de Deportes) ha sido muy "pulcro y estrictos en los procedimientos a seguir".
Justo después, Francos se ha referido al discurso que Rubiales en la asamblea extraordinaria de la RFEF. "El señor Rubiales hoy no ha estado a la altura de lo que se esperaba, lo que esperaban las jugadoras de la selección, lo que esperaba el gobierno y lo que esperaba la sociedad", ha sentenciado, muy firme.
El Consejo Superior de Deportes pide la suspensión de Rubiales
Y esto no era todo. El presidente del CSD ha reiterado que el (de momento) presidente "ha defraudado en su reacción" y que sus explicaciones "no corresponden con sus actitudes". También ha tenido palabras para la asamblea que, bajo su punto de vista, "lejos de resolver la situación y de calmar el contexto en el que nos había metido, lo que ha hecho es avivar la polémica", ha asegurado.
Tras estas primeras palabras, Víctor Francos ha compartido cuáles serán los siguientes pasos que llevará a cabo el CSD, que comienzan con una denuncia al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) "porque se ha incumplido la ley del deporte". El objetivo es que Rubiales de explicaciones a este órgano y, si se considera oportuno, el CSD suspenderá de sus funciones al señor Rubiales". Además, durante este procedimiento se podrá valorar si esa falta es muy grave. "Nosotros vamos a elevar esa denuncia como falta muy graves", ha explicado.
Luis Rubiales se aferra a su puesto: "No voy a dimitir"
El pasado domingo las jugadoras de la Selección Española de Fútbol lograban colarse en la historia del deporte, tanto español como internacional. Se alzaban como ganadoras del Mundial de Fútbol celebrado en Australia, consiguiendo una hazaña al alcance de muy pocas. Sin embargo, hubo un gesto que empañó todo y que días después sigue siendo noticia por todo lo que ha conllevado.
Luis Rubiales como presidente de la Real Federación Española de Fútbol se encontraba en el palco con todas las autoridades correspondientes. Llegaba la entrega de medallas, en la cual le dio un beso en la boca a una jugadora, Jenni Hermoso. A partir de ahí empezó a generarse un gran revuelo por lo que había significado, algo que tomó mucha más fuerza tras las palabras expresadas por la propia futbolista.
Desde entonces han sido muchas las posibilidades que se han barajado sobre este tema. Eso sí, la gran mayoría coinciden en una y es que prácticamente todo el mundo estaba pidiendo la dimisión del presidente por los actos realizados. A pesar del revuelo mediático, Rubiales ha indicado que "no voy a dimitir" en la mañana de este viernes tras haber convocado la Federación una asamblea extraordinaria, la cual ha tenido lugar en la sede de la RFEF en Las Rozas, Madrid. De este modo continúa en su cargo en la presidencia, la cual ostenta desde el año 2018.
Primeras palabras de Luis Rubiales
Nada más dar comienzo la rueda de prensa, Luis ha querido ser agradecido con los que lo eligieron presidente. “Este es el órgano que me eligió y este es el órgano ante el que debo dar todas las explicaciones. Estoy encantado de poder darlas, así que vamos a ello”, comenzaba su aparición. Aunque antes de dar comienzo a su discurso ha querido agradecer a todos los mensajes de apoyo que ha recibido, los cuales no ha podido responder aún por falta de tiempo. “Hay mucha gente que, aunque silenciada, me está apoyando. Yo diría más que en contra”, matiza.
“Quiero pedir perdón, sin paliativos, por un hecho que ocurrió en el palco, cuando en un momento de euforia me agarré una parte del cuerpo”, declara con relación al momento en que se agarró la entrepierna. Pero la polémica del beso ha ido mucho más allá. Ha querido explicar que “el deseo que había en ese beso era el mismo que el deseo que podía tener dándole un beso a una de mis hijas”, alegando a su carácter paternalista por el cariño que le tiene a las jugadoras.
"Fue un beso espontáneo, mutuo, eufórico y consentido, que esta es la clave de todas las críticas y todo el proceso que se ha montado en el país", confiesa sobre la forma en que produjo. Además, interrumpe su discurso para decirle a su hija que esté orgullosa de quién es su padre ante las lágrimas de ella. Tras unas largas explicaciones de este hecho en cuestión, ha querido hablar de la dimisión que tanto se está pidiendo desde algunas fuentes y medios.
"No voy a dimitir", expresa Rubiales repitiéndolo hasta en cinco ocasiones. "He recibido muchas presiones, me han llegado muchos comentarios", continuaba sobre la decisión que había tomado. Además, denunciaba que se está llevando a cabo una "cacería" contra su persona. De este modo hace caso omiso a todas las especulaciones y a todo lo que se había mediatizado el hecho, del que probablemente habrá muchas respuestas que continuarán generando muchas controversia al respecto.
Luis Rubiales habla con su equipo
Según publicaron en la tarde del pasado jueves diversos medios, el todavía hoy presidente había comunicado a su equipo la decisión de su dimisión en la asamblea de este viernes, algo que no ha sucedido. Le quedaban muy pocas opciones tras el revuelo generado entorno a este tema y es que era el cese o la destitución, algo que no entraba en los planes del canario a pesar del calibre que está tomando la polémica.
De hecho, se desconoce si por el momento los actos cometidos por Luis tendrán más consecuencias. La cuestión es que durante estos últimos días han ido apareciendo más actitudes que ponen sobre la mesa la posibilidad del cese, más que debatido en las redes sociales. Además, cabe recordar que el sindicato FUTPRO hablaba en nombre de Jenni y expresó su "firme y rotunda condena ante conductas que atenten contra la dignidad de las mujeres".