Isabel Pantoja (67 años) está tratando por todos los medios de hacer frente a las deudas que ha acarreado durante los últimos años. Por ello, está llevando a cabo diferentes movimientos que así lo demostrarían. Si el pasado lunes salía a la luz la condición que le habría puesto a su hijo Kiko Rivera por la compra de su porcentaje de Cantora, este martes ve la luz el intento de venta de su vivienda de Sevilla, en la que actualmente reside Junco, la mujer de su hermano Bernardo.
Todos estos movimientos y estas acciones que la tonadillera está realizando tienen un claro objetivo. Se trata de conseguir la solvencia económica suficiente para poder dejar atrás las deudas que arrastra. De este modo, podría disponer de la totalidad de la finca de Cantora para así poder negociar su venta de manera individual y acabar de una vez por todas con estos problemas económicos tras la cancelación de algunos de sus conciertos como principal fuente de ingresos.
Isabel Pantoja ultima la venta de su piso en Sevilla
Este martes en el programa ‘Y ahora Sonsoles’ la periodista Paloma García Pelayo volvía a obtener una importante información sobre la madre de Isa Pantoja. Tras indicar que la tonadillera tiene un comprador para dicha vivienda sevillana del barrio El Tardón, indicaba que “se sabe quién es el comprador pero yo no lo voy a revelar porque es una persona anónima”, por lo que los detalles estarían bastante avanzados.
“Forma parte del plan económico de Isabel Pantoja que tiene deudas millonarias. Ahora que va a cantar menos y tiene que bajar el ritmo, el plan B es sacar los activos a la venta. Si ayer hablábamos de la oferta de Cantora, hoy esto”, confesaba la periodista del programa de las tardes de Antena 3. “Cuando Bernardo fallece es Junco quien ocupa este inmueble de Sevilla. Puede venderlo con ella dentro. Está ultimando su venta”, añadía.
Isabel Pantoja, desesperada por la actitud de Junco
En cualquier caso, parece que la intérprete de ‘Marinero de luces’ habría intentado por todos los medios ponerse en contacto con su cuñada para que entendiese la situación y así poder vender ese inmueble. “Ella intentó personalmente, directamente un acuerdo. Han pasado casi dos años y el grupo inversor no tiene los mismos datos sentimentales que tiene Isabel Pantoja y necesitan liquidez”, exponía García Pelayo.
Por otro lado, hablaba de una importante medida que estaría a punto de tramitarse, si es que no se ha llegado a hacer. “Después de dos burofaxes que ha rechazado, si no se ha presentado hoy, está a punto de presentarse una demanda por desahucio de esa casa”, confirmaba la periodista. De este modo, ponía de manifiesto los intentos de la cantante antes de tener que tomar esta determinación tan drástica.
No obstante, desde el programa intentaban saber cuál sería la reacción de Junco a este hecho. “Está rechazando cualquier notificación legal. Ha tenido conversaciones con la familia antes de llegar a este punto in extremis”, declaraba. Así Isabel estaría desesperada por la actitud que está llevando la que fuera mujer de su hermano, puesto que no llegan a un acuerdo y tampoco recoge los burofaxes que se le han enviado.
El objetivo fundamental de Isabel Pantoja
La tía de Anabel Pantoja estaría llevando a cabo todos estos movimientos con un único objetivo. “Todo esto lo hace para quedarse con la joya de la corona que es Cantora”, señalaba la presentadora del programa de Antena 3. De hecho, Paloma García Pelayo afirmaba lo que comentaba la presentadora, ya que pretende “deshacerse de ella, venderla, negociarla”, explicaba la periodista sobre las intenciones reales.
Además, Paloma apostillaba esta información sobre Isabel. “Ya tiene una oferta, es una negociación que lleva tiempo. Cuando ella tenga la totalidad, venderla porque tiene decidido tomar ese dinero, esa liquidez que necesita para tomar las deudas que arrastra”, comentaba. Así tendría sentido la oferta que le habría hecho a su hijo para poder venderla íntegramente y así comenzar su nueva vida.
De hecho, desde el programa ’Y ahora Sonsoles’ han apuntado que ese grupo inversor que está gestionando toda la parte económica de la tonadillera tendría pensado vender la finca para la realización de un hotel rural. De este modo, Isabel tendría esa liquidez para afrontar esas deudas, además de continuar con su labor y sus proyectos musicales para conseguir esa solvencia económica.