Esta siendo una Semana Santa atípica para la reina Sofía pero lo está disfrutando al máximo. La madre del rey Felipe celebró el Jueves Santo en Málaga, donde asistió a la procesión del Cristo de la Buena Muerte. Allí la vimos entregada al pueblo malagueño y también charlando de forma distendida con amigos como por ejemplo Antonio Banderas. Por supuesto y porque la Semana Santa está ligada a la gastronomía, la reina emérita disfrutó de un riquísimo almuerzo en un chiringuito en el que hubo saludo al espetero y comió rico pescado y verduras. Incluso felicitó el cumpleaños a uno de los comensales del local, que se quedó en shock con el gesto de la emérita.
Tras este fugaz pero intenso paso por Málaga, la reina Sofía puso rumbo a la capital para continuar con su agenda de Semana Santa. A pesar de la lluvia, la abuela de la princesa Leonor ha sabido bien escoger sus planes para disfrutar al máximo de estos días festivos. En Madrid la mujer de don Juan Carlos asistió a la emblemática procesión del Cristo de los Alabarderos, ocasión en la que recibió una emotiva condecoración con la medalla del Cristo de los Alabarderos, además de ser nombrada como 'Alabardera de Honor'. En este momento tan emocionante le acompañaron su hija Cristina, que sigue exprimiendo su vida de soltera, y su hermana Irene de Grecia, siempre inseparables.
Fue una cita muy especial en la que se echó en falta a sus otros dos hijos. La infanta Elena se encuentra en Abu Dabi junto a su padre el rey Juan Carlos y don Felipe podría estar en Madrid o disfrutando de sus vacaciones privadas de Semana Santa junto a su mujer, la reina Letizia, y sus hijas Leonor y Sofía. Tampoco estuvieron ninguno de sus nietos, que todos disfrutan de sus días de descanso. No obstante, la reina Sofía se sintió muy arropada, estaba su hija Cristina y su hermana. Además, se encontró con su sobrina Simoneta Gómez-Acebo, a la que saludó afectuosamente.
Tras recibir la medalla y disfrutar de la procesión, la reina Sofía y su hija Cristina, ya sin Irene de Grecia, disfrutaron de una cena en Casa Ciriaco, un restaurante tradicional y con mucha historia. Se trata de una taberna clásica madrileña con comida tradicional y castiza, que siempre suele reunir a rostros muy conocidos.
Reina Sofía y la infanta Cristina salen de Casa Ciriaco en Madrid.
Lecturas.com ha podido hablar con el restaurante y en exclusiva nos han contado qué cenaron la reina emérita y su hija y lo que pasó dentro del local. "Pues sí, ayer tuvimos la visita sorpresa de la reina Sofía y la infanta Cristina en nuestro restaurante. Fue una visita muy breve, un pequeño descanso de la procesión del Cristo de Los Alabarderos... Pidieron alcachofas confitadas con velo de jamón ibérico, habitas salteadas y una tabla de quesos", nos han contado desde Casa Ciriaco.
"Estuvieron sentadas en la zona que llamamos 'real' donde tenemos fotos de la Familia Real, las felicitaciones navideñas que nos hacen llegar y otros recuerdos, para que se sintieran como en casa", añaden emocionados tras esta visita.
La madre y hermana del rey Felipe tomaron una cena variada, rica y saludable. No obstante, en la carta del restaurante hay platos tan aclamados como su famosa gallina en pepitoria, sus callos, su rabo de toro, sus albóndigas con ternera o su deliciosa -y famosa- tortilla de patatas, que son sus platos estrella, o alguna de sus ensaladas o recetas de pescado. Y, por supuesto, un dulce postre. Complicadísima elección.
Madre e hija se mostraron muy divertidas y confidentes, visiblemente relajadas y con ganas de disfrutar de su noche en familia. Aún hay días de descanso y no se sabe el tiempo que pasará la infanta Cristina en Madrid, tampoco si la reina Sofía ha tenido ocasión de encontrarse con sus nietas Leonor y Sofía. La princesa y la infanta se han reencontrado tras dos meses -desde Navidad- y están pasando unos días de vacaciones en casa. Seguro que aprovechan el fin de semana, si es que están en Madrid, para visitar a su abuela, a la que adoran.
Será el próximo 4 de abril cuando Leonor vuelva a Zaragoza para retomar su formación en la Academia General Militar, mientras que su hermana pequeña hará lo propio viajando a Gales para dar este último empujón de su primer curso de bachillerato antes de las vacaciones de verano.