El estado de salud de Kate Middleton (42 años) se ha convertido en uno de los temas de mayor interés del panorama social. Cada palabra y movimiento, o la ausencia de ellos, ha hecho que todas las miradas se hayan fijado en la esposa del príncipe Guillermo (41 años). ¿Cómo comenzó todo? ¿Cuál ha sido la estrategia escogida? ¿Cuál es el papel del resto de la familia real? ¿De qué manera se ha ido fraguando esta situación de escándalo y polémica? ¿Cómo hemos llegado hasta aquí? Repasamos, punto por punto, todos los acontecimientos que han fraguado una de las peores crisis de la Casa Real británica.
Todo empezó el pasado 17 de enero cuando el Palacio de Kensington anunció que la princesa de Gales había sido sometida a una intervención. "Su Alteza Real la Princesa de Gales ingresó en el hospital para una cirugía abdominal planificada", rezaba el comunicado. La operación salió perfectamente, según el mismo texto, y daba a conocer que Kate no podría seguir con su agenda de compromisos hasta pasada Semana Santa, como muy pronto.
"La Princesa de Gales espera que se entienda su deseo de mantener la mayor normalidad posible para sus hijos; y su deseo de que su información médica personal permanezca privada", explicaba el anuncio. Un comunicado que ponía patas arriba los medios de comunicación británicos y que despertaba la preocupación de los ciudadanos. Desde entonces, Kate no ha abandonado el foco mediático ni un solo momento.
Kate Middleton recibe el alta hospitalaria en el más absoluto secreto
En ese primer texto se explicaba que la princesa de Gales permanecería en The London Clinic durante 15 días antes de trasladarse a Adelaide Cottage, la casa en la que vive con el príncipe Guillermo y sus tres hijos, para continuar allí su rehabilitación. Durante su estancia en el hospital no era posible de ninguna manera captar alguna imagen de Middleton, de manera que todas las esperanzas estaban puestas en su salida.
Una oportunidad para romper con el potente blindaje que la Casa Real había desplegado alrededor de su estado de salud, como la información sobre que la madre de George, Charlotte y Louis había estado en coma. El momento en que Kate y Guillermo podían acercarse de nuevo a los ciudadanos ingleses y explicar la situación desde la normalidad y cercanía.
No obstante, lejos de aplacar los rumores, su alta hospitalaria los avivó. ¿Por qué? Kate salió del hospital en el más absoluto secreto, sin permitir una sola imagen de ella. De hecho, el Palacio de Kensington avisó de su traslado a casa en otro comunicado cuando este ya había tenido lugar. "La princesa de Gales ha vuelto a casa para continuar su recuperación de la operación. Su evolución está siendo favorable", se leía en el post de Instagram. Una buena, pero inesperada noticia que no hacia más que acrecentar las sospechas sobre la condición de Kate,
Carlos III es diagnosticado con cáncer: la estrategia contrapuesta para proteger a Kate
Paralelamente a la operación de Kate Middleton, el rey Carlos III anunció que había sido diagnosticado con cáncer tras ser intervenido por un agrandamiento de la próstata. El nuevo estado del rey conmocionaba a la sociedad, pero aún más lo hizo su forma de tratar su condición: con total transparencia. Desde el primer momento, el monarca contó cada detalle de su situación, todos los pasos que estaba dando y se dejó ver tras la operación.
Las manos de Carlos III parecen estar muy hinchadas.
Por un lado, su actitud tranquilizó a los ingleses sobre la salud de su rey, pero, por otro lado, fue una pieza más en el escándalo de Kate. Y es que, si Carlos podía dar detalles de su enfermedad, ¿por qué no Kate? Si el podía regalarnos una imagen, ¿por qué ella no? Una conducta que llevó a pensar que se todo formaba parte de una estrategia de distracción: mientras todos los ojos se interesaban en el estado del padre del príncipe Guillermo, Kate y su intervención pasaban a estar en la sombra. Este movimiento dejó claro que el secretismo alrededor de Middleton provenía de una cuidada estrategia institucional que no hizo más que aumentar los rumores.
Semanas de silencio absoluto alrededor de Kate Middleton
Tras regresar a su hogar desde The London Clinic, el silencio se instauró alrededor de Kate Middleton. Nada se sabía de su estado de salud. ¿Se estaba recuperando bien? ¿Podría mantener su agenda de actos a partir de marzo? Cierto es que pequeñas capsulas de su supuesta convalecencia empezaron a salir a la luz, como su decisión de trabajar desde la cama o a que se dedica en su día a día, teniendo en cuenta las restricciones a las que está sometida para recuperarse correctamente.
Al mismo tiempo, el príncipe Guillermo y la reina Camilla se convirtieron en los pilares de la Corona, acudiendo a muchos actos como los BAFTA o organizando la misa funeral de Constantino. En estos eventos, el príncipe hizo algún comentario sobre su esposa, asegurando que estaba familiarizado con el hospital por la intervención de Kate, pero no aportaba ninguna actualización sobre su estado. Esta falta de información, de nuevo, no ayudó a tranquilizar a los periódicos, sino que aumentó la preocupación.
La Casa Real británica, forzada a emitir un nuevo comunicado
Las especulaciones y rumores sobre el estado de salud de Kate Middleton incrementaron de tal manera que la Casa Real británica se vio obligada a emitir un nuevo comunicado. Uno en el que querían aportar luz a la situación, pero no hicieron otra cosa que acentuar de nuevo su opacidad respecto a la enfermedad de la princesa de Gales.
“Fuimos muy claros desde el principio en que la Princesa de Gales estaría fuera hasta después de Pascua y el Palacio de Kensington solo proporcionaría actualizaciones cuando algo fuera significativo”, dijeron, tajantes, miembros internos de la Corona a medios británicos como 'People'. Un nuevo paso en falso que se sumó a las piedras sobre el tejado de la familia real inglesa.
La reaparición de Kate Middleton: desmejorada, en coche y sin el príncipe Guillermo
Y, de repente, tras semanas de preocupación y dudas, Kate dio la cara. O algo así. La princesa de Gales era captada por la Agencia Backgrid en el asiento copiloto de un vehículo que conduce su madre, Carole Middleton. La calidad de la imagen no permitía captar detalles exactos, pero si se podía percibir que la princesa llevaba gafas de sol y mostraba una expresión neutra, aunque cansada.
Lo que al principio se tomó como un motivo de alegría, poco a poco, dejó de serlo. Tras la sorpresa inicial, las teorías sobre esa imagen empezaron a florecer. La calidad de la instantánea, su total transparencia después de semanas oculta y la duda de si era ella hicieron que las conspiraciones más estrambóticas empezarán a ocupar espacio en las redes sociales. ¿Era verdaderamente Kate? ¿Por qué aparecer ahora? Unas preguntas que se sumaban a las anteriores y que acentuaban el escándalo en torno a su situación.
Esta fotografía, totalmente sorpresiva, llegaba al mismo tiempo que algunos periódicos aseguraban que Kate podría estar planteándose hablar sobre su dolencia una vez pasara lo peor. Kate Nicholl, la corresponsal de Vanity Fair en materia de Casa Real, afirmaba que fuentes cercanas a Middleton aseguraban que la princesa podría estar valorando hablar de lo que ha vivido.
La prensa británica se atreve a publicar la vuelta de Kate Middleton
Y llegamos a marzo, cuando los hechos se han precipitado día tras día. Apenas unos días después salía a la luz que la princesa de Gales acudiría a un evento. El primero desde su intervención. Fue el Ministerio de Defensa quien lo comunicó en su página web: Kate estaría el 8 de junio en el famoso Trooping the colour. Este acto celebra el cumpleaños del monarca inglés, una oportunidad magnífica para reaparecer de manera oficial.
Un anuncio que parecía demostrar que todo volvía a la normalidad. Pero dos hechos daban un giro radical a la situación. El primero es que Casa Real no confirmó la asistencia de la princesa y el segundo es que, horas más tarde, la institución se vio obligada a borrar el nombre de Kate de los asistentes del acto. Este cambio dejaba claro que la familia real no veía claro que la princesa estuviera preparada para volver a los eventos en junio.
Por ello, la preocupación por su estado de salud estalló de nuevo. ¿Su condición había empeorado? ¿Se encontraba mal? ¿Su convalecencia se alargaba? Las teorías volvieron a coger fuerzas y llegaron a niveles insospechados. Hasta tal punto que el propio Guillermo tuvo que dejar claro que eran tan poco creíbles que no iba a dedicarles tiempo. "Su atención se centra en su trabajo y no en las redes sociales", dijo una fuente a 'People'.
La polémica imagen del Día de la madre y el comunicado de Kate Middleton
Una de las facetas más importantes para Kate Middleton es su maternidad. La educación y crianza de sus hijos ha sido algo que ha marcado el día a día de la princesa a pesar de sus compromisos. Es por eso que no era de extrañar que la esposa de Guillermo escogiera el Día de la Madre como el momento ideal para reaparecer en redes sociales. Una imagen de la princesa con George, Charlotte y Louis en una zona exterior de su hogar revolucionaba las redes. "Gracias por sus amables deseos y continuo apoyo durante los últimos dos meses", escribió Kate, antes de desear un feliz día a todas las madres.
Sin embargo, el bonito gesto que podría haber tranquilizado todos los rumores avivaba la polémica. ¿La razón? La foto demostraba una clara edición en algunas partes. Por ejemplo, en la zona del pecho de Kate se puede apreciar que una cremallera no tiene continuidad. Algo que podría indicar que la imagen de la princesa habría sido colocada sobre el cuerpo de otra persona. ¿Por qué hacer algo así? ¿Podría ser que la princesa quería transmitir calma, pero no tendría las fuerzas para ello?
Viendo que su experimento de edición estaba generando grandes rumores y críticas, Kate emitía un comunicado pidiendo perdón por haber editado la foto. "Como muchos fotógrafos aficionados, a veces experimento con la edición. Quiero expresar mis disculpas por cualquier confusión que la fotografía familiar que compartimos ayer haya podido causar", escribió, en principio, la princesa.
¿Por qué 'en principio'? Porque el comunicado daba lugar a una nueva polémica. Mientras que el Palacio de Kensington atribuían las palabras del comunicado a Kate en redes sociales, en el texto enviado a los medios de comunicación se transmitía que había sido Guillermo quien había editado la foto. Una contradicción que no favorecía en nada a los extraños pasos que la Casa Real ha ido dando en las últimas semanas.
La última fotografía de Kate Middleton tras la polémica por la foto editada
¿Y que ha hecho Kate en plena polémica por la mencionada fotografía? Dejarse ver en coche con Guillermo. Ha sido hoy cuando los paparazzi atrapaban con sus cámaras a la princesa dentro del Range Rover azul del príncipe. Mientras que vemos claramente al hermano de Harry de la princesa solo percibimos su perfil.
El 'Daily Mail', quien ha conseguido esta imagen, ha explicado que esta instantánea se ha tomado cuando Guillermo se dirigía a la Abadía de Westminster para el servicio anual del Día de la Commonwealth. ¿A dónde ha ido Kate? Según el citado medio a una "cita privada" de la que no sabemos nada. Una incógnita más en la espiral de dudas, sospechas y movimientos extraños que han rodeado la salud de Kate Middleton, fraguando y consolidando un escándalo que no parece terminar.
Resurgen los rumores de infidelidad con Rose Hanbury
Por si esto fuera poco, los rumores de infidelidad de Guillermo con Rose Hanbury que surgieron en 2023 han vuelto a salir a la luz. La prensa británica cree que esta misteriosa desaparición de Kate Middleton puede deberse a una crisis matrimonial provocada por la examiga de Kate. Y es que la supuesta amante del heredero al trono, a la que han puesto incluso un mote, se ha convertido de nuevo en la gran protagonista de los últimos titulares.
¿Por qué han regresado los rumores? "Nunca abordaron el tema, por lo que esas especulaciones nunca desaparecerán a pesar de que no hay ninguna verdad que sugiera que sean ciertos", explica el experto real Omid Scobie en 'ET'. De hecho, es que parece que esta historia de amor entre bambalinas no viene del pasado verano sino que el río suena desde al menos 2019.
Guillermo da un paso y habla sobre Kate
La prensa británica lucha consigo misma por cómo defender a Kate. Todos están divididos entre el voraz apetito público que quiere conocer los detalles de la futura reina y los que quieren que las figuras públicas tengan el derecho a la privacidad en asuntos de salud. Sin duda dos posturas muy diferentes que provocan todavía más controversia.
En medio de esta dicotomía y con una crisis en la Corona sin precedentes, Guillermo se pronunció por primera vez en meses en el Museo de Ciencia de Londres haciendo un comentario sobre su mujer: "Mi esposa es la artística", dijo cuando echaba una mano a decorar unas las galletas con una manga pastelera, dejando claro que a la princesa se le hubiera dado mucho mejor que a él. Sin duda unas palabras con las que intentó que todos vieran que sus posturas está cerca y que habla de ella con mucho cariño.