El 19 de diciembre del año 2005 el doctor Julio iglesias Puga perdía la vida. Unos años antes se casó con la modelo Ronna Keitt, a quien dejó embarazada de Ruth. Sin embargo, Papuchi, como se le conocía cariñosamente, no llegó a conocer a su hija, ya que falleció antes de su nacimiento. Ruth acaba de cumplir la mayoría de edad y ha decidido mantenerse alejada del foco mediático para disfrutar de una vida tranquila.
Fruto de este matrimonio nació antes otro hijo, Jaime Nathaniel en el año 2004. Por su parte, Ruth llegaba en el 2006, siendo la hija póstuma del padre de Julio Iglesias. Pese a la diferencia de edad tan abismal, su relación se consolidó con el tiempo y lo que fue un flechazo a primera vista, se convirtió en una estabilidad con dos hijos en común, pese a que el ginecólogo nunca pudiera llegar a conocer a su última hija.
La historia de amor de Papuchi y Ronna Keitt
En el año 2001 la revista ‘Hola’ publicaba las imágenes de la boda entre Papuchi y Ronna. Por aquel entonces tenían 85 y 38 años respectivamente. No obstante, para aquella boda huyeron de todo el foco mediático y celebraron un enlace íntimo para consolidar sus diez años de noviazgo. Del evento en cuestión fueron muy pocos los detalles que vieron la luz, más allá de la ciudad elegida que fue Jacksonville (Florida).
No obstante, la pareja no quiso hacerlo público hasta que no se produjo el fallecimiento de la primera esposa del ginecólogo. Sin embargo, poco tiempo después llegaría el nacimiento de su primer hijo en común. “Este niño es un acto de generosidad hacia Ronna, que lo quería tener. Le dejo descendencia para que se acuerde siempre de mí. Le dejo parte de mi sangre, de mi vida”, declaró el padre de Julio Iglesias en mayo del año 2004 tras el nacimiento de Jaime Nathaniel.
Ruth, la hija de Papuchi, cumple 18 años
En cualquier caso, la historia de su segunda hija es completamente distinta, ya que Ruth nunca pudo llegar a conocer a su padre. Cuando Ronna estaba embarazada de tan solo tres meses, el doctor sufría una parada cardiorrespiratoria que acababa con su vida. Meses después nació su hija, el 26 de julio del año 2006. Por tanto, acaba de cumplir la mayoría de edad, pese a que son muy pocos los datos que hay sobre ella.
Cuando el doctor Iglesias Puga falleció, Ronna decidió trasladar su residencia a Jacksonville, el lugar donde se casaron. Allí podía disfrutar de una vida tranquila que tanto quería y necesitaba en ese complicado momento. De hecho, es el lugar donde en la actualidad continúa viviendo junto a sus dos hijos, consiguiendo mantenerse alejados del foco mediático en la medida de lo posible.
Allí la familia disfruta del anonimato, pese a que los dos hijos en común del matrimonio buscan un hueco en el mundo de la música. El mayor se ha formado en piano aunque es cierto que su perfil es bastante bajo. Por su parte, Ruth ha seguido la estela de su hermano Julio Iglesias y se ha formado en canto, aunque tampoco existen muchos más datos sobre ella para tratar de llevar una vida muy discreta.
No obstante, Ronna ya confesó que siempre trata de mantener vivo el recuerdo de su padre a sus hijos, hablándoles constantemente de él y de cómo era, ya que como no han podido contar con su presencia, al menos que tengan presente cómo era su padre. Por otro lado, Ronna sigue manteniendo contacto con Julio Iglesias y su mujer Miranda, algo que no ocurre con los hijos más mediáticos de este y nietos de su difunto esposo.
La vida actual de Ronna Keitt tras la muerte de Papuchi
Desde su fallecimiento quiso vivir aislada de los medios y trasladó su residencia en busca de esta tranquilidad. No obstante, cuando nació Ruth lo primero que hizo fue llamar a Julio y a Miranda para comentarle lo feliz que estaba. De todos modos, protagonizó algunas exclusivas tiempo después de la muerte de su marido, aunque decidió cortar de raíz y no querer saber nada de la prensa.
En cualquier caso, en el año 2020 concedió una entrevista. “Llevo muchos años sin hacer entrevistas o salir en una revista. Nunca me presento en la televisión. Deseo mantener mi vida y la de mis hijos de una forma privada. Cuando eran más pequeños permití que fueran fotografiados, pero después me di cuenta de que era una equivocación”, expresaba en ‘La otra crónica’. De todos modos, volvió al lugar donde se casó con su marido para dedicarse al cuidado de sus hijos, los cuales ya son mayores de edad ambos.