Así es la vida estival de Victoria y Cristina, las hijas gemelas de Julio Iglesias que se resisten a dar el salto a la fama

Si hay un ‘top diez’ de hombres famosos en nuestro país, sin duda uno de los puestos lo ocupa Julio Iglesias, él y toda su familia generan titulares casi cada vez que respiran, tanto cuando esa es su intención, como cuando preferirían quedar relegados a un segundo plano. Los Iglesias siempre fueron noticia, prácticamente todo el mundo conoce a Chabeli, Enrique Iglesias o Julio José que son sus hijos mayores fruto de su ex matrimonio con Preysler, también a Miranda Rijnsburger su actual mujer.

Los únicos más desconocidos son sus hijos más pequeños, los de su actual matrimonio, Miguel y Rodrigo jamás han querido hacer unos de su papel de famosos, y como además solo están en España en verano, no ha habido grandes ocasiones de conocerlos, las gemelas Cristina y Victoria, que tienen 23 años, si se han dejado ver más, de hecho, cuando cumplieron los dieciocho y abrieron sus redes sociales, todo el mundo pensó que estábamos ante las grandes nuevas socialités del momento.

El regreso de Victoria y Cristina Iglesias a las redes sociales

Pero no fue así. Pues las dos hicieron lo que nadie esperaba. Cristina borró su cuenta y Victoria sencillamente dejó de publicar. Pero ahora han vuelto, de manera discreta y casi con cuenta gotas, desde la finca de la localidad de Ojén donde suelen pasar cada verano. Llegaron en un vuelo privado desde Miami hace poco más de una semana y pasarán allí el verano junto a sus hermanos y su madre, puesto que su padre este año ha cambiado España por Punta Cana puesto que está colaborando con Netflix en la serie que se está haciendo sobre su vida tal como explicaba en exclusiva Vanitatis.

Estos días hemos podido ver a las gemelas haciendo una de las cosas que más les gustan del mundo y que más disfrutan en su tiempo libre en Málaga, montar a caballo, una pasión heredada de su madre. Al parecer, a su padre no le gusta que ellas compartan sus día a día y se tenga tanta información sobre su entorno, algo que no descuadra nada si se tiene en cuenta que él siempre ha sido muy cauteloso con su privacidad, y más después de haber sufrido el secuestro de su padre, algo que ocurrió en 1981 y que cambió la vida de toda su familia, pues sus hijos mayores, que entonces no lo eran, dejaron de estudiar en España y se trasladaron a Miami, donde él consideró que tendrían una vida más segura.

En solo unas semanas, las dos han aumentado sus seguidores, que no son pocos teniendo en cuenta el largo silencio en el que han estado sumidas, pues ambas superan los 150.000 seguidores. Es decir, tienen la suficiente audiencia como para poder convertir las redes en su medio de vida, pues seguro que oportunidades no les han faltado, pero de momento parece que no es el plan. Las dos siguen estudiando Administración y Dirección de Empresas y parece que por ahora no tienen planes relacionados con la exposición pública.

Atrás quedaron aquellos momentos en que, en muy poco tiempo, las pudimos ver en la prestigiosa gala MET en Estados Unidos o en el Baile de Debutantes de Paris. En España todavía no han pisado una alfombra roja, y este digital puede confirmar que invitaciones no les han faltado, pues hasta en tres ocasiones se ha querido contar con ellas, pero por ahora no han accedido. ¿Llegará el momento?