Decir que Juan del Val (52 años) y Nuria Roca (51 años) son uno de los matrimonios más duraderos, carismáticos y rentables de la televisión es quedarse corto. Cada día que pasa son más los proyectos profesionales que comparten el escritor y la periodista. Hasta ahora los podíamos ver debatiendo juntos en las tertulias de 'El Hormiguero' o compartir opiniones en 'La Roca', el formato que conduce Nuria desde hace un tiempo.
Esta misma semana se sumaba a ellos un nuevo reto que ellos mismos presentaron: 'Cita Doble', un podcast en que el matrimonio pretende, como explica en su propia descripción, desmitificar todo lo que damos por hecho de las relaciones. No estarán solo. Cada semana recibirán a parejas del panorama social de muchos ámbitos y con historias muy diferentes. Un espacio en el que no dudamos que la pareja nos regalará alguna de sus anécdotas y reflexiones sobre su propia vida privada.
Ante la sorpresa y curiosidad de los colaboradores, el escritor de 'Bocabesada' ha querido explicar sus razones. "Quién quiera llevarlo que lo lleve. Es que me parece un símbolo que no me gusta nada. Es como decir...", ha dicho, mientras hacia un gesto como queriendo indicar posesión o propiedad.
¿Por qué discutirían Juan del Val y Nuria Roca si se separaran?
Como hemos dicho, no es la primera vez que el matrimonio cuenta algunos aspectos más privados de su relación. La más reciente fue hace solo unos días en 'El Hormiguero' durante la tertulia con Pablo Motos, Cristina Pardo y Tamara Falcó. Una premisa del presentador del programa de Trancas y Barrancas: "El principal foco de las disputas de las parejas de Sevilla cuando se separan son las casetas y las sillas para la Feria de Abril y la Semana Santa". Los invitados a esta mesa no han dudado en contar cuál sería el motivo por el que ellos discutirían.
Rauda y veloz, Nuria Roca contestaba la primera: "No tengo caseta, pero tengo casa. Entonces he pensado, 'la casa me la quedo yo, claro, está a mi nombre'", ha afirmado, sonriente. Unas palabras ante las que Juan del Val ha reaccionado con su humor irónico habitual. "No tengo nada que decir. Quédate con la casa, con los niños, con los perros. No tengo nada que pleitear porque la casa es suya", ha dicho, risueño.