Mario Casas (38 años) es ya un habitual en 'El Hormiguero'. La última vez que acudió al programa de Pablo Motos, en octubre del año pasado, presentó el proyecto que le vinculó a Martin Scorsese. Este miércoles le toca el turno a otra película, 'El secreto del orfebre'. El actor se pone en la piel de un orfebre que, de un día para otro, recupera recuerdos de hace 25 años.
El primer trabajo de Mario Casas, antes de la interpretación
Las antiguas profesiones no le son ajenas. Mucho antes de que debutase en el mundo de la interpretación, Mario Casas fue aprendiz de ebanista junto a su padre. Empezó a trabajar desde muy pequeño para ayudar en una economía familiar que subsistía como podía para alimentar a cinco hijos. "La matriarca es mi madre, quien nos ha educado en el cuidado mutuo y en dar todo lo que tenemos a nuestros hermanos. Al final, somos muy protectores los unos con los otros. Yo he venido a esta vida para eso, para estar con mis hermanos y mis padres", decía en una entrevista reciente en Pronto.
Protagonizó un anuncio de Telepizza en donde, curiosamente, anunciaba que con cada pizza te llevabas de regalo una película de Steven Spielberg. Dos años después llegaría su segunda aparición televisiva junto a su hermana Sheila. Fue en 'Crónicas marcianas'. En aquel momento confesó que quería ser óptico, pero con el tiempo se interesó por la profesión de bombero y más tarde quiso convertirse en profesor de gimnasia. La vida tenía otros planes.
Siempre fue mal estudiante –incluso a día de hoy tiene dificultades para aprenderse las líneas de los guiones–, así que se dedicó a trabajar. Estuvo también en una fábrica haciendo latiguillos, repartió propaganda y vendió productos de limpieza al por mayor.
Mario Casas se vuelve abstemio
Durante su visita e 'El Hormiguero' Mario ha dicho a Pablo Motos que lleva "un tiempo" sin beber alcohol y que ha dejado de fumar "hace mes y medio". "No le estoy dando de comer al monstruo. Cambia la vida en todo. Todo. La manera de verlo todo cambia. Socialmente, como comes, como piensas. Todo". ha asegurado Casas, que cree que desde entonces es "más consciente" de quien es como persona.
"Sobre todo sabes lo que quieres. El alcohol es más social pero quítatelo verás cómo va a costar cuando te relacionas con los demás si no hay una cerveza o dos de por medio. La cosas cambian bastante. Hay que trabajar con uno mismo. Ahora mismo el deporte es como comer. Dejar los vicios detrás, descansar, te cambia la vida. No salgo nada de fiesta. a las 2:00-3-00 ves la fauna y me voy", ha relatado.
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Mario asegura que dejar de beber le ha cambiado la vida.
Sus primeros pasos como actor
El coruñés, que de niño se mudó con su familia a Cataluña en busca de un futuro mejor, se trasladó a Madrid con apenas 18 años. Quería probar suerte en la interpretación. Su primera oportunidad en la industria no tardó en llegar. En 2006 debutó en la gran pantalla con Antonio Banderas en 'El camino de los ingleses'. Esta película cambió su vida: le abrió las puertas de la industria.
Con ella llegó la serie 'SMS', de donde salieron rostros tan conocidos como Amaia Salamanca, María Castro, Yon González o María León. Se convirtió en ídolo de juventud por su papel 'Tres metros sobre el cielo'.
Aunque en su momento le encasillaron como el actor perfecto para comedias románticas, Mario Casas ha demostrado que es versátil con producciones como 'El fotógrafo de Mauthausen', 'Bajo la piel del lobo' y 'El practicante' o series como 'El inocente'. Como director y guionista ha hecho 'Mi soledad tiene alas' y recibió el Goya a Mejor Actor Protagonista por ‘No matarás’.
Gtres
Si el público recuerda un papel de Mario Casas es el de Aitor Carrasco en 'Los hombres de Paco'. Muchos lo conocieron ahí. El tiempo es caprichoso y ha querido que vuelve a trabajar con Michelle Jenner en 'El secreto del orfebre', la película que presenta este jueves en 'El Hormiguero' y que llegará a las salas de cine el 28 de febrero.
Un ligón desde que era pequeño
Siempre ha sido un ligón. Tuvo a su primera novia con apenas cuatro años y desde entonces han pasado por su vida rostros tan conocidos como Amaia Salamanca, María Valverde, Blanca Suárez, Clara Lago, Berta Vázquez y Deborah François. La última, la intérprete mexicana Eiza González.
A día de hoy no mantiene ninguna relación. Pese a eso, sí que espera poder encontrar pronto a ese alguien con la que compartir su vida y tener cuatro o cinco hijos, o eso ha dicho en más de una ocasión. Mientras tanto ha decidido volcarse en su familia, sus amigos y, por supuesto, en el trabajo. O en su otra pasión, la música. En su lista de reproducción nunca falta Camarón de la Isla, aunque reconoce que le gusta todo.
También es muy importante el deporte. No hay día que no acuda al gimnasio. Practica además boxeo. Como curiosidad, le apodan El cobre. "Soy un buen conductor de electricidad, rápido", decía en una visita anterior a ‘El Hormiguero'. El deporte es en lo único que no le gana su hermano Óscar, por el que siente verdadera admiración. Incluso ha llegado a reconocer que ha demostrado mucho más como actor que él a su edad: "Es más simpático, más guapo... Está demostrando que a su edad es mejor actor de lo que era yo".