Lucas (22 años) es un estudiante de producción musical de Tenerife. Ha llegado a ‘First Dates’ para cambiar su suerte en el amor. "La inmensa mayoría de las citas que tengo, terminan en amistad", le ha confesado a Laura Boado (26 años), queriendo hablar de otra cosa que no sea de su desastroso pasado sentimental. Quizá el problema sea su concepto del amor y lo que busca en una mujer. "Las pijas progres me gustan mucho. Quiero una persona con dinero, progre que vista con pantalón campana", ha dicho.
Ha sido en ese momento cuando ha soltado la primera de las perlitas de la noche: "Soy progre, pero no soy pijo, y lo que quiero es subir de jerarquía. Si puedo depender de alguien, mejor". Muy sorprendida, Laura le ha preguntado si eso es realmente lo que querría en su vida. "Si, se cambian los roles de género ahora. A mí sí se me diese el caso de tener una pareja estable y tuviésemos chiquillos, yo sería la esposa tradicional. Lo que sería mi abuela de antes, pero siéndolo yo", ha afirmado.
Sherezade (20 años), una joven madrileña más en busca de trabajo, solo quiere una comunicación asertiva con su futura pareja. Sin duda, con Lucas la ha tenido. No se ha dejado nada en el tintero pese a quien le pese. Aunque muy nervioso cuando se la han presentado en el dating show, el estudiante se ha ido soltando a lo largo de la cita. Su táctica es volverlas locas cuando las conoce como una forma de testear su humor. Así puede su reacción ante algo que no les gusta. Lo que no ha quedado muy claro es dónde termina la broma y dónde empieza la realidad.
"¿Quieres tener hijos?", le ha preguntado ella. "Estás yendo muy rápido, todavía no nos han traído el primer plato. Ahora no porque no sé las vueltas que va a dar la vida, pero necesito medio millón. Quiero que mi hijo no tenga conciencia de clase ninguna. Que por mucho que se le intente inculcar, esté súper desorientado. Como que cuando sus amigos digan que no pueden salir por dinero, él diga ‘qué menudos pobres de mierda’", le ha asegurado. "Aspiro a ser pijo. Mientras tenga dinero me da igual porque como ya estoy en otra jerarquía, puedo tratar a los demás como la mierda".
Ni corto ni perezoso ha bromeado sobre su comportamiento para ver cómo reaccionaba, pero después ha seguido actuando igual. Eso le ha dado muchas pistas a Sherezade. "Tiene su personalidad. Me parece agradable, encantador, pero es un poco raro y para mí lo raro es bonito", ha confesado a las cámaras de ‘First Dates’. Eso sí, como amigo únicamente. Ninguno de los dos se ve como pareja. "A mí no me gustaría tener una cita contigo en plan romántico, sí de amistad. Me has caído muy bien", le ha dicho ella en la decisión final. Él ha optado por dejar la puerta abierta a que sus sentimientos cambien en el futuro.