David Bustamante (41 años) se convirtió en una estrella tras su paso por 'Operación Triunfo'. En apenas dos meses pasó de esperar horas en una tienda para poder devolver unos zapatos a ser el responsable de las largas colas que se produjeron en la misma. El cántabro se convirtió en un ídilo de masas. Sigue agrupando a miles de personas cada vez que se sube a un escenario. Su trayectoria es envidiable, pero eso no está extento de situaciones complicadas. El cantante se sincera con Albert Espinosa en 'El camino a casa' sobre el "peor momento" de su carrera.
'El camino a casa' ha comenzado en su antiguo instituto, José Hierro. Allí, se han encontrado con dos antiguos profesores y la dependienta de la cafetería que le vendía chocolatinas en el recreo. Albert y David han caminado hacia el secadero de redes donde solían jugar al fútbol. Al llegar al lugar, se han topado con la pandilla de la infancia, con la que pasaba el tiempo y jugaba al fútbol. Juntos se han trasladado hasta la ermita de la Virgen de la Barquera, donde David fue picayo (portador de la Virgen).
Este camino ha terminado en la puerta de la casa donde vivió el cantante en su infancia. Antes de subir al piso que después de todos estos años sigue llena de firmas de sus fans de OT, ha hablado del que para él ha sido el "peor momento" de su carrera profesional.
"Cuando me lesioné de la voz. He tenido dos sustos de estos y estuve muchos meses sin poder hablar ni cantar. Entonces, ya no solo era no poder ir a trabajar. Es que mi personalidad es hablar mucho así que imagínate", ha confesado. El motivo, una alergía. "Estuve dando un concierto en unos olivares y eso me dio alergia. A los 20 minutos me quedé sin voz, pero yo quise seguir. Al terminar el concierto, me había destrozado la garganta. Fue un momento duro, pero gracias a Dios estoy totalmente sano y sigo teniendo el mismo registro", ha añadido.
David Bustamente, un apasionado de la música desde pequeño
David Bustamente siempre ha sentido pasión por la música. La culpa la tiene su padre. No solo le enseñó un oficio en la obra, también le contagió su amor por el escenario. Le vio crecer entre instrumentos, mientras que él soñaba con llegar a ser el artista que hoy en día es. "Me cogía el mando de la televisión cuando salía Luis Miguel y me preguntaba qué tal lo hacía. Nos hacía unos recitales en casa", ha recordado Ada, su madre. Sin embargo, si hubo un concierto que le marcó ese fue el de Sergio Dalma.
"Tuve que meter muchas horas para construir un hotel porque venía un gran artista, que hoy en día es amigo: Josep Capdevila, más conocido como Sergio Dalma. De premio el que nos contrataba, me permitió echarme una foto con él y conocerle. Entonces, le dije: 'Ojalá un día fuera como usted porque le admiro mucho'. Al verano siguiente tenía a 22.000 personas en ese campo de fútbol. Ahí empezó mi carrera", ha recordado. "Cuidado con lo que deseas".