De 'Spice Girl' a icono de la moda
De icono juvenil a mujer de futbolista famoso. Ni más ni menos que David Beckham. Y de ahí, a mamá de cuatro hijos y diseñadora de moda de altos vuelos. Guapa, rica y famosa, a Victoria Beckham le tocó una hada madrina muy profesional que ha envuelto su vida en purpurina de oro.
Mamá, quiero ser artista
Victoria Caroline Adams (17 de abril de 1974, Hertfordshire, Inglaterra) fue la pija de aquel grupo llamado Spice Girls. Y de casta le viene al galgo, pues su familia había amasado una pequeña fortuna con el negocio de electricidad de su padre, Anthony William Adams.
Anthony y su mujer, Jacqueline Doreen, que había sido peluquera y vendedora de seguros, sabían que la mayor de sus tres hijos tenía muy clara su vocación: quería ser artista. Así que la matricularon en varias escuelas de teatro donde hizo danza.
Su posición económica le ayudó a estudiar pero también le causó problemas. Según ha explicado en alguna ocasión, en el instituto sufrió 'bullying', no tuvo amigos e imploraba a su padre que no la fuera a buscar en Rolls Royce para evitar los insultos. Sin embargo, no todo fue negativo en aquella época, y hubo quien sí la aceptó. Fueron los miembros de su primera banda: Persuasion, un grupo en el que duró muy poco porque pronto caería en sus manos un anuncio que decía: ‘Se buscan cinco chicas informales, extrovertidas, ambiciosas y capaces de cantar y bailar’. Se presentó al casting y en 1994 se convirtió en una de las cinco integrantes de las Spice Girls.
Cantante relámpago
Las Spice Girls fueron un auténtico fenómeno juvenil. Su primer single, 'Wannabe' (1996), fue número uno de la listas de éxitos en más de 30 países. Y Victoria se vistió de 'Posh Spice' (‘Spice pija’) en los tres discos del grupo: 'Spice', ''Spiceworld' y 'Forever'.
Empezaron muy fuerte pero año tras año se fueron relajando y también creció en ellas la necesidad de formar una familia y tener sus propios proyectos. Así le sucedió a Victoria, que se lanzó en solitario grabando el álbum 'Victoria Beckham' (2001). Solo dos sencillos vieron la luz y con escasa repercusión: 'Not such an innocent girl' y 'A mind of its own'. Y entre que no consiguió la respuesta esperada y que tuvo a su segundo hijo, su carrera musical se quedó ahí. Volvió a intentarlo algo más tarde, pero nunca llegó a editar un segundo disco.
El micrófono no parecía ser lo suyo realmente, aunque insistió regresando con las Spice Girls. Fue en el 2007 para realizar una gira que pusiera punto y final a aquella aventura juvenil. Y cuatro años más tarde demostró que había hecho historia con las Spice apareciendo en la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Fue el único guiño que se permitió una Victoria que ya había olvidado la música para convertirse en toda una gurú de la moda.
El clan Beckham
En 1997, cuando todavía era la Spice pija, conoció a David Beckham en un partido de fútbol benéfico. "No tenía ni idea de quién era él. Nunca me interesó el fútbol", llegó a decir Victoria. Se enamoraron desde el primer instante en que se vieron y el 4 de julio se casaron en el Castillo de Luttrellstown, en Irlanda. Su primer hijo, Brooklyn Joseph, fue el encargado de llevar los anillos con sus recién estrenados cuatro meses.
La boda costó unos 750.000 € y contó con 226 invitados. Todo un alarde de poderío que ya demostraron con los regalos de compromiso: David le regaló un anillo de diamantes y un colgante valorado en 15.000 €, y Victoria, un brazalete de oro y diamantes que costó alrededor de 13.000 €.
La pareja se convirtió en un icono del 'glamour'. Beckham era uno de los hombres más deseados y a Victoria se la consideraba una de las mujeres más influyentes en cuanto a moda se refería. Cuidaba su físico hasta un punto obsesivo. Sabía las calorías de cada alimento, llegó a sufrir desórdenes alimentarios y parece ser que se gastó más de 25.000 € en operaciones para aumentar el pecho, afinar la nariz, y realzar pómulos, ojos y labios. Además, su cuerpo, como el de su marido, se convirtió en el lienzo perfecto para escribir su historia. Victoria se tatuó la fecha de la primera noche que pasó con David en números romanos en su muñeca izquierda, y tanto ella como su marido lucen la frase de la Biblia 'Yo soy de mi amada y mi amada es mía'.
Los Beckham, con los años, se han convertido en una familia numerosa. Brooklyn Joseph, Romeo James, y Cruz David, vieron como el 10 de julio del 2011 llegaba el último miembro. Era la niña que tanto habían deseado: Harper Seven. Victoria twitteaba: "Es la más hermosa que he visto nunca. ¡Me he enamorado de nuevo! Es la niña de papá".
Lujo y pesadilla
Victoria y Beckham, juntos, son una auténtica máquina de hacer dinero. Siete coches de lujo y un yate valorado en casi dos millones de euros, una mansión a la que llaman 'Buckingham Palace' en Inglaterra, otra en Madrid y otra en Beverly Hills, al ladito de la de Tom Cruise, son solo algunas de las posesiones de una pareja que ya se encuentra entre las más ricas de Reino Unido. Esto les hace estar en el punto de mira de fans pero también de locos.
En el 2000 Victoria empezó a recibir amenazas de muerte, como una foto suya atravesada por una bala en la cabeza. Por aquellos hechos, detuvieron a su ex guardaespaldas Mark Niblett como presunto autor del envío de las cartas amenazantes. Sin embargo, la pesadilla no terminó aquí y en el 2002 la policía abortó un intento de secuestro de Victoria y de sus hijos gracias a unos periodistas infiltrados en la banda.
Madrid y las infidelidades
En el 2003, empezó a sospecharse que la pareja estaba en crisis. Con el fichaje de David Beckham por el Real Madrid, se trasladaron a la capital española, donde vivían en un palacete que había sido de la periodista Ana García Siñeriz en la urbanización Las Encinas. Pero a Victoria no le gustaba nada. Como muestra, una declaración que trajo cola: "Este país huele a ajo".
Siempre que tenía ocasión, se marchaba a Londres o a Nueva York y estas continuas ausencias, desataron los rumores de infidelidad de Beckham. Su asistente, Rebecca Loos, afirmó haber ocupado el hueco que dejó la cantante en la vida del futbolista y dijo que la modelo Esther Cañadas también tuvo algo con él. Otra que aprovechó el momento fue la ex niñera de la pareja, Abbie Gibson, quien aparecería en el diario inglés 'News of the World' afirmando que la pareja discutía muchísimo, que David tuvo una relación con su masajista, Danielle Heath, y que estaba con Victoria por interés comercial.
Victoria acabó perdonando las supuestas infidelidades, aunque se mantuvo ojo avizor alejando a posibles contrincantes de no muy buenos modos, según llegó a contar la mismísima Ana Obregón, quien dijo que la Beckham la había insultado en un gimnasio gritándole "¡Deja en paz a mi marido!".
A pesar de todos estos incidentes, la pareja siguió mostrándose al mundo como siempre lo habían hecho, felices y 'glamourosos', y renovaron sus votos matrimoniales en mayo del 2006.
Pero en el 2009, volvió el fantasma de la crisis. Los Beckham, instalados ahora en Los Angeles, tuvieron que separarse cuando el club Los Angeles Galaxy cedió a Beckham al Milan. Victoria no estaba dispuesta a irse a Italia y dejar California, pero, finalmente, la pareja volvió a limar sus diferencias ayudados por el padre de la artista, responsable de hacer siempre que las aguas vuelvan a su cauce y de conseguir los contratos millonarios de su hija y su yerno.
Diseñadora de moda
En Los Ángeles Victoria continuó cosechando éxitos como diseñadora con su firma DVB (David Victoria Beckham), que presentó justo cuando se mudaron a Estados Unidos, en el 2007.
Aunque ya había diseñado ropa para 'Rock and Republic', nadie daba mucho por su propia firma, pensando que se trataba solo de un capricho de la artista. Pero demostró que sus diseños triunfaban: "Las ventas han aumentado un 120% año a año", dijo, y los 9 puntos de venta internacionales con los que empezó, hoy son más de 30.
Entre sus fans, tiene a famosas como Jennifer Lopez, Heidi Klum, Sarah Jessica Parker, Eva Longoria e incluso Madonna. Además, en el 2011 fue la ganadora de la Firma del Año en los British Fashion Awards y los últimos años ha triunfado en la Semana de la Moda de Nueva York. No obstante, no solo como diseñadora ha recibido aplausos. También lo hizo como modelo cuando Armani la fichó para que presentara su colección de moda íntima.
Con el aterrizaje de los Beckham en Los Ángeles, se demostró que la fama de Victoria había superado prácticamente a la de su marido. Se vio cuando la NBC le pagó más de 15 millones de euros para realizar un reality show de seis capítulos sobre su traslado de Madrid a América. El reality, por falta de material, acabó siendo un documental de una hora titulado 'Victoria Beckham: Coming to America', que generó más de una crítica al oírle decir cosas como "Es agotador ser fabulosa".
A pesar de sus quejas poco adecuadas y de su gesto siempre mohíno, gana cada día más fans y su carrera parece imparable. Su próxima conquista: el país de su admirada Coco Chanel. Y es que mientras la vida futbolística de su marido ha terminado en París, la suya como diseñadora va camino de conseguir la cota más alta: poner a la mismísima capital de la moda a sus pies.
En septiembre de 2014 inauguró su primera tienda, en el exclusivo barrio londinense de Mayfair, coincidiendo con su nombramiento de embajadora de buena voluntad de la ONU contra el sida, por lo que ofreció un discurso en la sede de Naciones Unidas en Nueva York.