EXCLUSIVA | Julio Basulto, experto en nutrición: "Alejarse de gente hostil hace que seas mucho más proclive a comer sano y ser feliz"

El experto en nutrición ha compartido su reflexión sobre la relación que existe entre una correcta alimentación y la felicidad.

Alicia Alarcón
Alicia Alarcón

Redactora digital de Lecturas

Julio Basulto
RNE

La felicidad está, inevitablemente, conectada con el bienestar físico y emocional. Aunque no es un elemento tangible, está relacionada con las rutinas y experiencias del día a día. La calidad de las relaciones, el amor, nuestra salud mental e incluso la nutrición son algunas de ellas. Julio Basulto, dietista-nutricionista, cree que la felicidad y la forma en la que nos alimentamos están conectadas.

“Existe una relación indirecta entre la felicidad y la nutrición"

"Comer mejor hace que seas más feliz indirectamente porque cuando alguien tiene mala salud muy feliz no es", relata el experto en nutrición a este medio. La ciencia ha demostrado que la calidad de las relaciones juega un papel clave sobre nuestros niveles de felicidad. Así lo recoge el estudio más longevo sobre felicidad elaborado por la Universidad de Harvard. Rodearnos de 'personas vitamina' es fundamental para ser felices en la vida.

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Por el contrario, las relaciones tóxicas tienen un impacto negativo sobre la calidad de vida y merman nuestro bienestar tanto físico como mental. Además, son capaces de influir sobre el cuidado de nuestra alimentación siendo otro factor de lo más importante para el bienestar personal. "Yo creo quemás que rodearse de gente cariñosa, alejarse de gente hostil hace que seas mucho más proclive a comer sano y ser feliz", nos cuenta el experto en nutrición desde el otro lado del teléfono.

Julio Basulto ha expuesto un ejemplo de lo más sencillo para entender esta situación. "No solo te da felicidad alejarte de la hostilidad, sino que también te vuelve mucho más proclive a llevar un buen estilo de vida incluyendo la alimentación. Si tu jefe, pareja o compañero te maltrata, te aseguro que no escogerás una zanahoria sino la palmera de chocolate", explica. La realidad es que todos estos asuntos están relacionados de una u otra forma.

La nutrición, las relaciones y la felicidad son elementos clave conectados con el bienestar físico y emocional. “Existe una relación indirecta entre la felicidad y la nutrición. Está demostrado que tener buenas relaciones sociales hace que comas mejor", asegura el experto. Aun así, pocos son conscientes de ello y muchos relegan su alimentación a un segundo plano. "Una alimentación saludable es clave para prevenir enfermedades", subraya el nutricionista.

De hecho, la malnutrición es uno de los principales motivos que se sitúa tras muchos problemas de salud como la obesidad. “Las enfermedades cardiovasculares producidas por la mala alimentación matan a doce millones de personas cada año en Europa y ahí no incluimos el cáncer. Es muy difícil seguir un buen estilo de vida si tienes unas relaciones dañinas", añade el experto.

Más allá de las relaciones, “comer bien, descansar y dormir" adecuadamente son hábitos imprescindibles para la salud que hay que tener en cuenta. También la Organización Mundial de la Salud (OMS) avala esta evidencia científica. "Dormir bien es fundamental para mantener un buen estado físico, mental y emocional. Dormir lo suficiente y de calidad es importante para el equilibrio del organismo y el rendimiento", aseguran los expertos de la OMS. 

Más allá de las relaciones: la clave para una buena alimentación

El experto en nutrición ha compartido con Lecturas la clave de una dieta perfecta que termina con muchas creencias populares. “Comer de todo no es comer sano, que es un mensaje bastante contradictorio con lo que nos quiere vender la industria alimentaria. Comer sano es priorizar en tu dieta los alimentos de origen vegetal. Yo lo resumo en el acrónimo 'SALTAR'”, explica Basulto. 

El plan es sencillo. “Huir del sedentarismo, del alcohol, priorizar la lactancia materna, evitar el tabaquismo, la alimentación malsana más que pensar en comer bien y las relaciones dañinas”, explica. En definitiva, el control de la alimentación es una regla de oro que no debe incumplirse para mantener una vida sana y feliz.