La simpática Concha Velasco dio el bombazo en 1977 al casarse por sorpresa con un entonces desconocido actor que respondía al nombre de Paco Marsó y que, con los años y tras muchos altibajos y separaciones, acabó siendo el gran amor de su vida.
Concha lució un vestido de cuello redondo que complementó con abrigo blanco con capucha ceñido a la cintura.
"No quise líos ni follón en el templo"
De forma totalmente inesperada, Concha y Paco pasaron por el altar el 18 de abril de 1977. "Sin previo aviso ni grandes algaradas, Concha y Paco se dieron el "sí, quiero" en la iglesia del Pilar, en Chamartín. Asistieron sesenta invitados; apenas las familias de los dos contrayentes y algunos compañeros de profesión, siendo los más conocidos el actor José Luis López Vázquez y el director Pedro Lazaga. El ágape posterior fue más concurrido, con unos doscientos asistentes", contaba la revista Lecturas.
La pareja, en un momento de la ceremonia, junto a la madre de Paco, que ejerció de madrina.
El motivo por el que Concha prefirió no anunciar a bombo y platillo que se casaba lo tenía muy claro. "No quise líos ni follón en el templo, preferí dar la sorpresa", confesó la actriz a la salida de la iglesia.
Los recién casados se habían conocido doce años atrás representando 'Don Juan Tenorio', de Zorrilla, en el teatro. Ella, por supuesto, era doña Inés, pero Paco tenía un personaje secundario. Así lo reflejaba Lecturas en el reportaje de la boda: "En aquel entonces no hubo más que una relación profesional. La chispa amorosa no surgió entre los dos hasta este año, momento de su reencuentro sobre las tablas".
No faltó el rito de las arras.
Se enamoraron trabajando juntos en el teatro
Concha y Paco volvieron a coincidir en 1977 en la obra 'Las arrecogías del beaterio de Santa María Egipciaca' y allí se enamoraron. Paco llevaba enamorado de Concha desde hacía mucho tiempo, pero nunca se había atrevido a manifestárselo. "La recuerdo como doña Inés y sentía envidia del actor que hacía de don Juan. Creo que yo me enamoré entonces de Concha, pero no me atreví a decirle que la quería", confesó a Lecturas.
Paco era ya un joven muy atractivo, pero en 1965, año en el que, por primera vez, trabajaron juntos, el joven Marsó era todavía menor de edad, por lo que Concha nunca reparó en él más allá del hecho de ser un compañero de trabajo.
Paco le pone la alianza a Concha.
Concha confirmó a Lecturas que el amor entre ellos había estallado recientemente. "Nos caíamos bien de antes. En los ensayos de 'Las arrecogías' intimamos... En la obra, él es mi amante y me da un beso. Yo me encontré muy a gusto con Paco y al poco se me declaró", reveló a nuestra revista.
Ala ceremonia asistieron unas 60 personas.
Enamorados, al final Paco se lanzó al vacío. Así lo recordaba Concha: "Me dijo: 'Concha, seríamos más felices casándonos, te doy un plazo. Piénsalo hasta el 17 de abril'. No esperé ese plazo. Le dije que sí, que lo quería y que aceptaba el matrimonio".
Concha y Paco brindaron por su amor.
Ella le regaló un reloj y él a ella, nada
Como regalo de compromiso, Concha le regaló a Paco un reloj, que él lució, orgulloso, en su boda. ¿Y qué le obsequió Paco a Concha? La actriz respondió: "Nada, Paco es pobre. Simplemente, me regaló una promesa: comprarme un televisor en color en cuanto ahorre ciento y pico mil pesetas, que es el coste actual, más o menos".
Para la boda, Concha lució un sencillo conjunto en blanco de falda midi y blusa de cuello redondo, con fruncido en el busto y en la cintura, así como en los puños. Lo complementó con un abrigo con capucha y un tocado de flores en el cabello.
Concha, con los años, confesó que Paco fue el hombre de su vida.
Diana y Manolo, los otros dos protagonistas de la boda
Cuando se casaron Concha tenía entonces 37 años y Paco, 30. La actriz acababa de ser madre por primera vez de un niño llamado Manolo. El pequeño, nacido en septiembre de 1976, tenía siete meses y aunque no era hijo biológico de Paco, este lo crio como su verdadero padre.
Concha confesó con los años que el padre de Manuel fue el director de fotografía Fernando Arribas, que por entonces era un hombre casado. También Paco aportó a una hija de una anterior relación, Diana, de tres años. Tanto Manolo como Diana fueron los otros dos protagonistas de la fiesta nupcial de sus papás.
Tanto Paco como Concha aportaron cada uno un hijo al matrimonio. Paco, a su hija Diana, de tres años, y Concha, a Manolo, de siete meses.
Se quedaron sin luna de miel
Paco nos habló así de la pequeña Diana: "Fue fruto de un amor del pasado. Diana vive conmigo, es una niña preciosa y la adoro. Igual que quiero con locura a Manolo, el hijo de Concha. Pienso que Diana y Manolo van a convivir como hermanos".
Concha y Paco no pudieron hacer viaje de novios, ya que ambos tenían que seguir trabajando en el teatro.