Última hora sobre la salud del papa Francisco: nueva decisión de los médicos tras sus graves crisis respiratorias

El papa Francisco (88 años) afronta su tercera semana ingresado en el hospital Gemelli de Roma. La expectación sobre su estado de salud no deja de crecer y las preguntas sobre qué ocurrirá si no puede ejercer el cargo, también. 

Está claro que la neumonía bilateral que afronta desde hace semanas es complicada y preocupante. De hecho, hace solo unos días sufría una nueva crisis respiratoria. El Vaticano señalaba que las horas del fin de semana eran clave para su recuperación, mientras que desmentía que fuera a comenzar el proceso para elegir a su sucesor pronto.

A pesar del positivismo con el que la Santa Sede ha encarado las nuevas circunstancias del Papa, en la tarde del lunes volvía a emitir nuevas informaciones sobre la situación de Francisco. Al parecer, el Santo Padre había presentado "dos episodios de insuficiencia respiratoria aguda causados por una importante acumulación de mucosidad endobronquial, creando una nueva crisis de broncoespasmo", ha explicado la Oficina de Prensa del Vaticano.

En el comunicado emitido en la mañana del martes se volvía a poner el acento en la frase más repetida a lo largo de estos días: "El Papa ha dormido bien toda la noche". Además, aseguran que el ocupante de la cátedra de San Pedro se ha mostrado "siempre lúcido, orientado y colaborador". Bergoglio tendrá que someterse a nuevas pruebas médicas tras las crisis respiratorias.

Aumenta la preocupación por el estado de salud del Papa

En el nuevo comunicado compartido por el Vaticano se vuelve a incidir en que el papa Francisco "ha dormido bien toda la noche". Los médicos solicitaban este lunes nuevas pruebas médicas y la Santa Sede asegura que el Pontífice ha estado "siempre lúcido, orientado y colaborador", a pesar de su delicado estado de salud.

Para intentar paliar su estado, los médicos llevaron a cabo dos broncoscopias en las que se aspiraron secreciones abundantes. Unas horas más tarde se volvió a aplicar una ventilación mecánica no invasiva para ayudarle a superar este bache. El Papa Francisco había dejado este mecanismo y era sustituido por "oxigenoterapia de alto flujo".

Los médicos, optimistas dentro de la gravedad

El parte emitido el lunes, 3 de marzo, se contrapone con el que emitía la oficina esta mañana, en el que tranquilizaba a los fieles y a la comunidad internacional con unas breves, pero alentadoras palabras: "El Papa ha descansado bien toda la noche". Las palabras de la Oficina de Prensa del Vaticano eran tranquilizadoras, ya que vuelven a poner el acento en que el papa Francisco "ha descansado bien toda la noche" y aseguraban que continuaba "estable".

Una información que tranquilizaba momentáneamente a los seguidores que han seguido de cerca las 17 noches que el Pontífice ha pasado ingresado en el Hospital Gemelli de Roma. Muchos de esos fieles se agolpado alrededor de la estatua de Juan Pablo II para rezar por Bergoglio. Este domingo, los médicos presentaban una actitud más optimista, aunque eran cautos después de la crisis respiratoria del pasado viernes, 28 de febrero.  Una prudencia que ahora se intensificara tras estas dos crisis.

Su cuadro todavía es complejo

Han pasado 72 horas desde que el sumo pontífice sufría una nueva crisis respiratoria. "Presentó un ataque de broncoespasmo que terminó en un episodio de vómitos con inhalación y un empeoramiento repentino del cuadro respiratorio", publicaba el Vaticano este mismo viernes. Desde entonces, todas las miradas apuntan hacia la Santa Sede y el papa Francisco en busca de nuevas noticias. Según las últimas informaciones emitidas desde el Vaticano, el Papa está recuperándose de esta última crisis respiratoria.

Al parecer, es capaz de alimentarse por sí mismo y realiza la fisioterapia respiratoria con normalidad a la que está siendo sometido. Sin embargo, la prensa italiana asegura que "no está fuera de peligro" ya que las próximas horas todavía son clave para su recuperación. Ante la oleada de rumores, el portavoz de los obispos de la Santa Sede ha señalado que "no estamos en absoluto en periodo precónclave ni mucho menos". De hecho, el Vaticano espera que el sumo pontífice pueda recuperarse pronto. Aun así, la expectación no deja de crecer. Después de un rayo de esperanza en forma de mejoría del papa Francisco hace una semana, todavía se teme por la vida del pontífice.

“Se inició ventilación mecánica no invasiva, con buena respuesta en el intercambio gaseoso. El Santo Padre permaneció alerta y orientado en todo momento, colaborando en las maniobras terapéuticas”, señalaban desde el Vaticano hace pocas horas. Aunque el pronóstico es reservado, se habla de una "situación compleja". La preocupación por el estado de salud del santo padre es ahora mayor que nunca, pero desde el Vaticano se asegura que la crisis respiratoria ha sido puntual.

Francisco continúa ingresado en el Hospital Policlínico Gemeli de Roma 

El papa Francisco afronta algunos de los días más complicados de su vida en el Hospital Policlínico Gemeli de Roma donde continúa ingresado desde el pasado 14 de febrero. La expectación sobre su estado de salud era máxima el pasado fin de semana cuando su cuadro clínico se complicaba. "El santo padre fue inmediatamente broncoaspirado y comenzó a recibir ventilación mecánica no invasiva, con buena respuesta al intercambio gaseoso", explica el último comunicado. Aun así, ahora el papa se encuentra "vigilante y orientado, colaborando en las maniobras terapéuticas".

A la espera de conocer su evolución

“Ha salido de la fase más crítica”, señalaba el Vaticano a primera hora del pasado jueves sobre el Papa. Tal y como ha dado a conocer el entorno del pontífice, ha podido descansar esta última noche ya que también ha sido muy tranquila. “El estado de ánimo del Papa es bueno”, añade el Vaticano. No obstante, su cuadro clínico es todavía complejo y algo delicado. Según los profesionales que tratan al Papa, necesita todavía “reposo absoluto”.

Por el momento, el pontífice está “alternando la terapia de oxígeno a altos flujos con la máscara de oxígeno”. La buena noticia es que Francisco no ha tenido que ser intubado y puede respirar por sí solo a pesar de dicha asistencia que se le suministra en determinados momentos. Otro de los últimos tratamientos a los que ha sometido ha sido la fisioterapia respiratoria prescrita.

El Papa rompe su silencio sobre su complicado estado de salud

El papa Francisco no ha vuelto a manifestarse desde que fue ingresado en el hospital. "Agradezco de corazón a los médicos y al personal sanitario de este hospital la atención que me están demostrando y por la dedicación con la que realizan su servicio entre las personas enfermas”, manifestaba en las primeras líneas de su comunicado. El pontífice se dirigía hace pocos días a sus fieles, quienes han mostrado todo su apoyo en estos momentos tan complicados, para agradecer su presencia.

"En estos días me han llegado muchos mensajes de afecto y me han impresionado especialmente las cartas y dibujos de los niños. ¡Gracias por esta cercanía y por las oraciones de conforto que he recibido de todo el mundo! Encomiendo a todos a la intercesión de María y les pido que recen por mí", añadía Francisco.

Aunque de momento guarda silencio, el Papa habría cumplido esta misma semana con algunas de sus tareas como pontífice desde el hospital. Así lo daba a conocer la Santa Sede en uno de sus comunicados. No obstante, su agenda presencial sigue cancelada. Es más que evidente que son días complicados para el pontífice en los que debe centrarse en guardar reposo. Aun así, este se muestra tranquilo, optimista y agradecido. No es la primera vez que afronta un complicado bache de salud y espera salir adelante como ya ha hecho en otras ocasiones.

Millones de fieles rezan por su salud

Las puertas del Vaticano se han convertido en un lugar de rezo más frecuentado de lo habitual en estas últimas semanas. Allí se concentran cientos de fieles desde que Francisco fue hospitalizado. También el Obelisco de Buenos Aires de su país natal, Argentina, se ha volcado por completo sobre el Papa con la proyección de su imagen en el interior.

Allí también se concentran sus seguidores quienes rezan todavía por que el Papa supere esta afección cuanto antes. La Catedral de la Almudena de Madrid es otro de los escenarios donde los fieles no dejan de rezar por la recuperación del papa Francisco. En una de las últimas misas, el arzobispo José Cobo ha enviado todo su apoyo al pontífice y ha expresado sus deseos para que pueda recuperarse cuanto antes.