Última hora sobre los dos hombres desaparecidos en el embalse de Belesar (Lugo)

Los equipos de búsqueda han terminado las labores de rastreo de los dos hombres desaparecidos durante la tarde del martes en el embalse de Belesar tras recuperar ambos cuerpos sin vida.

Alicia Alarcón
Alicia Alarcón

Redactora digital de Lecturas

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Europa Press

La Guardia Civil ha terminado la búsqueda de los dos hombres desaparecidos el pasado martes en el embalse de Belesar (Lugo). Las labores de rastreo que se paralizaron durante la noche del propio martes se reanudaron ayer a primera hora. Alrededor de las 13:00, el equipo de buzos de la Guardia Civil (GEAS) de A Coruña encontró los cuerpos sin vida de ambos varones.

La Guardia Civil encuentra a los dos desaparecidos

Tal y como ha informado la Guardia Civil, el equipo de buzos (GEAS) de A Coruña ha encontrado los cuerpos sin vida de los dos hombres desaparecidos el pasado martes en el embale de Belesar (Lugo). Fue alrededor de las 13:05 cuando los profesionales localizaron el primer cuerpo del bañista de 60 años desaparecido en la zona del club náutico Ponte Mourulle. El cuerpo del hombre rescatado por los buzos ha sido trasladado al embarcadero donde ha acudido, posteriormente, la autoridad Judicial. Poco después, alrededor de las 13:52 horas, los profesionales encontraban el segundo cuerpo sin vida del joven de 26 años desaparecido en el río Miño. Según informa el 112 Galicia, su cuerpo se ha recuperado cerca de la zona donde se llevaba a cabo el operativo. 

Según informó la Guardia Civil al 112 Galicia, desde primera hora de la mañana de ayer, los agentes trabajan en las búsquedas de los desaparecidos con equipos submarinistas especializados, patrullas y medios aéreos. Según la información recogida por los agentes, el joven de 26 años se hundió en el agua tras saltar al río Miño en el municipio de O Páramo durante la tarde del martes para intentar recuperar su caña de pescar. La alarma saltó en uno de sus amigos tras perder de vista al pescador en la parroquia de Riascos. Fue alrededor de las 16:30 del pasado martes cuando alertó al 112 Galicia, según fuentes de la Guardia Civil. Hasta el lugar se desplazaron inmediatamente servicios de Urxencias Sanitarias-061, los bomberos de Sarria y agentes de la Guardia Civil.

También se movilizó un helicóptero medicalizado con base en Ourense que atendió en el lugar para atender al amigo del desaparecido. Cuando los equipos de bomberos llegaron al lugar empezaron a trabajar en las labores de rastreo con prismáticos y dentro del agua. Uno de los miembros del equipo de búsqueda dio durante la jornada de ayer con la caña de pescar, antes de encontrar el cuerpo del joven. Tal y como ha señalado Europa Press, ante la “falta de medios” para llevar a cabo la complicada búsqueda en el embalse, los equipos de bomberos derivaron el trabajo a los agentes de la Guardia Civil quienes se encargaron de coordinar el operativo.

Al segundo hombre que ha aparecido de 60 años se perdió la pista tres horas más tarde durante la tarde del martes en el club náutico Ponte Mourulle alrededor de las 19:30 horas. Fueron otros individuos presentes en la zona quienes alertaron a la central del 112 de que un bañista saltó al agua y vieron cómo se hundía. Algunas de las personas que se encontraban en el lugar rastrearon la zona para intentar localizar al hombre. Por su parte, la central del 112 alertó a la Guardia Civil, a las Urxencias Sanitarias-061 y al GES de Monterroso. Hasta el lugar se trasladaron un helicóptero medicalizado, una ambulancia y dos patrullas del Instituto Armado.

Aumenta el número de fallecidos por ahogamiento en 2024

Desde que empezó el verano se han producido varias desapariciones en ríos y lagos con un final trágico. Los expertos y autoridades competentes alertan del peligro que supone saltar al agua en zonas no habilitadas para los bañistas. Llevar a cabo esta práctica puede tener un final muy trágico y los peligros son múltiples. Las corrientes de agua o la profundidad del agua son los principales riesgos que existen en ríos, lagos o embalses no destinados para disfrute de los bañistas. Además, llevar a cabo este tipo de actividades de forma individual sin la supervisión de ninguna persona es potencialmente peligroso. El alcalde la localidad de Alzira (Valencia), Alfons Domínguez, solicitó  el pasado junio en el minuto de silencio del menor de 11 años fallecido en el río Júcar mucha precaución en las zonas del río que no están adaptadas al baño. Es esta misma línea, ha pedido a los más jóvenes que tengan “sentido común” y “no se pongan en peligro”. "Si es una zona que no está adaptada al baño, mejor no te bañes", señalaba hace un mes en el acto. También la hermana del pequeño hizo un llamamiento al resto de menores pidiendo prudencia en zonas como esa, ya que son los más jóvenes quienes inciden con más frecuencia sobre este tipo de imprudencias.

Tal y como señala la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo (RFESS) en su Informe Nacional de Ahogamientos, las muertes por esta circunstancia han aumentado un 21% en 2024. Según el informe, en mes pasado se han registrado más de una decena de muertes por ahogamiento. “2024 es el tercer peor año teniendo en cuenta los datos entre enero y mayo de la serie histórica, que comienza en 2015, solo por detrás de 2016, en el que se registraron 155 fallecimientos, y 2017, en el que se dieron 141”, detalla el informe de la RFESS.