Sopa para cenar, echarse pronto a la cama, dormir ocho horas y un baño caliente. No son retos inalcanzables, la verdad, y te pueden aportar una vida más plena, serena y feliz. Son consejos que provienen de Japón, uno de los países más felices del mundo según el Informe Mundial de la Felicidad de 2023 de la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible (SDSN).
En la revista ‘Clara’ revelan que si los pones en práctica todos los días de tu vida, conseguirás dormir profundamente y despertarte con mucha energía y optimismo. Son, sin lugar a dudas, el resultado de unas creencias milenarias, que combinan ciencia, filosofía y tradición.
Irse a la cama a las 10.00, como ‘Los Lunnis’
"Nuestro cuerpo tiene un reloj interno de 24 horas, llamado ritmo circadiano, que ayuda a regular el funcionamiento físico y mental. Aunque no podemos concluir la causalidad a partir de nuestro estudio, los resultados sugieren que acostarse temprano o tarde puede ser más probable que altere el reloj biológico, con consecuencias negativas para la salud cardiovascular", explica el psicólogo David Plans en la Universidad de Exeter (Reino Unido), dejando patente que en Europa también tenemos en consideración lo de dormir entre las recomendables 7 u 8 horas al día. Pero los japoneses más todavía. Para ellos es algo casi ‘sagrado’
Sopita para cenar: de miso mejor todavía
Plato tradicional en la ‘gastronomía japo’, tanto que se consume de forma ordinario como cena pero también como desayuno. La sopa de miso es la más popular en el país oriental, puesto que su ingrediente principal está directamente relacionado con la vitalidad y la longevidad a razón de sus grandes beneficios para el cuerpo humano. Su componente principal proviene de la soja y es especial fuente de proteínas buenas, lo que ayuda a aminorar el colesterol LDL en sangre y, también, sacia, hidrata o mejora la digestión. Pero en lo que a este artículo se refiere, cuenta con un reseñable efecto calmante y reconfortante, estupendo para terminar el día.
Bañarse con agua caliente al final del día
“Exponerse al agua caliente relaja los vasos sanguíneos y aumenta la temperatura corporal, lo que provoca la liberación de melatonina, la hormona que potencia el sueño”, explica, por ejemplo, Pablo Ferrer –especialista en medicina del sueño y director del Instituto Ferrero de Neurología y Sueño. Porque esta enseñanza oriental ha sido acreditada por infinidad de estudios en cualquier parte del mundo.
¿Y al día siguiente? Solo te queda por hacer una cosa más
Por tanto, tradición japonesa y ciencia confirman lo mismo: el agua caliente antes de ir a la cama relaja los músculos, limpia la piel, baja el estrés y refuerza la circulación.
Y si a los sencillos hábitos mencionados les incluyes a primer ahora del día siguiente la práctica habitual del mindfudness o meditación, todos tus días serán brillantes y optimistas. Así habla, por ejemplo, el reconocido doctor Charles L. Raison, profesor de la Escuela de Ecología Humana de la Universidad de Wisconsin en Madison y líder en el estudio científico del Mindfulness en el Centro para Mentes Sanas en la misma universidad:
“Uno de mis compromisos personales es tratar de llevar el conocimiento tibetano al mundo moderno, porque la cultura del Tíbet se está desvaneciendo. Esta base de conocimiento sobre la psicología humana y el mundo es espectacular y quiero integrarla en nuestro mundo para que podamos beneficiarnos de ella. Por ello he trabajado estrechamente de la mano de los tibetanos por más de 20 años” explica el afamado profesional que, de esta manera, avala y admira estas prácticas milenarias en occidente y, también, para occidentales.