El juicio contra Daniel Sancho por el presunto asesinato con premeditación a Edwin Arrieta en agosto de 2023 ha comenzado en la isla de Samui, donde también se encuentra el centro penitenciario en el que el acusado lleva desde que confesara el crimen, - del que luego se declaró inocente -, mientras espera una sentencia cuando termine el juicio, que ha generado una gran expectación y que ya en el momento en el que estalló la bomba informativa inundó de titulares todos los medios de comunicación al tratarse del hijo de uno de los actores más reconocidos en España: Rodolfo Sancho. En el inicio de la cita judicial, el abogado español de la familia de la víctima ha denunciado la prerrogativa que se le habría concedido al acusado dentro de la Corte.
Las ventajas de Daniel Sancho
En agosto, cuando Daniel Sancho confesó el crimen y antes de desdecirse en posteriores versiones, el chef colaboró con la policía tailandesa en los primeros interrogatorios y la reconstrucción de los hechos y lo último que le escuchamos decir antes de entrar en prisión fue un "lo siento mucho", pero hubo varias conversaciones y citas textuales que pudieron extraerse de conversaciones que tuvo mientras ya estaba detenido. En esa primera confesión, alegó que se sentía un "rehén" de Edwin Arrieta, que le "obligó a hacer cosas que nunca haría" y justificaba de esa forma un forcejeo que pudo contarle a su padre, tal y como ha explicado el mismo Rodolfo en su primera entrevista exclusiva, dentro del episodio 0 de la serie documental 'El caso Sancho' de HBO Max.
"Al día siguiente consigo hablar con él. Algo estrambótico porque le dejaban usar el teléfono, creo que el día 7 de agosto", cuando según sus palabras le cuenta que ha tenido una "pelea con un tipo del que yo no sabía nada" en una conversación que "no fue muy larga", porque el móvil se lo iban quitando, pero "no hacía falta más". El objetivo para él era "luchar por su hijo". El actor se sorprende en estas declaraciones inéditas de unos detalles que los agentes estaban teniendo con él en una situación así, algo que no ocurriría en países como España, donde se procede a una incomunicación inmediata del detenido con la excepción de llamadas puntuales o conversaciones con sus abogados según lo estipulado estrictamente en la Ley.
Aquella conversación con su padre no fue la única, ya que llegarían más, como la que tuvo con una de las periodistas de 'El programa del verano', de 'Telecinco', Patricia López y que permitió a la audiencia escuchar su voz, aparentemente relajada, contando que estaba "cenando en el mejor hotel de la isla", que le trataban "muy bien" y aunque estaba detenido, aseguraba que le habían llegado allí porque habían cerrado el caso antes de llevarle "a una celda con 20 personas". No solo nos dejaba con la boca abierta el trato recibido, sino que tuviera su teléfono móvil con él: "he preguntado por qué están siendo tan buenos conmigo y me han dicho que porque les estoy ayudando mucho".
El "privilegio" en el inicio del juicio contra Daniel Sancho
El juicio ha comenzado y aunque las normas son muy estrictas y entre ellas está la de no filtrar información de lo que se escucha en el tribunal o la prohibición a la entrada de cámaras en la Corte provincial de Samui, los primeros testigos, los representantes de cada parte y los periodistas acreditados habrían asistido, según las palabras de uno de los abogados de la familia de Edwin Arrieta, a un nuevo episodio muy llamativo durante las primeras horas de la cita judicial con una nueva prerrogativa que habrían tenido las autoridades con Daniel Sancho, quien cumple ya nueve meses de prisión provisional.
"El tribunal, muy garantista con la defensa. Ha permitido al acusado hacer preguntas él mismo; algo que sería inaudito en España", ha denunciado en una story que ha compartido Juan Gonzalo Ospina, abogado familiar de la víctima, en su propio perfil en 'Instagram', donde también ha informado de la amonestación que habría recibido su equipo por la información que haya podido trascender del proceso judicial por su parte. De esta forma, se estarían teniendo nuevamente gestos poco frecuentes en una situación así, más cuando existen unos protocolos y unas líneas rojas tan marcadas.
Otro de los miedos que el penalista ha compartido en una entrevista al diario '20 minutos' es que "la opinión pública" pueda tener calado en el veredicto final que se tome en el tribunal. Además, a su llegada al tribunal de Samui donde se va a celebrar el juicio durante las próximas semanas también ha hablado ante la prensa y ha recalcado que el escenario jurídico en el que nos encontramos en este caso es diferente al que conocemos, ya que las leyes en Tailandia no son las mismas que en España y, vistos ciertos privilegios, está claro que las condiciones pueden llegar a ser otras.