Las monjas de Belorado lanzan un nuevo órdago al arzobispo de Burgos tras su excomunión

Tras la excomunión, deben abandonar el monasterio, pero no se respiran intenciones de ese abandono voluntario

Pablo Casal
Pablo Casal

Coordinador digital de Lecturas

José Ceacero, asesor espiritual de las monjas de Belorado
Europa Press

Con las monjas de Belorado nos estamos haciendo un máster improvisado de Derecho Canónico y también de Civil, según aplique, pero como no somos expertos, vamos a seguir contando esta historia acudiendo a los argumentos presentados por cada una de las partes de este conflicto que no ha terminado con la excomunión. 

Tras la decisión del arzobispo de Burgos, Mario Iceta, de aplicar esa "declaración de dimisión", las ex clarisas tienen que dejar de considerarse como tal y abandonar el monasterio, aunque parece que el 'falso obispo' y su asesor espiritual les habrían invitado a una especia de motín para que no dejen las dependencias monacales. 

Las monjas de Belorado se niegan a abandonar el convento

En su manifiesto católico y en las posteriores explicaciones que han dado a través de comunicados en redes sociales y en el canal de 'YouTube' 'Y la mujer huyó al desierto', las monjas cismáticas han sostenido que no han abandonado la Iglesia Católica, sino que lo que han querido hacer es romper con la actual, con el nuevo orden y, en definitiva, con esa forma "más moderna" en la que, para ellas, se ha roto con ciertos valores y se han permitido excesos. Por eso, aunque ya se les ha aplicado por decreto la excomunión y la "expulsión de la vida consagrada", ellas no consideran que se hayan separado y, por tanto, ni parece que vayan a dejar de atribuirse el título ni tampoco se respira intención de abandono voluntario del que era su hogar. 

José Ceacero, asesor espiritual de las protagonistas y Pablo de Rojas, el 'falso obispo' que lidera la 'Pía Unión de San Pablo Apóstol' parecen haber encontrado en el monasterio burgalés un refugio para continuar con las funciones de las que les despojó el Vaticano cuando les excomulgó. Además de los sermones que han venido ofreciendo a lo largo de estas semanas a las hermanas en la capilla de las instalaciones, parecen haber capitaneado un motín y haber llevado a las diez ex clarisas a 'encadenarse', entiéndase la expresión sin que sea literal, para no abandonar la que ha sido su casa en los últimos años, tal y como publica 'La Vanguardia', que añade una cita como nuevo órdago en la que ellas mismas estarían asegurando que no piensan irse de allí, "aunque les corten los suministros"

El arzobispo de Burgos convoca reunión de urgencia para echar a las monjas de Belorado

Este mismo lunes, 24 de junio y tras comunicar la decisión de la Iglesia con un decreto en el que se exponen las diferentes cláusulas, el arzobispo de Burgos, Mario Iceta, ha convocado una reunión con los servicios jurídicos para ponor en marcha un protocolo que permita expulsar también a las ya tratadas como ex monjas de Belorado del convento. En esa cita, tal y como confirmaba el nombrado comisario pontificio por la Santa Sede para resolver el conflicto, se van a exponer y analizar las consecuencias legales y se pondrán sobre la mesa los siguientes pasos para que las 10 que han sido excomulgadas abandonen las dependencias monacales, a las que ya no tienen derecho tras su "separación voluntaria" de la Iglesia Católica. 

En el plan de emergencia de las ex religiosas estaba la negociación, para la que habían establecido una comisión, con entrada en ese diálogo de los abogados de las partes, que han comunicado a la citada agencia la intención de alcanzar un acuerdo y "buscar una solición pacífica y extrajudicial al conflicto que permita el reconocimiento de sus derechos personales y patrimoniales que están siendo expoliados por el Arzobispado", tal y como recoge el diario 'El Mundo'. Se complica, no obstante, ese escenario de paz ante la actitud de los líderes espirituales en los que se apoyan, de confirmarse que pretenden anclarse y no se van por su propio pie de la que ha dejado de ser su casa tras la emisión del decreto. 

Las ex monjas de Belorado podrían salir escoltadas por la Guardia Civil

Un día después de cumplirse el plazo otorgado por el Arzobispado de Burgos para que las todavía monjas rectificaran o se reafirmaran, el asesor jurídico de la Conferencia Española de Religiosos, Miguel Campo, concedía una entrevista a 'Eldiario.es' en el que se adelantaba a las posibles consecuencias a las que se enfrentaban las religiosas si no comparecían y daban un paso atrás. "Ojalá no lleguemos a ver la imagen de estas mujeres y de estos señores saliendo del inmueble por orden judicial y escoltadas por la Guardia Civil, pero si persisten en su ruptura de la comunión, llegará ese momento", sentencia el experto, que es además docente de la Universidad Pontificia de Comillas en la disciplina de Derecho Canónico. 

Además, pone el acento también en el "daño causado", ya que todo este asunto ha ocasionado un revuelo impresionante y ha supuesto un "escándalo" para los fieles y, por extensión, para la sociedad, ya que se ha convertido en uno de los temas más comentados del último mes, desde que el 13 de mayo decidieran separarse de la Iglesia actual. El arzobispo Iceta incide en el decreto en que la decisión que tomaron fue "libre y personal" y las autoridades eclesiásticas también han tenido en cuenta a las monjas mayores del convento, que quedan fuera del cisma y a las que cuidará un grupo de clarisas que trasladará allí su residencia cuando se resuelva este entuerto.