El proceso judicial del Caso Pelicot inicia una siguiente y determinante fase. Precisamente este lunes terminan los testimonios de ‘los cincuenta’, es decir, todos los hombres ‘captados’ por el principal acusado, Dominique, para que supuestamente agredieran sexualmente a su mujer, Giséle, a la que anteriormente dejaba dormida gracias a los ansiolíticos que le administraba sin su consentimiento.
Demasiados acusados que han ido interviniendo desde el estrado del juzgado de Avión, Francia, en el que se están produciendo todas las sesiones del mediático juicio. Pero, pese a las muchas pruebas contra ellos, todos menos uno -que no es precisamente su exmarido porque ya en su primer testimonio en sala admitió los terroríficos hechos contra ella- han negado taxativamente las presuntas violaciones a Gisèle y también, obviamente, que estuvieran al tanto de que la mujer estuviera inconsciente cuando se metían con ella a la cama. Videos mostrados en sala a todos los presentes muestran justo lo contrario.
Habrá cincuenta sentencias diferentes, además de la principal contra Dominique
Pues ahora, el litigio que tantas semanas y ‘parones’ ha tenido desde que se iniciara, entra en una fase de informes previa prácticamente a la sentencia definitiva contra estos cincuenta acusados. Y es que magistrado del caso tiene la dura tarea de evaluar caso por caso para elevar como a firmes o no las penas solicitadas por fiscalía. En cualquier caso, el tope máximo estará en 20 años de cárcel por violación agravada, tal y como marcan las leyes del país galo en la actualidad.
Aún así, todavía quedan varios momentos del juicio que, seguramente, no sean de agrado para la gran víctima del caso. Y es que Dominique y Giséle Pelicó tendrán que volver de nuevo al estrado antes de que comiencen los alegatos finales. Últimos esfuerzos para la francesa que en estas diez últimas semanas del proceso ha tenido que escuchar sin abrir la boca que gran parte supuestos cincuenta violadores, muy lejos del arrepentimiento, pusieran en duda que estuviera drogada o, directamente, comentarios machistas u ofensivos contra ella.
Así ha hablado el único acusado que reconoce los delenznables hechos
Al menos, como reza el refrán ‘la excepción confirma la regla’, además de su exmarido y perpetrador de los delictivos hechos, solo un acusado ha entonado el ‘mea culpa’. Cédric (50) sí que admitió con claridad que lo que se visiona con gran nitidez en los vídeos presentados como prueba es totalmente cierto. Gisèle fue víctima de su injusta violación, grabada por su propio marido en la habitación de ambos.
“Si te pido disculpas es porque me doy cuenta de lo que te hice, Cuando escuché al principio de este juicio lo que se decía de ese hombre, era como si hablaran de mí”, dijo Cédric durante su declaración en sede judicial. “En desviaciones sexuales, pocos me ganan a mí”, incluso llegó a sentenciar sin reparos el único de ‘los cincuenta’ que admitió los deleznables hechos durante su participación.
“En desviaciones sexuales, pocos me ganan a mí”
Es más, Cédric aprovechó sus minutos para decir todo lo que pensaba sobre el oscuro asunto que ahora está en vía judicial. Además dejar claro que Gisèle era “la víctima” y Dominique “su verdugo, pues “un perverso sabe reconocer a otro perverso”, afirmó sin titubear.
Lo del resto de acusados es casi surrealista. Un buen ejemplo es del Romain (63) quien presuntamente se metió hasta seis veces en la cama de Gisèle -ella inconsciente en todas las agresiones por los somníferos suministrados por su marido-. Para salvarse de la condena llegó a asegurar que él era un “zombie” manipulado y ordenado por Dominique.
Otro acusado ha afirmado estar “poseído” por el exmarido de Gisèle
Dijo de él mismo que estaba “poseído” cuando agredió sexualmente esas seis veces a la mujer de Dominique, culpando a este de meterle “en un mundo irreal”. Acusado que, por cierto, tenía VIH y no utilizó condones en ninguna de esas violaciones perpetradas. Estas son otras espeluznantes citas salidas de las bocas de estos cincuenta individuos que, encima, revictimizan a Gisèle’: “Si de verdad fuera un violador, habría buscado a otra más joven” o “Y siempre creí que la mujer se hacía la dormida y que todo era una fantasía sexual de la pareja”. Increíble pero cierto.
Además de los videos y otras contundentes pruebas, el historial de la mayoría de estos “cincuenta” de poco les va a ayudar. Algunos tienen antecedentes delictivos por violencia machista, otros incluso cumplen condenas actualmente por otras agresiones también de tipo sexual y los más ‘limpios’ son consumidores habituales de pornografía infantil. Desde luego, perfiles de hombres en los que Dominique no tuvo que invertir mucho tiempo en ‘captarlos’ para entrar en su mundo de retorcidas perversiones con la inocente de su mujer como protagonista.