Comunicado decisivo del Vaticano sobre la última hora del estado de salud del papa Francisco: las dos decisiones de sus médicos

El pronóstico ha dejado de ser reservado, al menos en este momento de mucho mayor optimismo al observar su evolución. El papa Francisco (88 años) ha vuelto a pasar "una noche tranquila" en el Hospital Gemelli de Roma y está a punto de cumplirse un mes desde que ingresara por una bronquitis que derivaba en pocos días en una neumonía bilateral con un "cuadro clínico complejo".

Dentro de ese escenario preocupante, los médicos han sido realistas en todo momento y han centrado sus esfuerzos en dar con el tratamiento más efectivo para evitar nuevas crisis respiratorias. En los últimos días no ha habido más broncoespasmos y, además, este lunes 10 de marzo trascendía que estaban surtiendo efecto, con lo que el pontífice ha abandonado el estado "crítico".

El primer punto de inflexión se daba la semana pasada, cuando la fisioterapia respiratoria y la ventilación mecánica de alto flujo no invasiva parecían funcionar y había una evolución favorable. Esto llevaba a los facultativos a dilatar el envío de nuevas comunicaciones hasta el sábado.

Lo cierto es que el Santo Padre ha pedido en todo momento que se traslade la información de su estado real para evitar especulaciones. En el nuevo comunicado urgente del Vaticano, ya este lunes, 10 de marzo, vuelven a insistir en el buen descanso del pontífice.

El papa Francisco abandona el estado crítico: "mejoría consolidada"

"Las condiciones clínicas del Santo Padre siguen siendo estables. Las mejoras registradas en los días anteriores se han consolidado aún más, como confirman los análisis de sangre, la objetividad clínica y la buena respuesta a la terapia farmacológica. Por estas razones, los médicos han decidido hoy disolver el pronóstico (fuera de estado crítico)", se podía leer en el boletín médico de este lunes, 10 de marzo.

Se trataba de un comunicado muy esperado, ya que el fin de semana se había dado una "leve mejoría" y había preocupación al mantenerse el reservado en cuando al estado de salud del Santo Padre. La disolución de ese pronóstico no es la única decisión que han tomado los médicos del Gemelli de Roma, ya que también han abogado por mantenerle ingresado unos días más.

Al percibir las buenas consecuencias de la fisioterapia respiratoria y la ventilación de alto flujo, los facultativos consideran importante que Bergoglio mantenga el tratamiento farmacológico en el Policlínico, bajo supervisión médica, "dada la complejidad del cuadro clínico" que ha presentado.

El papa Francisco: casi un mes en el Gemelli de Roma

Era viernes, 14 de febrero y la salud del papa Francisco empezaba a preocupar a los fieles que seguían sus intervenciones en eucaristía y en las audiencias de los miércoles. En las últimas en las que participó tuvo que ser asistido y alarmaba también lo inflamado que se observaba al pontífice en estos meses.

Ese día su entorno tomó la decisión de trasladar el tratamiento fuera del Vaticano y tuvo que ingresar en el Hospital Gemelli de Roma. Dicen los que le conocen que le cuesta parar y esta bronquitis le ha obligado a pulsar el botón de ‘stop’ en todos sus compromisos.

Los seguidores del papa Francisco a las puertas del hospital donde está ingresado

Ahora, casi un mes después de que empezara a ser tratado en el Policlínico romano, Jorge Mario Bergoglio ha podido abandonar el pronóstico reservado y ya no presenta un "peligro inminente" tras una "mejora gradual y ligera" que parece haberse consolidado. Hay todavía preocupación por su delicado estado de salud.

Pocas visitas y dieta prescrita por los médicos

El papa Francisco alterna el descanso y la oración en su habitación del Gemelli de Roma. No recibe apenas visitas, pero este fin de semana sí ha podido ver al cardenal secretario de Estado, Pietro Parolin y al sustituto de la Secretaría de Estado, Edgar Peña Parra. En cuanto a los actos con motivo de la Cuaresma, ha podido seguirlos por videollamada.

Hay una dieta prescrita por los médicos, quienes han sido siempre prudentes y han tomado cada mejora "con prudencia" antes de informar, a pesar de cumplir con las directrices del propio pontífice. Habría sido él quien desde un principio pidió que se informara de su estado de salud real en todo momento, lejos de lo que pueda parecer habitual en las paredes insonorizadas del Vaticano.

Descanso en el Hospital Gemelli de Roma

"El Papa ha transcurrido una noche tranquila, está descansando", han trasladado cada día desde el Vaticano con comunicados urgente que han sido breves durante la mañana, a la espera de que durante la tarde puedan actualizar la información más detallada sobre la evolución de Francisco.

La Santa Sede trasladaba nuevamente el lunes que se mantenía la terapia respiratoria y motora, la fisioterapia y se mantendría sin fiebre y sin sufrir nuevos broncoespasmos. A pesar de esta "leve mejoría" a la que hacían referencia ya el fin de semana, los facultativos que están atendiendo y tratando al pontífice mantenían prudencia, dado el "complejo" cuadro clínico del vicario de Cristo. Ahora, con la consolidación de esa evolución positiva, continúan haciendo balance con absoluta cautela.

Preocupación con los preparativos de la Semana Santa

La Semana Santa llega tarde en 2025, así que todavía hay tiempo para que el papa Francisco pueda recuperarse a tiempo. No obstante, si necesitara continuar ingresado en el Hospital Gemelli de Roma durante más semanas, tendría que delegar muchos de sus compromisos para las fechas más destacadas del calendario litúrgico.

La carta que escribió de su puño y letra en 2013, meses después de ser elegido en el cónclave, puede marcar un antes y un después, pero el camarlengo guarda silencio y es el único que puede iniciar ese proceso de sede vacante y posible sucesión junto al Santo Padre.

Por el momento, frente a la idea de renuncia hay perfiles que se están encargando de sus funciones y ninguna voz autorizada ha apuntado en alguna otra dirección. Este jueves, 13 de marzo, se cumplen 12 años desde que Jorge Mario Bergoglio fuera señalado en positivo por los cardenales en la Capilla Sixtina y adoptara, desde entonces, el nombre de Francisco para un papado marcado por su cercanía.

Un día más tarde, el día 14, ya habrá transcurrido un mes desde que el pontífice fuera hospitalizado en el Policlínico de la capital italiana por la bronquitis que sufría desde hacía semanas.