La ciencia dicta sentencia: la clave para tener un buen sistema inmunitario

Según estudios de la Universidad de Harvard, es preferible llevar a cabo cualquier actividad física a no realizar ningún deporte para fortalecer el sistema inmunitario

Alicia Alarcón
Alicia Alarcón

Redactora digital de Lecturas

Sistema Inmunológico
PEXELS

La ciencia recalca constantemente la importancia de llevar una vida activa. El deporte, además de la alimentación, es clave para tener una vida saludable y un sistema inmunológico fuerte. Aun así, los expertos alertan sobre el peligro de obsesionarse con un sistema 'sobrefortalecido'. De hecho, pocos conocen que la clave reside realmente en el equilibrio para que los sistemas estén bajo control. El exceso de deporte no es sinónimo de tener la mejor salud mundo.

¿Verdad o mito?: El ejercicio físico refuerza el sistema inmunológico

Son muchos quienes piensan que el sistema inmunológico humano se puede entrenar. De hecho, existen numerosos productos que prometen fortalecer el sistema. Algunos de ellos son el café reposado o la proteína en polvo, aunque lo cierto es que el mejor entrenamiento es el deporte. Tal y como han demostrado varios estudios científicos dela Universidad de Harvard, la actividad física mejora la salud y el bienestar personal. De hecho, gracias a él es posible incluso prevenir enfermedades. En líneas generales, quienes llevan un estilo de vida más activo se benefician de un sistema inmunológico más fuerte. La ciencia asegura que dicha actividad física es capaz de fortalecer al sistema inmunológico frente a las infecciones. Además, el ejercicio físico y una vida más active nos puede ayudar a sentirnos mejor en momentos difíciles, ya que brinda más energía al cuerpo y seguridad personal.

El sistema inmunitario es muy sabio. De hecho, cuando el cuerpo contrae una enfermedad es capaz de reconocerla y destruirla. Para la sorpresa de muchos, una persona enferma que padece fiebre, mucosidad o tos está sintiendo los efectos de la lucha interna que lleva a cabo el sistema inmunitario, no de la enfermedad en sí. Realmente, tales efectos son la prueba que demuestra que nuestro sistema se está defendiendo y, por ello, podemos sentirnos apagados o sin mucho ánimo. Tal y como señalan varios estudios científicos de la Universidad de Harvard, caminar es uno de los mejores ejercicios para cuidar tanto la salud mental como física. De hecho, el secreto de este deporte reside en su bajo impacto. Por ello, ayuda a reducir el estrés y la ansiedad además de la quema de calorías que produce. Tal y como revela Harvard, salir a caminar después de comer puede ayudar también a reducir los niveles de azúcar en sangre. Sin duda alguna, llevar a cabo una caminata al día puede suponer un cambio en las vidas de muchas personas.

Otra de las actividades tradicionales que la mayoría puede llevar a cabo sin demasiado esfuerzo es montar en bicicleta. Pedalear fortalecerá las articulaciones mientras el cuerpo también hace lo que se conoce como ‘cardio’. Una de las opciones más completas y beneficiosas para el cuerpo humano son los ejercicios o deportes acrobáticos, aunque cualquiera de ellos puede ser ideal dependiendo de las circunstancias de cada persona. En general, es mejor realizar cualquier actividad física que no llevar a cabo ninguna. Para ello, los expertos recomiendan que cada persona elija el deporte al que más se adapten sus condiciones personales para poder cumplir con una rutina estable.

Equilibrio en el deporte para un buen sistema inmunológico

Aun así, no hay que abusar del ejercicio físico. El científico Philipp Dettmer recomienda no excederse a la hora de hacer deporte solo para fortalecer el sistema inmunológico. De hecho, tal y como informa ‘BBC News Mundo’, el concepto erróneo más extendido es la preocupación de la sociedad por alcanzar un sistema inmunitario extremadamente fuerte. Para el desconocimiento de muchos, el cuerpo humano necesita un sistema inmunológico equilibrado donde los sistemas estén bajo control y no sean demasiado fuerte. Si mantenemos un sistema inmunológico equilibrado, él sabrá defenderse adecuadamente ante cualquier amenaza. Por ello, no es necesario ‘sobrereforzarlo’.