Después de 24 días hospitalizado en Cancún, Adrián Fernández ha regresado a España para estar junto a su familia y sus amigos. El alcireño tuvo que ser ingresado en la UCI tras sufrir una parada cardiorrespiratoria por ahogamiento en la piscina del hotel en la que se encontraba durante su luna de miel. Las hipótesis señalan que un posible corte de digestión provocó el ahogamiento.
La situación de Adrián
La pesadilla que vivía desde hace semanas Adrián Fernández y su familia ha terminado. El valenciano de 39 años ha permanecido ingresado casi dos semanas en un hospital de Cancún en coma inducido, tras sufrir un ahogamiento en la piscina del hotel en el que se hospedaba con su mujer y su hijo. La familia viajó allí para celebrar su luna de miel, pero ninguno de ellos sabía lo que les deparaba este destino. Era un día normal cuando bajaron a la piscina a darse un baño. En un momento determinado, Adrián avisó de que iba la baño porque no se encontraba bien, aunque nadie se dio cuenta de que no llegó a salir del agua. Al parecer, Adrián sufrió un corte de digestión en la piscina que le provocó el ahogamiento y, tras ingerir demasiada agua, entró en parada cardiorrespiratoria. Afortunadamente, los socorristas consiguieron reanimarlo y fue trasladado al hospital en estado crítico. Allí, ha permanecido casi dos semanas hospitalizado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
El costoso tratamiento hospitalario
La gran preocupación de la familia por su grave estado de salud se sumó a otro problema, el pago de las facturas durante su estancia en el hospital desde el pasado 5 de mayo. En México, la sanidad no es gratuita y el coste de los tratamientos puede llegar a ser muy alto. Por ello, la familia contaba con un seguro de viaje que solo se pudo hacer cargo de un máximo de 20.000 euros. A partir del tercer día de hospitalización, la familia tuvo que hacer frente a los 8.000 euros por jornada que requerían las facturas expedidas por el centro hospitalario. La embajada española estaba al tanto de la noticia, aunque no puedo hacer nada al respecto. Su mujer explicó que Adrián no podía ser repatriado por su grave estado de salud y la embajada tampoco podía hacerse cargo de los gastos. De hecho, la crítica situación obligó a la familia a solicitar la ayuda económica de la ciudadanía que quisiese colaborar para afrontar los 10.000 euros que debían. La noticia fue difundida a vida voz y no tardó en aparecer en todos los medios.
Muchos de los vecinos de Alzira han colaborado con donativos económicos para disminuir la gravedad de la situación. Han sido diversas actividades benéficas impulsadas por asociaciones deportivas, festivas y sociales de Alzira las que han ayudado a la familia con este problema. Afortunadamente, el estado de salud de Adrián ha mejorado poco a poco poniendo fin a la pesadilla. De hecho, el pasado viernes, el hombre recibió el alta hospitalaria. La familia ha comunicado en redes que cesen las ayudas económicas, ya que han saldado la deuda con el hospital de Cancún. Tal y como estaba previsto, Adrián ha vuelto a España a principios de semana.
Tas un largo viaje, el alcireño aterrizó ayer en el país y ya está con su hijo pequeño, con su mujer, Sofía y con sus amigos para terminar de recuperarse. La representante de la familia, Marta Parada, ha calificado la situación vivida en las últimas semanas como “muy estresante”. “Por suerte, nos hemos visto arropados en todo momento por el pueblo de Alzira, al que estamos eternamente agradecidos”, ha señalado. Sofía, la mujer de Adrián, ha mostrado su agradecimiento en redes sociales. “Mil millones de gracias a todos por el apoyo que nos habéis dado. No sé cómo voy a poder agradeceros todo lo que habéis hechos por nosotros”, señala en su comunicado.