112.000 euros. Nada que ver con los 700.000 euros de indemnización, además de la condena a cadena perpetua, que la defensa de los Arrieta le solicitó al juez tailandés por el asesinato y descuartizamiento de Edwin Arrieta Arriaga.
"La familia no está aquí por el dinero" o "Nadie ni nada les devolverá al hijo que han perdido" fueron algunas de las declaraciones del ya famoso abogado español Juan Gonzalo Ospina, pero claro, en caliente solo minutos después de conocer el fallo del tribunal de Koh Samui. Aunque también respondía entonces, el 29 de agosto, lo siguiente: conforme a un posible recurso, esperarán "a analizar la sentencia" aunque “no nos genera preocupación".
Una familia entera, más allá de padre y hermana, que vivía gracias a Edwin
Palabras muy bien elegidas porque hoy cobran más sentido que nunca. La periodista especializada en sucesos y colaboradora de Lecturas ha podido hablar en primicia con la compañera de Ospina en la dura y mediática batalla judicial contra el hijo de Rodolfo Sancho, la letrada Beatriz Uriarte, quien le ha confirmado la reciente presentación de un recurso de apelación para aumentar la indemnización dictaminada.
Uriarte le explica a la reconocida periodista que la cantidad económica solicitada se ha determinado teniendo en cuenta “el criterio y los cálculos del equipo judicial de Tailandia, que han considerado reclamar un incremento de esa indemnización, atendiendo al dinero que la familia ha dejado de percibir y ya no percibirá durante su vida por el fallecimiento del cirujano plástico”, pues hay que recordar que el bufete de Ospina al que pertenece la abogada es el equipo legal de ‘refuerzo’ desde nuestro país.
"No han entregado ni un céntimo a la familia de la víctima"
Declaraciones a Mayka Navarro para su blog en Lecturas que, de alguna forma, no sorprenden tanto si se tiene en cuenta una premisa tan objetiva como esta: los Arrieta solicitaron una indemnización de 700.000 euros, y les llegó una ‘limosna’. Poco más de 100.000, es decir, tan solo una pobre décima parte del ‘precio’ que se le puso al asesinato del colombiano. Sin embargo, hay otras dos razones mucho más poderosas por la que su familia -a la cabeza su hermana Darling Arrieta- ha decidido dar este paso al frente y continuar con su lucha legal contra Daniel Sancho.
Posiblemente, esta sea la gran razón por la que Darling ha decidido ir hacia delante: “Los Sancho se siguen gastando miles de euros en la defensa de Daniel, pero no han entregado ni un céntimo a la familia de la víctima”, ha dicho también públicamente Juan Gonzalo Ospina, mientras que la reducida indemnización de 112.000 euros todavía no ha sido abonada.
¿Los Arrieta se sienten humillados por Daniel Sancho y su padre, Rodolfo?
No hace falta reseñar que, evidentemente, no hay dinero que resarza la muerte de un ser querido y menos en trágicas circunstancias, por lo que el segundo motivo para este drástico ‘giro de guión’ es porque “no ha habido perdón, ni indemnización, ni acercamiento”, según explica Beatriz.
Un perdón que el nieto de Sancho Gracia, aunque lo pidiese ahora, én nada cambiaría el transcurso del recurso ya en proceso desde el 29 de noviembre, que exige mucho más. Según la apoderada de los Arrieta en el país oriental, Nattha Jongratwanin Lak, además de la compensación económica "se le solicita al Tribunal de Apelaciones que revise el fallo de primera instancia y declare al acusado culpable bajo el artículo 289 del Código Penal, que establece como única pena aplicable la pena de muerte”.
Una dura petición que Ospina se ha encargado de suavizar con las pretensiones reales que los Arrieta buscan con esta apelación: “La familia no quiere pena de muerte. Está satisfecha con la condena”, ha dicho, pero es una estrategia que si sale bien permitirá que se consolide con firmeza la pena máxima para Daniel.
Las razones por las que "se recrudece la guerra judicial" según Mayka Navarro
Hasta el 17 de enero tienen ahora los abogados del asesino del médico colombiano de 44 años para responder al recurso de la víctima, aunque se prevé la contestación con solamente observar sus movimientos también en estos momentos: según hemos confirmado en Lecturas, Marcos García-Montes o Carmen Balfagón, sus abogados, están a punto de presentar otro recurso en el que solicitan absolutamente todo lo contrario.
Estos siguen apelando a la inocencia de Daniel, con la pretensión de que el juez reduzca la pena y, con ello, tener más cerca la posibilidad de que el condenado pueda seguir cumpliendo sentencia en una cárcel española. Dicen que, con las polémicas pruebas que no fueron aceptadas durante el proceso judicial, pueden probar contundentemente que se trató de un desafortunado suceso accidental tras una pelea en defensa propia porque Edwin buscaba agredir sexualmente a Daniel.