Marta López Álamo (27 años) es fiel defensora de que el balance es la clave de una buena rutina. Su cuerpo atlético y tonificado es el reflejo de su vida saludable y activa. Pero aunque muchas puedan pensar que la influencer lleva un plan riguroso en cuanto a lo que alimentación se refiere, la realidad es otra. No tiene una dieta definida, pero sí que sigue pequeñas pautas para no salirse de su camino. Una vida activa es la clave fundamental de la mujer de Kiko Matamoros, ya que incluso cuando no está haciendo deporte intenta implementar la actividad física en sus tareas.
La rutina deportiva y de alimentación de Marta López Álamo
En cuanto a su actividad física, gira en torno a dos vertientes clave. Marta López Álamo tiene claro sus objetivos y son los mismos que debería tener en cuenta cualquiera cuya meta sea mantener a raya la grasa y adquirir un cuerpo sano y definido.
Por un lado, están los ejercicios de fuerza y alta intensidad. En sus redes, la hemos visto en varias ocasiones practicando uno de los deportes de moda e ideal para quien desee combinar la fuerza y el cardio: el fitboxing. También el cardio es fundamental para mantener un peso ideal y una salud adecuada, así dedica una buena parte de su rutina a correr en cinta. Otro de sus grandes secretos está en prescindir de los taxis y el transporte siempre que pueda, para así ir andando a los compromisos y de esta manera incluir la actividad física en labores cotidianas.
Por otro lado, en cuanto a lo alimenticio, no tiene una dieta estricta. No obstante, sí suprime muchos alimentos. En cuanto a sus prohibiciones (las cuales se permite saltarse muy de vez en cuando) se incluyen el alcohol y el azúcar. En cuanto a sus comidas habituales, prioriza alimentos saludables como frutas, verduras, huevos o harinas de origen vegetal. Combinado con el consumo adecuado de agua necesario para el día a día. Uno de sus grandes secretos, se encuentra en uno de sus complementos alimenticios compuesto por una verdura con grandes beneficios.
La alcachofa, una verdura que controla tu peso
Todas las frutas y verduras poseen grandes cualidades que pueden ayudar a tu cuerpo. Pero hay algunas que son las grandes olvidadas y que nos proporcionan más posibilidades de las que nos pensamos. Una de ellas es la alcachofa, que nos ayuda a equilibrar las grasas buenas y la fibra necesaria para el día a día.
Beneficios de la alcachofa
- Ayuda a reducir la glucosa en sangre y protege de estreñimientos y diarreas.
- Alivia dolores y molestias de estomago y reduce la acidez.
- Previene de enfermedades de origen cardiovascular.
- Alto contenido en fibra.
- Ayuda a la absorción de agua necesaria.
- Bajo aporte calórico.
- Reduce grasas.
- Previene enfermedades hepáticas, problemas circulatorios y gota.
Recetas fáciles y saludables con alcachofa
Sabemos que las alcachofas no son un alimento que de primeras resulte apetecible. Pero deberías darles una oportunidad, ya que su sabor te sorprenderá. Puedes optar por cocinarlas solas o como acompañante de algún plato. ¡Te mostramos como cocinarlas!
Alcachofas al horno con aceite de oliva
Primeramente, te enseñaremos como hacerlas al natural para obtener todos sus beneficios, el cocinado al horno de las alcachofas está entorno a una hora para que queden bien tiernas.
- Primeramente cortaremos el tallo y las limpiaremos bien quitando las partes más duras, las aplastamos ligeramente para que las hojas se abran.
- Precalentamos el horno a 180 grados durante 5 minutos en la opción de ventilador para que se caliente de forma homogénea.
- En un recipiente para horno colocamos nuestras alcachofas acompañadas de un poco de aceite y sal. Cocinamos aproximadamente durante una hora, pinchamos para ver si están blandas en caso de duda.
- Emplatamos y... ¡A disfrutar!
Alcachofas aderezadas con vino y limón
Para los amantes de un buen aderezo y un gran sabor, este plato es top, si no te atreves a cocinarlas al natural y les quieres dar un toque más delicioso esta es sin duda tu receta, te lo contamos.
- Exprimimos un limón como base de nuestro aderezo.
- Nos quedamos solamente con el corazón de la alcachofa, el cual partiremos a la mitad y embadurnaremos en limón.
- En una sartén con un poco de aceite de oliva doraremos unos ajos, una vez listo añadiremos las alcachofas y lo sobrante del zumo del limón junto a un chorro de vino blanco.
- Añadimos un poco de caldo de verduras o de pollo a nuestra elección sin llegar a taparlas, cubrimos nuestra sartén y dejamos que hierva. Pinchamos con un tenedor a partir de los 10 minutos hasta que estén tiernas.
- Una vez tiernas retiramos emplatamos y servimos. ¡Qué aproveche!