Desde hace algún tiempo Sara Carbonero (40 años) hace un uso muy constante de sus redes sociales. En ellas comparte todo tipo de contenido, independientemente de si se trata del ámbito más privado o del plano más profesional. Hace unas horas ha preocupado a sus seguidores al compartir una imagen desde el hospital, aunque no ha querido aclarar el motivo que le ha llevado a pasar por el centro hospitalario.
En muchas ocasiones la periodista aprovecha para compartir contenido de cualquier evento publicitario o relacionado con sus proyectos profesionales. En otras de ellas prefiere contar el día a día junto a sus dos hijos, fruto de su matrimonio con el futbolista Iker Casillas. Lo que está claro es que las redes sociales han conseguido acercar más a la manchega a todos sus seguidores, ya que acumula más de tres millones que no se pierden su contenido.
Sara Carbonero comparte una imagen desde el hospital
Carbonero no se ha cortado durante todos estos años atrás en hablar abiertamente de sus días en el hospital. Además de compartir profundas reflexiones sobre la enfermedad, también exponía sus sensaciones tras haber pasado por el centro médico debido al cáncer de ovario que padeció. Es por ello que se ha mostrado siempre tal y como es ante esta situación, con todos sus miedos y todas sus fortalezas para poder ayudar a otras personas en la misma situación.
Sin embargo, lo que nadie se esperaba es que volviese al hospital, tal y como ha compartido en sus historias temporales de Instagram. “Las mañanas de hospi dan para mucho”, escribía la periodista. Con este importante mensaje preocupaba a muchos seguidores que desconocían el motivo por el que había acudido a dicho lugar. De hecho, no ha dado mayor información al respecto, aunque suponemos que no es nada grave debido a que horas después ha compartido más imágenes junto a unas amigas.
En la fotografía donde escribía dicho mensaje no se veía mucho para poder conocer si había ido a cualquier revisión por su parte o si se trataba de una visita de algún familiar o amigo que estuviera ingresado. Lo único que se aprecia en la instantánea es el típico palo en el que se sujetan los diferentes medicamentos para ser administrados por vía intravenosa, así como un estor bajado para que no entre la luz solar de manera directa.
La reflexión de Sara Carbonero sobre la fuerza
Hace un par de días la periodista realizaba una publicación en la que lanzaba una profunda reflexión. Quizá tenga alguna relación con esta misteriosa visita fugaz al hospital o tal vez sea una simple casualidad. En cualquier caso, el texto que eligió la periodista para compartir esta reflexión habla de la fuerza, el dolor y la esperanza sobre un texto de la escritora mexicana Paula Krug que llevaba tiempo queriendo compartir con sus seguidores.
“Decía mi abuela que cuando una mujer se sintiera triste lo mejor que podía hacer era trenzarse el cabello; de esta manera el dolor quedaría atrapado entre los cabellos y no podría llegar hasta el resto del cuerpo; había que tener cuidado de que la tristeza no se metiera en los ojos pues los haría llover, tampoco era bueno dejarla entrar en nuestros labios pues los obligaría a decir cosas que no eran ciertas, que no se meta entre tus manos -me decía- porque puedes tostar de más el café o dejar cruda la masa; y es que a la tristeza le gusta el sabor amargo”, comenzaba escribiendo.
“Cuando te sientas triste niña, trénzate el cabello; atrapa el dolor en la madeja y déjalo escapar cuando el viento del norte pegue con fuerza. Nuestro cabello es una red capaz de atraparlo todo, es fuerte como las raíces del ahuehuete y suave como la espuma del atole”, proseguía. “Que no te agarre desprevenida la melancolía mi niña, aún si tienes el corazón roto o los huesos fríos por alguna ausencia. No la dejes meterse en ti con tu cabello suelto, porque fluirá en cascada por los canales que la luna ha trazado entre tu cuerpo. Trenza tu tristeza, decía, siempre trenza tu tristeza...”, continuaba su reflexión.
“Y mañana que despiertes con el canto del gorrión la encontrarás pálida y desvanecida entre el telar de tu cabello”, concluía su escrito. Además, lo acompañaba varias imágenes en las que evidentemente ella aparecía con una trenza en su cabello de unas fotografías sobre una campaña de publicidad que ella misma protagoniza.