Este lunes 14 de ocubre los fans de La oreja de Van Gogh se han despertado con la peor de las noticias: Leyre Martínez (45 años), la vocalista desde hace 17 años, ha anunciado que deja el grupo. Tras casi dos décadas juntos después de la marcha de Amaia Montero y de muchas giras y conciertos pero que tocan a su fin, la cantante también dice de la formación que interpreta 'Rosas' o 'Cuéntame al óido'. Una triste e inesperada noticia que ha dejado a todos desolados.
"Después de 17 años maravillosos repletos de música y emociones que jamás olvidaremos, queremos anunciar que las trayectorias profesionales de Leire y La Oreja de Van Gogh seguirán caminos separados. La decisión ha sido dura y difícil pero llega después de mucho tiempo sin reflexión y profundas conversaciones en las que no hemos conseguido acercar nuestras diferentes maneras de vivir el grupo. Termina una etapa fascinante que todos llevaremos en el corazón y que nos ha permitido disfrutar de la mejor profesión del mundo de una manera soñada", explican en el comunicado.
Y aunque muchos se hayan llevado las manos a la cabeza porque no se esperaban esta noticia, lo cierto es que algunas pistas ya apuntaban a una profunda crisis del grupo. Fue durante una entrevista con 'Navarra Televisión' cuando Leyre se pronunció por primera vez sobre las salidas de tono y críticas que había recibido desde el principio por estar en la banda.
Las pistas que anunciaban la separación de LODVG
"No me gustan las faltas de respeto, y a mí que se diga que Amaia vuelve al grupo no me afecta para nada. Lo que no me gusta es que se me ningunee a mí cuando se dice eso. Si Amaia vuelve será algo que el grupo tendrá que decidir, aunque yo ahora no me lo planteo. Lo que no me gusta es ver comentarios del tipo ‘¡ojalá vuelva!’, porque pienso ‘¿y yo qué?’. Parece que la gente olvida que ya hay una cantante en el grupo, y eso es feo. Llevo 16 años aquí y parece que no importa nada. No me hace gracia", contó la artista.
"Entiendo cuál es el juego y entiendo que sí que ha habido cierto interés en poner el foco en nosotras. Y en generar cuando esta historia no da para mucho más. Ella estuvo y lo hizo súper bien, es una tía carismática y maravillosa que dejó el grupo y entré yo", añadió en la entrevista. Unas palabras que hablaban del descontento que a veces sentía.
La reaparición de Amaia Montero tras meses recuperándose de su salud mental fue sin duda también un gran punto de inflexión en el grupo. Y es que la canción con la que volvió a los escenarios la cantante de la mano de Karol G el pasado verano no era de su etapa en solitario sino de cuando pertenecía a La Oreja de Van Gogh. Un gesto que seguramente no sentaría muy bien a la artista que llevaba 17 años al frente del grupo, casi el doble que la primera.
Dice mucho también que la canción con la que reapareció Amaia en el Santiago Bernabeu es la misma con la que Leyre decidió cerrar su etapa frente al grupo. 'Rosas', uno de los temas más importantes del grupo fue lo que eligió para decir adiós a estas casi dos décadas. De hecho, fue muy significativo cuando Martínez tuvo que limpiarse las lágrimas de su rostro en algunas estrofas como la que decía "y aún me parece mentira que se escape mi vida" en la que parece ser la última vez que fuera a interpretar esta canción por el momento.
Pero no ha sido lo único. Y es que el pasado julio, cuando LODVG tenía toda su gira por delante, la periodista Isabel Rábago aseguró en Telemadrid que el grupo se juntaría en verano para dar una gira rememorando algunas de sus canciones más conocidas. Algo que nunca sucedió y que desmintió Pablo Venegas, el guitarrista del grupo: "La relación es buena, pero no tendría sentido. Tiene un punto demasiado comercial y nosotros no estamos ahí. Queremos seguir escribiendo canciones. Cada vez nos cuesta más, buscando las mejores palabras y melodías. Es nuestro principal motor", dijo en 'El periódico de España'.
Y aunque finalmente el grupo no se reunió en el periodo estival y este componente de La Oreja de Van Gogh dijo que no tendría sentido, es muy posible que la fuente de Isabel se enterara de algo parecido que tuviera que ver con el reencuentro más adelante y que en ese momento todavía no se iba a producir.