Si algo ha caracterizado siempre a Omar Montes (35 años) es su humildad y el desparpajo que siempre ha demostrado ante las cámaras. El cantante se convirtió en el flamante ganador de 'Supervivientes 2019', edición en la que coincidió con Isabel Pantoja, su exsuegra, y con quien mantuvo una estrecha relación de amistad. Desde entonces, se ha enfocado única y exclusivamente en su carrera musical y ha batido todos los récords habidos y por haber con los hits que ha lanzado al mercado. Trap, reguetón y flamenco son sus señas de identidad y los ingredientes perfectos para haber conseguido cambiar radicalmente su vida y la de los suyos.
A día de hoy, Omar Montes es sinónimo de éxito y gracias a todos sus triunfos profesionales, tanto él como su familia han conseguido llevar una vida digna pero sin perder el carácter tan humilde del que siempre han presumido. El exsuperviviente es uno de los artistas más reconocidos del país y su éxito no solo le ha llevado a traspasar fronteras, también se ha hecho con una exclusiva vivienda valorada en un millón de euros en el norte de Madrid. Eso sí, aún se resiste a dejar Pan Bendito, el barrio que le ha visto crecer y al que le debe todo.
La lujosa vivienda de Omar Montes en el norte de Madrid
Omar Montes es natural de Pan Bendito, un barrio perteneciente al distrito madrileño de Carabanchel. Aquí, el cantante ha experimentado las luces y sombras de su vida pero afortunadamente la música ha sido una de sus mayores vías de escape y gracias a la cual ha podido cumplir uno de sus sueños: comprarse una lujosa casa. Tal y como hemos podido saber, se trata de un chalet ubicado a la fueras de la capital, en una de las urbanizaciones más prestigiosas de Boadilla del Monte. Esta vivienda cuenta con una parcela de más 2.000 metros cuadrados, dos plantas, una bodega y hasta un gimnasio propio.
Por si fuera poco, el amplio jardín con piscina, con tumbonas para relajarse y desconectar y una zona con barbacoa, es uno de los mayores atractivos de esta imponente vivienda en la que Omar Montes organiza planazos con su círculo más íntimo de amistades e, incluso, esta zona le sirve como inspiración para sus canciones.
Aunque son pocos los detalles que se conocen de este hogar, Violeta Mangriñán, íntima amiga de Omar Montes, ha sido la encargada de sacar a la luz algunos de los rincones de esta vivienda en los que se respira lujo. Como la entrada, en la que podemos observar una escalinata con toque marmolado que sirve como entrada a la vivienda. Incluso, cabe destacar que el cantante ha priorizado la tranquilidad y las zonas verdes del extrarradio por encima del ritmo frenético que supone vivir en el centro de Madrid.
La razón por la que no se ha mudado definitivamente a su chalet de un millón de euros
A pesar del alto nivel de vida que puede mantener, Omar Montes sigue muy ligado a Pan Bendito, a su barrio de toda la vida. Aunque cuenta con su propio chalet con todo tipo de comodidades y completamente equipado, el intérprete de 'La sevillana' ha revelado públicamente el motivo por el que no se ha mudado definitivamente a su mansión. Una decisión que ha pillado por sorpresa a todos sus seguidores y con la que ha dejado claro cuáles son de verdad sus prioridades.
"Yo sigo viviendo en mi casa, con el mismo transistor de mi abuela y la bañera que se cae a cachos. Tengo otra casa nueva que me he comprado súper guapa pero cuando estoy ahí dos días pienso que no estoy hecho para estar ahí y me vuelvo", confesaba el cantante durante una entrevista con María Casado en 'Las tres puertas'.
En esta intervención, Omar aseguró que jamás podrá alejarse de Pan Bendito y que quiere seguir manteniéndose fiel a sus costumbres: "Me gusta más estar en mi barrio, yo soy muy de mis cosas, estoy acostumbrado. Yo sigo desayunando el mismo café en el mismo sitio y me gusta estar con mi gente", zanjaba.
La entrevista más sincera de Omar Montes
Omar Montes siempre ha tenido devoción por su familia. Sus abuelos, su madre y su hijo son el motor de su vida y recientemente ha concedido una de sus entrevistas más sinceras a 'El País', medio en el que ha asegurado que se siente profundamente orgulloso de poder mantener a los suyos. Incluso, ha empezado a valorar las pequeñas cosas del día a día: "Dormir abrazando a mi perrita, invitar a mi abuelo a un vermú, ir a hacer la compra con mi abuela. Antes mi madre y mi abuela iban a Cáritas a por comida, así que ir al cine era inalcanzable. O de compras. El que no ha pasado por eso, no lo valora", ha comentado más sincero que nunca.