Quedan 5 meses para que Kiko Rivera pase a ser un hombre casado. El más Casanova de todos los DJ patrios, pasará por el altar con la madre de su hija Ana, Irene Rosales. De hecho, la pareja ya ha anunciado el día que se darán en ‘sí, quiero’.
Será el viernes 7 de octubre, por lo civil y en una finca de la provincia de Sevilla. La pareja se casará tan solo un mes antes de que Cayetano Rivera y Eva González cumplan su primer aniversario de casados. Parece que los hermanos Rivera sienten debilidad por las bodas otoñales (salvo Fran, que prefiere la calidez del verano).
En esta esperada boda, que lleva fraguándose desde marzo, cuando él pidió matrimonio (ya oficial) a su chica en el bautizo de su hija, tendrá un protagonismo especial la madre del novio. Isabel Pantoja hará realidad su sueño de vestirse de madrina y ver cómo su hijo mayor sienta la cabeza. Algo que, estamos convencidos, seguro que lo dudó en algún momento, dado el pasado ‘picaflor’ del pinchadiscos. Isabel será la madrina, y Francisquito, el pequeño que Kiko tuvo con Jessica, será el encargado de portar los anillos. Un papel muy importante, que estará encantado de cumplir en el enlace de su padre.
Kiko lleva unos días en boga, y no por su próximo enlace. El lunes el futuro esposo de Irene se agarró un cabreo de padre y muy señor mío cuando descubrió que Jota Peletiro, el marido de su ex, colgaba una foto de su hijo, de espaldas con el siguiente mensaje: “después de esta mini gira, ya con muchas ganas de llegar a casa para estar con mis tres amores”. No sabemos si lo que le sentó mal fue que el futbolista del Eibar subiera una foto del niño, insistimos que no se le ve la cara, o que lo incluya en uno de “sus amores”. Rivera le escribió esto: “Ese es mi hijo Francisco Rivera. Sube fotos del tuyo. Si hay una próxima vez ya no te lo pediré de buenas maneras. Gracias”. Buf, qué mal rollito, a ver si van a ser los nervios de la boda que lo tienen atacadito…