En la semana en la que parece que no hay otro tema, y que hasta los informativos han abierto con los gestos de la reina Letizia, dirigidos a doña Sofía, Jorge Javier Vázquez ha querido dar su opinión de un modo muy sutil, e hilándolo con el paso de Sofía Suescun por ‘Supervivientes’. Solo él podría enlazar de una manera tan magistral dos temas que, en apariencia, tan poco tienen que ver.
Tras ver la conversación de Alejandro Albalá con Sofía, en la que él le anunció que ya no deseaba ser su pareja por cómo le había tratado y ella se excusara asegurando que no se reconocía en el comportamiento que había tenido. “Ya sabes que yo necesito mucho cariño. Que tengo carencia. Y cuando alguien me lo da, bien sea hombre o mujer, me entrego”, y Sofía lo había hecho con Logan. Él le dijo ‘pío’ y ella pío desde el día uno de la aventura. Ahora Suescun siente que todo ha sido una estratagema del Tarzán del reality para acercarse a ella, conseguir visibilidad y, por consiguiente, apoyo fuera. “Me siento utilizada”, confesaba desesperanzada a su ¿ex? La etiqueta no la tenemos muy clara, igual que ellos tampoco.
Las explicaciones que dio Sofía, sin alterarse, sonaban tan sinceras que no solo casi convencieron a Albalá, sino también a la audiencia que por primera vez empatizó con la joven, a quien pierden las formas y la vehemencia. Jorge, tras oír cómo se explicaba la hija de Maite, también la comprendió. Ya en plató y mirando a cámara lo decía de una manera alta y clara: “Hay veces que yo entiendo a Sofía… ¡y hay veces que también entiendo a Letizia! ¡Muchas!”. Ambas mujeres sin nada que ver, pero que el presentador asoció por la rapidez y dureza con las que se las juzga, sin ponerse un momento en la piel de ambas. Y él, anoche, se puso. Al menos en la de la hija de Maite.