Joaquín Torres vuelve a la realidad tras su fugaz luna de miel con Raúl Prieto

De vuelta al trabajo, Joaquín Torres se ha sincerado con sus seguidores sobre en qué punto se encuentra y cómo afronta esta nueva etapa

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Rebeca Alonso

Redactora digital de Lecturas

Aunque han pasado dos semanas de su boda con Raúl Prieto (47 años), Joaquín Torres (52 años) sigue en una pompa de sentimientos. Hace solo unos días, volvía al trabajo en su estudio de Madrid después de una semana "emocionalmente dura e irrepetible". 

El arquitecto se ha sincerado con sus seguidores a través de Instagram al confesar que, por primera vez, le está costando más de la cuenta la vuelta a la realidad. "Mis hijos me han hecho reflexionar, mis amigos, Raúl... Volver me está costando", confesaba al mismo tiempo que enseñaba algunos de los rincones de su bonito estudio de trabajo donde las plantas tienen mucha presencia. "Sé que va a ser una semana muy dura pero me tengo que armar de valor. Hasta ir al gimnasio esta mañana me ha costado, pero no queda otra que avanzar", concluía. 

Este sentimiento de pesar por parte de Joaquín Torres se justifica en la delicada situación personal que está atravesando a consecuencia de la enfermedad de su madre. A pesar de todo eso, el arquitecto se muestra optimista con ganas de afrontar esta nueva etapa de su vida en la que se siente completamente libre e inmensamente feliz por haber dado el 'sí, quiero' al hombre de su vida. 

"Se hace duro, pero es tan inolvidable lo vivido estos últimos días, todo el cariño que he recibido y que seguimos recibiendo. Son tantos proyectos ilusionantes… que se hace todo más llevadero", escribía en la publicación no sin antes agradecer todos los buenos deseos que han recibido, "muchas gracias de corazón. Sois increíbles". ¡Dale al PLAY y no te pierdas nada!

A diferencia de su marido, Raúl Torres es mucho más hermético en todo lo relativo a su vida privada. De hecho, solo se limitó a compartir un mensaje muy breve aunque cargado de sentimientos tras su boda: "La noche de mi vida. Inolvidable. Gracias a todos por hacerlo todo tan especial. Gracias a mi amor, al amor de mi vida".

Se espera que los recién casados reaparezcan esta misma tarde en la boda de Kiko Matamoros y Marta López Álamo en Madrid, una nueva oportunidad para celebrar el amor rodeados de buenos amigos. El arquitecto y el director de televisión se adelantaron a todos y les hicieron llegar un regalo muy especial a casa, una obra de arte tamaño XXL que no pudo gustar más a los novios. 

Joaquín Torres y Raúl Prieto, obligados a retrasar su luna de miel

Aunque inmediatamente después de su boda, los recién casados pusieron rumbo a Cádiz para disfrutar de unos días de relax, la ciudad andaluza no era ni mucho menos su primera elección. Tal y como anunció 'Sálvame', el deseo de Joaquín y Raúl era viajar a Japón pero el delicado estado de salud de la madre del arquitecto ha impedido que la pareja disfrute de la luna de miel de sus sueños, al menos por el momento. 

En cambio, Joaquín y Raúl han disfrutado de unos días muy felices en Cádiz, tiempo en el que además de hacer balance de uno de los días más especiales de su vida han podido disfrutar de la gastronomía y los rincones más icónicos de la ciudad.

La preocupación de Joaquín Torres por el delicado estado de salud de su madre

Lo que podría haber sido un día sencillamente perfecto se veía ensombrecido por la ausencia de la madre de Joaquín Torres, quien no pudo asistir a la velada por su delicado estado de salud. 

Fue el pasado mes de mayo, coincidiendo con el Día de la Madre, cuando Joaquín habló por primera vez de su enorme preocupación por su progenitora. "El tiempo no perdona, ella cada día se me va un poco”, escribía sin ocultar su pesar. El arquitecto abría su corazón al reconocer que aunque intenta prepararse día a día para el trágico final “no imagino mi mundo sin ella, y mi pena por vivir lo que estoy viviendo es indescriptible”.