La incómoda postura de Irene Rosales tras los ataques de Kiko Rivera a su hermana Isa Pantoja

Irene Rosales se encuentra siempre en medio de la ballata familia de Kiko Rivera la víctima colateral de los ataques de Kiko Rivera a su hermana Isa Pantoja

Adrián López
Adrián López

Redactor digital de Lecturas

Irene Rosales
Gtres

La nueva entrevista de Isa Pantoja (28 años) en '¡De Viernes!' ha revuelto de nuevo a la familia de la tonadillera. Las desgarradoras palabras de a hija de la cantante han dejado a todos boquiabiertos porque cualquiera sabía que su relación no pasaba por sus mejores momentos pero no muchos de los feos que le han hecho a lo largo de los años. 

"No siento la necesidad de llamarla porque ahí me di cuenta de que es como si no la tuviese, es como si hubiese perdido por segunda vez una madre. En el momento en el que quiero ver si se preocupa por mí ella no muestra ni un mínimo de atención hacia mí. Es cuando realmente pienso que se ha acabado la relación", confesó Isa en el programa de Telecinco, confesando que su ingreso en el hospital le ha hecho ver muchas cosas. 

Pocas horas después de sus declaraciones, en las que confesó que había llegado a querer mucho más a su hermano Kiko que a su madre, el DJ ha contestado en sus redes sociales con un duro dardo. Y es que aunque no la nombre directamente a ella lo cierto es que no tendría sentido que Rivera pusiera este mensaje si no hubiera visto a entrevista de la influencer.  De hecho, con esta publicación la acusa de hacerse la víctima y con varios epígrafes desarrolla su idea y la explica: "victimismo crónico", de los que asegura tienen "pensamiento irracional y distorsionado que deforma la realidad", "inestabilidad emocional" o "baja autoestima", entre otras cosas.

Irene Rosales, la víctima colateral de la disputa

Pero en medio de esta guerra familiar y de los enfrentamientos entre Kiko, Isa e Isabel Pantoja siempre hay alguien que intenta mantenerse al margen pero que casi siempre se ve salpicada: Irene Rosales (33 años). La mujer del DJ, uno de los mayores apoyos del hijo de la cantante, ve cómo su marido utiliza las redes sociales para atacar a su hermana, contestar a sus reproches o cómo corta tajante la relación con cualquiera, algo que le afecta directamente. 

La verdad es que la relación entre Irene e Isa ha pasado por diferentes etapas pero desde que Kiko Rivera diera a Lecturas el pasado 2022 y sobre todo desde que al DJ le diera el ictus, todo cambió entre ellas. De hecho, la mujer de Asraf Beno aseguró hace unos meses que era algo que ya no le importaba demasiado: "No me parece esencial tener una relación con Irene para tenerla con Kiko". 

Además, Isa decidió poner punto y final cuando no recibió respuesta tras felicitar a una de las hijas de su hermano por su cumpleaños. Se hartó de tantos feos. "Ni públicamente ni en privado ha tenido un gesto de acercamiento conmigo. He echado en falta un poco de empatía. A mi cuñada Irene la respeto, pero no quiero que se interponga entre mi hermano y yo", dijo Isa en el 'Deluxe'.  

Ambas tenían buenísima relación antes de que todo saltara por los aires, pero desde entonces ninguna está por la labor y todo ha ido a peor. De hecho, Irene contó en las páginas de Lecturas que no estaba de acuerdo en lo que Isa Pensaba de su hermano: "Ella sabe que Kiko no es maltratador ni agresivo. En su vida ha maltratado, ni física ni psicológicamente a una mujer". De hecho, la modelo dejó claro que no entendía por qué decía todas esas cosas cuando sabía que eso podría "destruir" y "dañar" al DJ. 

Sin duda Irene debe defender a su marido pero eso ha afectado a sus relaciones con su familia política. Sobre su suegra, Rosales, que siempre había tenido buen trato, se sorprendió mucho con que la cantante cortara la relación. "Les pasaba algo a las niñas y a las primeras personas que yo llamaba eran a mi madre y a ella. Creía que esa relación iba a seguir", explicó en Lecturas. "Quería ver en ella la protección de una madre. No quiero decir que la fuera a llamar mamá pero necesitaba los consejos que te puede dar algún tipo de madre, o simplemente el descolgar un teléfono y que me escuchase", añadió la nuera de la tonadillera, hastiada con cómo las palabras de Kiko rompieron con todo. 

"Ella se habrá sentido defraudada, no querrá saber de mí. Tendría que hablar con ella, no voy a hacer como si las cosas fueran de repente de color de rosa. Todos los problemas de la familia vienen por una falta de comunicación, por eso nunca se soluciona nada", sentenció Irene, dejando la puerta abierta a una posible reconciliación que por ahora no ha ocurrido. Eso sí, suponemos que cuando Kiko sufrió el ictus y la artista acudió al hospital habría un encuentro con ambos. Un momento que desde luego no supuso un puente para arreglar las cosas.