Fernando Verdasco y Ana Boyer, al descubierto: de su situación económica a sus propiedades y nuevos proyectos

A punto de ser padres por tercera vez, Ana Boyer y Fernando Verdasco pueden presumir de empresas, propiedades y muchos negocios. Te los contamos

Noelia Zazo
Noelia Zazo

Periodista especializada en corazón

Adrián López
Adrián López

Redactor digital de Lecturas

Fernando Verdasco y Ana Boyer

Las novedades se acumulan para Ana Boyer (35 años) y Fernando Verdasco (40 años). Después de seguir los pasos de su hermana Tamara en los fogones y alzarse con la victoria de 'Bake Off: famosos al horno' en TVE, la hija de Isabel Preysler no para. La pareja dio la bienvenida a su tercer hijo en común el pasado agosto cuando todos los ojos estaban puestos en la maternidad de su hermana con Íñigo Onieva. Una buena nueva que llegó a la familia en uno de los momentos más dulces de los últimos meses. Seguro que tanto su progenitora como todos sus hermanos se encuentran felices por pasar las Navidades con uno más entre ellos

Pero, ¿cómo es la situación familiar ahora que son uno más? ¿De qué viven Ana Boyer y Fernando Verdasco? Analizamos las cifras de una de las parejas más seguidas y rentables del 'show business'. Los negocios, propiedades y empresas que regentan la hija del desaparecido Miguel Boyer y uno de los tenistas más conocidos de nuestro país. Boyer y Verdasco tiene su futuro asegurado pero ¿y el de su familia ahora que son familia numerosa? Estas son las cifras de su día a día.

El estilo de vida nómada de Ana Boyer y Fernando Verdasco

De lo que si hablaron fue de su historia, de la familia que han formado con sus tres hijos y de su vida nómada entre Madrid, Doha (Catar), y toda aquella ciudad en la que Verdasco tuviera que competir. El tenis ha sido el centro de sus vidas porque él se ha dedicado profesionalmente a ello desde 2001 y es la razón por la que le conocemos. De hecho, ella lo dejó todo cuando comenzaron su relación, viajaba junto a él siempre que podía, incluso después de tener a sus hijos, que también los acompañaban hasta que en septiembre de 2023 decidiera retirarse para siempre. 

Y es que sus últimas lesiones no le dejaron continuar con sus sueño como profesional de las raquetas: "Después de la operación de rodilla tardé mucho en recuperarme a finales de 2020 y justo cuando me empiezo a recuperar en junio de 2021 me rompo un hueso del codo y me tengo que volver a operar en julio. Y en julio de 2022 me tuve que volver a operar porque me salió un callo en la articulación que había que quitar", dijo a Bertín Osborne sobre los motivos por los que debía dejar el tenis. Eso sí, parece que al menos hasta este verano Verdasco todavía no aparecía como retirado en la Agencia Internacional de Integridad en el Tenis. De hecho, ha trabajado como entrenador en Roland Garros, donde compagina su empleo de técnico de Alejandro Davidovich y Ons Jabeur. 

Lo bueno de no estar tan liado con tantos partidos ni tantos viajes es que Fernando se puede dedicar un poco más a su familia. "Fernando está muy bien. Es una persona muy inquieta y siempre está buscando cosas nuevas que hacer y nuevos proyectos. Yo creo que está disfrutando ahora porque llevaba más de 20 años viajando todas las semanas. Así que un poco de cambio y estar un poco tranquilo en casa ahora que tenemos niños pequeños pues está disfrutando mucho", ha asegurado Ana Boyer en la presentación de la colección en TRUCCO, donde ella es ahora imagen. Una nueva fuente de ingresos. 

Las empresas de Ana y Fernando 

Para gestionar su imagen y las ganancias derivadas del deporte, Verdasco creó en 2004 ‘Ferek Imagen’ una sociedad limitada con domicilio social en Madrid dedicada a “la representación comercial y la explotación de los derechos de imagen, así como el asesoramiento técnico y administrativo de deportistas y artistas”. Los primeros 18 años de vida de la empresa ha sido administrada en soledad por el deportista, contando con el apoyo de su padre o su hermana Sara como apoderados, algo que cambió a finales de 2022, momento en que Verdasco se desvinculó de su propia empresa por lo completo. Y eso que siempre arrojó unos resultados muy positivos, aunque bien es cierto que más tímidos en los últimos años, sobre todo a raíz del parón que supuso la pandemia por la COVID-19 para todos. Sin embargo, el total activo de la sociedad sigue alcanzo la nada desdeñable cifra de millón y medio de euros, por lo que este último movimiento es difícil de entender.

Fernando Verdasco y Ana Boyer, empresarios de moda

Ocurrió lo mismo con ‘Cocowi Brand SL’, una sociedad textil que arrancó con un amigo en 2020 para gestionar la venta de una firma de gorras a la que recientemente se han añadido gorros, con una fruta como elemento distintivo. A pesar de que se trató de un proyecto personal que la pareja puso en marcha junto a su socio, lo cierto es que a día de hoy ni el nombre de Ana ni el de Fernando aparecen en el Registro Mercantil, aunque si siguen utilizando su imagen para dar publicidad a la firma y reposteando los momentos en que sus allegados más conocidos también las lucen, por lo que resulta evidente que la vinculación continúa existiendo.

Ana, por su parte, solo en una ocasión se aventuró en el mundo de los negocios y le duró más bien poco. En 2013 dio de alta la sociedad ‘Jacaranda Cosméticos SL’, que pocos meses tarde pasó a ser ‘Jacaranda producciones SL’, la domicilió en casa de su madre en Madrid, con un capital inicial de 3.000 que siempre ha sido el único activo de la empresa, pues desde el año siguiente permanece inactiva. Modus operandi que ya se había dado ‘Mustique Proyectos SL’, dada de alta en 2013 y que en realidad nunca llegó a registrar movimiento alguno. Desde hace años, los únicos ingresos de Ana vienen de las campañas con firmas a las que una o dos veces al año presta su imagen como reclamo publicitario.

Todo sobre las propiedades de Ana Boyer y Fernando Verdasco

En cuanto a las propiedades, tampoco tienen a nada a su nombre ninguno de los dos en España. En 2020 Fernando vendió el chalet que tenía en la urbanización de El Bosque por 1,6 millones de euros. El resto de los inmuebles que ha ido comprando a lo largo de su fructífera carrera en los campos de tenis, estaba a nombre de la empresa de la que se ha desvinculado. Un piso en Pozuelo de Alarcón, y dos apartamentos de verano en El Rompido (Huelva) con sus plazas de garaje correspondientes y en primera línea de playa.

Es evidente que la pareja problemas económicos ni tiene ni espera, además Verdasco, más allá de su sueldo como entrenador de la ATP, es uno de los representantes de España en Qatar, país que tiene fijado como su residencia permanente desde que se acogió a un programa con ciertos beneficios del régimen qatarí. La familia, debe pasar allí un mínimo de 183 días al año para poder mantener este estatus, y él, dice que desde que se mudó en 2016 está “enamorado” de la ciudad, aunque lo cierto es que sobre todo desde que nacieron sus hijos pasan también bastante tiempo en Madrid, ¿se habrán planteado quedarse de manera definitiva?