Hace ya muchos años que Mónica Cruz (47 años) forma parte de la familia televisiva. Su éxito interpretando el papel de Silvia Jáuregui en la serie ‘Un paso adelante’ (Antena 3) la catapultó a la fama. Después de eso, rodó películas en Francia e Italia, además de formar parte del elenco de actores de ‘Caminando’, junto a Lolita Flores y Antonio Canales. También participó en ‘Last Hour’, 'Asterix y los juegos olímpicos’ y en la cuarta entrega de ‘Piratas del Caribe’, haciendo de doble de su hermana Penélope que, en ese momento, estaba embarazada. La serie ‘Águila Roja’ es otro de sus títulos más conocidos. Esta trayectoria la ha complementado con su faceta de diseñadora de moda, modelo –llegando a desfilar junto a Natalia Vodianova en 2016–, influencer y bailarina.
Con tan solo tres años, la pequeña de las Cruz ya soñaba con hacerse un nombre en este mundo. Se formó para ello en la Real Academia de Danza Clásica y en el Instituto de Ballet Clásico de Madrid, aprendiendo ballet y el arte de la coreografía. Practicaba once horas al día. En la actualidad, la hija de Eduardo Cruz, un mecánico de coches jubilado, y Encarna Sánchez, peluquera, está muy volcada en la producción de espectáculos de danza española como coreógrafa, además de su participación en la primera edición de celebridades de ‘Maestros de la Costura’.
Todo esto sin olvidarse de la faceta más importante de su vida, la de ser madre. Hace ya doce años que decidió convertirse en madre soltera de Antonella Cruz Sánchez, su única hija. Sin duda, su parcela privada es la que más se desconoce pese a pertenecer a una de las sagas más importantes del país.
Desde que la pequeña llegó a su vida, Mónica Cruz decidió llevar una existencia tranquila y discreta en su casa a las afueras de Madrid. Se trata de un chalet en San Agustín del Guadalix de estilo rústico que se encuentra dentro de la urbanización de Valdelagua. Rodeado de naturaleza y alejado del ruido y ajetreo de Madrid, es el refugio perfecto para la bailarina, su hija y sus seis perros.
IG @monicacruz
Lo que más llama la atención de la casa de la actriz es su fachada, pintada de un color entre rosa y malva con ventanas de madera oscura. Cuenta con un gran jardín y un porche a la entrada de la vivienda con unas escaleras de piedra. En el interior, el espacio preferido de Mónica Cruz es el salón, decorado con tonos neutros que aportan calidez al espacio.
En el centro, un sofá chaise longue en color beige a juego con los cojines que contrastan con las cortinas de estampado floral. El suelo laminado de madera y la chimenea en medio de la estancia complementan esta habitación y hacen de ella el refugio perfecto. Además de la gran biblioteca con la que cuenta en una de las paredes. La actriz tiene además otra sala de estar para recibir a las visitas. Está decorada en un estilo más antiguo con puertas lacadas en blanco, muebles antiguos y es de apariencia más señorial.
El resto de la casa va muy en la tónica. Con mucha luz natural, la cocina es la otra alma de la casa. El marrón de una de las paredes de ladrillo barnizada contrasta con el blanco inmaculado de los muebles, la encimera y la isla central. Los electrodomésticos van incorporados, lo que hace de esta estancia una de las más modernas que combina con una vajilla rústica.
Un amplio jardín que rodea la casa
Este acogedor y amplio chalet también cuenta con un jardín privado, indispensable para sus seis perros, que son uno más en la familia Cruz. Como dice, para ella la felicidad "tiene pelos y cuatro patas". El exterior rodea toda la casa y es donde la actriz juega con ellos y su hija, además de aprovechar sus ratos libres para relajarse al sol leyendo o desayunando mientras ve el paisaje.
IG @monicacruz
Así está siendo su participación en ‘Maestros de la Costura’
Hace un año ya regresó a televisión al sumarse a 'El Desafío' y la hemos visto en varias ocasiones en el plató de 'Zapeando'. Ahora muestra sus dotes con la aguja y el hilo en los talleres de ‘Maestros de la costura’. No es la primera vez que está en este plató. En 2018, fue una de las invitadas, junto a Óscar Higares y José Corbacho, para visitar el programa.
Le tocó echar una mano a Eduardo Navarrete confeccionando un vestido de novia, pero la cosa no terminó muy bien entre ellos. El comportamiento del diseñador no fue de lo más correcto. "Mona es, pero de coser no tiene ni idea", llegó a decir él. Su trato despectivo hacia la actriz fue considerado como motivo de expulsión a las puertas de la final del concurso. Ahora es ella misma quien demuestra su talento con la aguja e hilo en la temporada presente.
TVE
Curiosamente se volvieron a ver las caras en el primer episodio de este año tras las viejas rencillas del pasado. "Tenía muchas ganas de que llegara este momento porque yo nunca he tenido ningún problema con él", dijo muy educada ella.
Este miércoles, el espacio de Televisión Española celebra con los aprendices el 30º aniversario de la firma Lorenzo Caprile en la exposición retrospectiva del modista. Además recibe la visita de la actriz Rossy de Palma, la cantante Marta Sánchez y el estilista Pelayo Díaz antes de que ponga rumbo a ‘Supervivientes’. Aunque sin duda uno de los grandes momentazos de este programa será cuando se conozca el nombre del aprendiz repescado y el del expulsado de la noche, que se lo jugarán todo en el taller recreando un look libre inspirado en Lorenzo Caprile.