Nacer en el seno de una familia real tiene sus ventajas y sus inconvenientes. El príncipe Guillermo (42 años) y Kate Middleton (42 años) siempre han tratado que sus hijos se críen en la más absoluta normalidad, pese a pertenecer a la familia real británica. Además, lo hacen para que puedan disfrutar de su etapa infantil. Sin embargo, sabíamos pocos datos de cómo es realmente la verdadera vida escolar de George, Louis y Charlotte que cuenta con diferentes particularidades.
Los Príncipes de Gales saben de la importancia porque sus hijos se tomen en serio sus estudios, debido fundamentalmente a lo que les espera en un futuro como representantes de la Corona británica. No obstante, ambos han manifestado en diferentes ocasiones que su mayor deseo es que sus tres hijos disfruten de cada etapa que les toque vivir, especialmente la infantil en la que deben olvidarse de todas las presiones que les esperan en un futuro próximo.
El apodo de George, Louis y Charlotte para su adaptación en la escuela
El príncipe George y la princesa Charlotte comenzaron su andadura académica en la prestigiosa escuela de Thomas's Battersea en Londres. En el año 2022 los dos hermanos mayores se trasladaron a la Escuela Lambrook en Berkshire, donde también acudía el príncipe Louis. Sin embargo, para propiciar su adaptación a este entorno y no ser denominados por sus cargos como miembros de la realeza en el colegio utilizan apodos para pasar desapercibidos.
En la primera escuela al hijo mayor del heredero de la Corona se le conocía como PG que hacía referencia a su título nobiliario. Con posterioridad, tanto George como Charlotte comenzaron a utilizar el apellido de 'Cambridge'. Con el traslado a Lambrook los tres pasaron a utilizar 'Gales' como apellido para así poder encajar mejor en el ámbito de la escuela y no ser conocidos por su estatus real, tal y como revela el diario británico 'The List'.
Los problemas de adaptación del príncipe George a la escuela
El primer día de colegio siempre es complicado. Guillermo llevaba de la mano a su hijo y sus muecas hacían presagiar que algo no iría bien. Sin embargo, a su salida del colegio declaró que todo había ido bien y que había otros padres con más problemas, algo de lo que se alegraba por no ser el señalado. Sin embargo, con el paso de los días comenzaron a publicar en los medios británicos lo mucho que le estaba costando adaptarse a la escuela.
De hecho, algunos padres comenzaron a revelar que George no quería ir al colegio, al igual que otros muchos niños de su edad. No obstante, la situación fue cambiando, ya que se convirtió en uno de los niños más populares de su colegio, lo que le llevó a conseguir multitud de amigos. De hecho, el hijo mayor de Kate organizó una fiesta en el Palacio de Kensington para todos sus amigos, aunque evidentemente las medidas de seguridad tuvieron que estar presentes aunque se tratasen de niños.
El desagrado de la princesa Charlotte por los exámenes
La hija de los Príncipes de Gales siempre ha mostrado su mejor versión ante la prensa. De hecho, conforme va creciendo se nota su madurez, además de ser un gran pilar para sus padres y especialmente para su madre en este proceso de la enfermedad que está atravesando. Pero su atrevimiento en determinadas apariciones la ha caracterizado, tanto que incluso ha traspasado también a su etapa estudiantil.
Para cualquier joven realizar un examen es un momento bastante complicado. Para Charlotte también, ya que ni los miembros de la realeza se saltan esta norma en la vida escolar. De hecho, el propio Guillermo declaraba a las puertas del colegio las pocas ganas que tenía su hija de hacer estos exámenes. Sin embargo, no es la única, ya que su hermano mayor confesaba a su madre no entender porque tenía que hacer una y otra vez diferentes exámenes.
Pero la popularidad no es solo cosa de George. Charlotte ha conseguido grandes amigos gracias a esta increíble popularidad. Según indica el citado medio inglés, "tiene una personalidad fuerte y es el tipo de niña que sabe lo que quiere y no deja que nada se interponga en su camino". Además, destacan la bondad de la princesa con el resto de sus compañeros y aplastadora seguridad en sí misma.
La expresividad del príncipe Louis en su vida escolar
Si hay algo que caracteriza al hijo pequeño de la Princesa de Gales es su expresividad, la cual no oculta en ningún momento debido a su innegable espontaneidad. Por ello al príncipe Louis no le cuesta nada expresar sus sentimientos. "Es realmente bueno... son niños de 5 o 6 años, y van con nombres o imágenes de un color que representa cómo se sienten ese día, por lo que hay un verdadero entusiasmo en la escuela, particularmente por involucrarse en las conversaciones", reveló Kate en una entrevista de televisión.
De hecho, para Middleton es muy importante este hecho, ya que así se rompe con la rigidez que suele caracterizar a todos los miembros de la familia real británica y que durante el último tiempo están consiguiendo vencer por las enfermedades que han atravesado dos de sus miembros. Por ello, los tres hijos se han adaptado a la perfección a esta vida escolar, aunque en un principio nada fuera fácil para ninguno de ellos.