La reina Letizia (50 años) está disfrutando de unos días de descanso en Mallorca junto al rey Felipe VI (55 años) y sus hijas la princesa Leonor (17 años) y la infanta Sofía (16 años). Además, se ha dejado ver con la reina Sofía (84 años) derrochando una gran complicidad, que ha sido cuestionada. Sin embargo, doña Letizia tiene por delante una etapa llena de miedos que podría acentuar su soledad.
Y es que, en menos de 48 horas, su primogénita entrará a formar parte de la Academia Militar de Zaragoza. Allí, la heredera al trono comenzará su formación militar, donde deberá seguir unas estrictas normas y protocolos, así como conocer todos los aspectos de esta profesión. Además, en pocos meses, Leonor cumplirá dieciocho años y será mayor de edad, cruzando así una barrera más y alejándose cada vez más de la gran protección y guía de su madre.
Por otro lado, la infanta seguirá los pasos de su hermana y, a final de mes, pondrá rumbo al UWC Atlantic College. El prestigioso centro recibirá a los alumnos de primero de Bachillerato, de manera que Sofía podrá conocer a sus compañeros y compañeras y conocer como será su vida durante el próximo año. Esta será la primera incursión alejada de su familia que realizará la infanta, lo cual le abrirá nuevas puertas.
Estas dos marchas, sumado a la mala relación con la infanta Cristina y Elena, las cuales están esperando la marcha de Letizia para pasar unos días en Marivent, y la tensión con la reina Sofía, hace que la reina se enfrente a una época más solitaria de la que está acostumbrada.
¿La complicidad? de la reina Sofía con Letizia
Después del posado familiar en los jardines de Alfabia, era la imagen más espeada. Hace unas semanas, los reyes Felipe y Letizia organizaron la tradicional recepción a la sociedad civil de las Islas Baleares en el Palacio de Marivent. A ellos se unió, como es habitual, la reina emérita, quien se dejo ver, por primera vez, con los reyes desde su llegada a Mallorca.
Uno de los temas constantes ha sido la relación entre la reina Letizia y la madre del rey y se buscaba esa imagen juntas en Mallorca. Tras la aparición se apreció que ambas estaban muy conjuntadas con sus estilismos pero bastante distanciadas en general. Llamó especialmente la atención la complicidad y el cariño que mostró Felipe VI con su madre.
En lo que se refiere a las dos reinas, ambas se han proferido una serie de confidencias, momento que era captado por las cámaras. De hecho, doña Letizia no dudaba en hacer un gesto de cariño a la madre de su marido mientras caminaban hacia el interior de palacio.
La última vez que se las vio juntas fue hace apenas dos meses con motivo de la confirmación de la infanta Sofía. Allí protagonizaron una estampa muy similar a la de este jueves, aunque la de hoy ha sido mucho más comedida. Ha medida que han pasado los minutos han demostrado que no hay malos rollos entre ellas e incluso se han mostrado cómplices.
Los detalles de estilo a los que tendrá que renunciar Leonor al empezar su formación militar
Esta formación es un cambio de vida, pero también de estilo. La princesa podría tener que renunciar a algunos detalles de su forma de vestir cuando comience su formación. Una de las señas de identidad de la princesa Leonor, es su melena rubia. Desde niña, su pelo siempre ha llamado la atención por su color, por lo abundante que es su melena y por cómo sabe sacarle partido. Desde las trenzas que siempre llevaba de pequeña hasta los recogidos juveniles que ha lucido en algunas de sus últimas apariciones, Leonor ha demostrado que sabe aprovechar la versatilidad de su pelo. Pero en la academia tendrá que ceñirse a unas normas sobre cómo peinar su melena.
Las normas dicen que en el caso de las mujeres con pelo largo, tienen que “llevar el pelo recogido en un moño, si es melena, en formaciones de especial relevancia, y en coleta o trenza para las actividades de instrucción y campaña o deportivas”. Así que la princesa Leonor tendrá que decir adiós a su melena suelta o a esos recogidos desenfadados en los que suele llevar mechones sueltos. Además, tendrá que tener en cuenta si tiene que ponerse algún accesorio en la cabeza. En este caso, “su longitud y peinado será tal que permita la correcta colocación de la prenda de cabeza".