Este domingo, los reyes Carlos y Camilla han sido fieles a una de sus grandes tradiciones. Para poner punto y final a la Semana Santa, el monarca y la consorte han acudido a la tradicional misa de Pascua. El matrimonio ha hecho aparición en la capilla de San Jorge, ubicada en el castillo de Windsor, para asistir a este servicio religioso que suele ser motivo de reunión con miembros de la familia. Sin embargo, este año esta misa se ha caracterizado por quedar un tanto desangelada. Principalmente, por la ausencia que hasta hace unos días nadie esperaba. Pero en las sorpresas, también ha habido una presencia que ha resultado toda una sorpresa.
Entre los asistentes al evento, ha estado Andrés de York. Tras meses sin hacer aparición conjunta con su familia, el duque de York se ha acercado hasta la capilla de San Jorge. Sus hijas Beatriz y Eugenia de York también han acudido, junto a sus respectivas parejas a esta mañana tan importante para el rey Carlos.
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Otra sorpresa ha sido que Sarah Ferguson, mujer de Andrés de York, se ha sumado a este acontecimiento. Una presencia completamente inesperada que ha servido para paliar la ausencia más sonada.
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La sonada ausencia de Guillermo y Kate
El príncipe Guillermo y Kate Middleton sorprendieron días atrás al rey Carlos al comunicarle su decisión de no acudir a la misa de Pascua. El año pasado se ausentaron debido a la enfermedad de la princesa de Gales, pero este año se esperaba que reaparecieran en este acto tan especial para la familia, en especial para Carlos III. Sin embargo, hace unos días comunicaron al soberano su decisión de ausentarse debido a una razón que para ellos es la más poderosa.
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Tal y como contaron algunos medios británicos, el motivo por el que el príncipe Guillermo y Kate Middleton decidieron ausentarse del servicio religioso de hoy, era el priorizar sus vacaciones junto a sus hijos en su casa de Anmer Hall. La pareja no estaría dispuesta a adelantar su vuelta de los días de descanso ni siquiera un día y preferiría aprovechar al máximo esos momentos aunque esto implique que lo más comentado de eventos como el de hoy sea su ausencia.
Los reyes Carlos y Camilla, junto a otros familiares
Lo que han pretendido el rey Carlos y la reina Camilla en su aparición de hoy, ha sido dar imagen de normalidad pese a la ausencia del príncipe Guillermo, Kate Middleton y sus hijos George, Charlotte y Louis. Para el monarca no debe ser fácil sumar a la ausencia del príncipe Harry y Meghan Markle la de Guillermo y Kate. Más si cabe teniendo en cuenta que estos últimos son los herederos y que con movimientos así ponen en jaque la imagen de la Corona. Pero cuenta con fieles escuderos con los que calmar las aguas.
A su llegada, Carlos III y Camilla Parker Bowles han saludado con la mejor de sus sonrisas. Además, se ha podido ver el look elegido por la consorte para esta jornada tan señalada. Esta vez, ha optado por una opción de color primaveral como es el celeste. Lo ha lucido en un elegante abrigo con bordados y una pamela a juego con aplicación de flor.
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Además, los reyes Carlos y Camilla no han estado solos. Pese a la sonada ausencia, ha habido otros miembros de la familia más allá de Andrés de York, Sarah Ferguson y sus hijas que sí que se han trasladado hasta la capilla para estar junto a ellos y fomentar esa imagen de unión de los Windsor. Se trata de sus más fieles escuderos.
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La princesa Ana y su marido Tim y Eduardo y Sophie de Wessex no han faltado a esta cita. Sin duda, los hermanos y cuñados de Carlos III se han convertido en su salvavidas cuando se trata de dar ese mensaje de unión familiar.
Algo que ha vuelto a suceder este domingo en el que todos han lucido sus galas más elegantes para poner punto y final a los días de Pascua.